Time ღ vhope.

Minuto 5.

— Lamento tanto la tardanza, estaba haciendo una sesión de fotos a SeokJin hyung, ¡Y es que es tan quisquilloso con las fotos! — reprocha un castaño agitado con una mueca en su rostro.

— Descuida, no pasa nada — dice el pelinegro con mala cara.

Hoseok había estado esperando por más de dos horas en el parque, había quedado con Taehyung para ver el atardecer juntos, cosa que no pasó así, porque el estúpido de su novio había tenido sesión de fotos con quién sabe quien y lo había olvidado por completo.

El pelinegro no sabía de dónde rayos había salido tal sentir, ya había pasado antes algo sobre la impuntualidad de Taehyung y él se lo había perdonado, había pensando que no sucedería de nuevo, pero pasó, y está vez no se quedaría más a soportar el pequeño dolor que se instalaba en su corazón.

— ¿Estás bien? — le preguntó el castaño, pues notaba raro a su novio, sabía que lo había arruinado, pero tenía que hacer su trabajo y no creía que había sido para tanto. — No me vas a responder, eh — su voz suena peligrosa, no sabe bien como sentirse al respecto, jamás había sido ignorando por el chico que estaba a su lado, y dolía.

— Será mejor que nos veamos mañana, Taehyung — suelta el pelinegro con un tono de voz dolida y molesta, se pone de pie para comenzar a caminar pero una mano toma la suya sin la intención de soltarle.

— ¿Estás molesto? De verdad, yo lo siento mucho Hobi.

— ¿Qué lo sientes? Por una mierda tú no sientes nada, es la tercera vez que sucede, yo estaba esperando por tí, y tú llegas... olvídalo, me voy a casa. — le dice con rabia, quizá pensaba que su sentir era absurdo, pero cada persona tiene diferentes formas de sentirse, todos funcionamos diferente, y eso le había dolido. — Suéltame.

El castaño afloja el agarre sintiéndose basura, era verdad, había descuidado un poco a su novio pero no era nada intencional, había tenido más trabajo de lo usual, había crecido como fotógrafo en tan poco tiempo pero aún así, buscaba un pequeño hueco en su apretada agenda para él, para su novio el cual se marchaba caminando a paso lento, no pensó dos veces para salir corriendo detrás de él, no le iba a reprochar nada, pero tenía que aclarar bien las cosas.

Jamás habían discutido antes, y hoy que sucedía por primera vez, se sentía tan extraño, no podía estar mal con su novio.

— Hoseok, perdóname — suelta sin más vueltas el castaño, busca la mirada de su novio el cual no se atreve a voltear, sus ojos están llenos de pequeñas perlas cristalinas que caen por sus mejillas, eso quiebra totalmente a el fotógrafo, el cual posa sus manos en las mejillas del pelinegro.

Entonces Taehyung se siente mal, terriblemente mal, no podía verlo en ese estado, su novio siempre sonreía, siempre estaba tan lleno de vida, y ahora que lo veía así, sentía que tenía que hacer lo que fuera para que volviera a sonreír, para que volviera a brillar.

— Se que no tengo una buena justificación, se que he estado fallando estos últimos días, y de verdad lo lamento, no mereces eso, si tú me dejas, yo puedo arreglarlo, se que...

— ¿Ya no me quieres? — interrumpe el azabache sin más, alejándose del agarre del castaño, haciendo que más lágrimas caigan hacia el suelo, levanta la vista y ve a su novio confundido por lo que acababa de preguntar, y repite — Dime, ¿Ya no me quieres, Taehyung?

El fotógrafo no sabe de dónde es que había salido tan repentina pregunta, y sin dar tantas vueltas responde.

— Por supuesto que te quiero, lo hago, ¿Por qué no lo haría más? Hobi, yo te amo, no podría dejarlo de hacer, ¿Por qué te has preguntado eso? — cuestiona, mientras su novio sorbe su nariz con algo de pena.

— Tú... pasas tanto tiempo con personas tan lindas, fotografiándoles, porque son bonitas, y yo, bueno yo...

— ¿Estás celoso? — dice sin más y el azabache se pone colorado interrumpiendo así rápidamente.

— ¡No es así! ¡No es lo que tú crees! ¿Celoso yo? Por favor — responde sonando gracioso, usando tonos de voz distintos, para después volver a llorar y decir. — Sí, lo estoy.

— ¿Por qué?

— Ya te lo dije, tú podrías fácil enamorar a cualquiera, o incluso que ellos o ellas se enamoren de ti, solo mírate — dice bajando la mirada. — No desconfío de ti, pero si de los demás, tengo miedo de que suceda y tú, tú te vayas de mi lado...

— Escucha — contesta el castaño levantando la mirada de su novio con su dedo índice en la barbilla. — Yo te amo a ti Hoseok, te amo solo a ti — le dice viendo como sus miradas se conectaban.

Sin decir más, Hoseok se lanza a su novio en un abrazo necesitado, sentir la calidez que su novio le ofrecía era como algo que necesitaba a cada instante, el pelinegro esconde su rostro en el cuello del fotógrafo para después susurrar.

— Yo también te amo solo a ti, Taehyung.

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