↬ One shot's Rulexby
↬ Si eres homofobico o simplemente no te gusta este tipo de historias, no denuncies, solo ignora.
#17 en Rulexby 28/07/2018
#8 en Rulexby 30/07/2018
#1 en Rulexby 25/09/2019
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Eran las 4:52 AM. Me encontraba caminando con mi amigo, Rubius, por las calles de Madrid luego de salir de una fiesta.
Las calles se encontraban oscuras, solo un poco de luz las iluminaban.
Hacia frio, yo estaba temblando.
— ¿Como es que no tienes frio? - mire a Ruben.
— Este abrigo es muy calentito. - Se encogió de hombros.
Iba a contestarle, pero un trueno me interrumpio.
— Mierda, eso avisa que se va a largar una buena. - Comente, mirando al cielo.
Y como si lo hubiera predicho, una lluvia torrencial comenzó a caer por las calles de Madrid. Tome la mano de Ruben y corrí hacia el techo de una tienda de ropa. Esta, obviamente, se encontraba cerrada.
— Oye, ya puedes soltar mi mano. - Hablo Ruben. Dirigi mi mirada a nuestras manos entrelazadas. Me tomo un par de segundos pero reaccione y solte su mano.
— Lo siento, estaba caliente. - Me excuse, aunque era la verdad.
Metí mis manos a mis bolsillos de mi sudadera, tratando de calentarlas.
Senti unos brazos pasarse por mi cintura y apretujarme contra un cuerpo caliente. Alce la mirada y ahí estaban los ojos de Ruben, mirándome fijamente.
— Para que no tengas frío. - Hablo.
Asentí, aun sin quitar mi mirada de sus ojos.
— ¿Tus ojos son verdes o marrones? - pregunte mirándolos fijo.
— Una mezcla. - Murmuró.
Cuando sentí su respiración cerca de la mía reaccioné y me separe. Tosí y me di vuelta, dirigiendo mi mirada a las gotas que caían del cielo.
Escuche su suspiro y luego como se sentaba en el piso.
— ¿No esta frió? - pregunte, refiriéndome al piso.
— Se puede soportar. - Se encogió de hombros. - Siéntate.
— No, tu lo soportas, yo no. - Rechace su oferta.
Sentí su mano tomar la mía y tirar de ella con fuerza, haciendo que yo tropiece y, oh vaya, caiga en sus piernas sentado.
— ¡Ruben! - le reprimi. El lo único que hacia era partirse de la risa. - ¡Idiota! - golpee su pecho y me cruce de brazos, molesto.
— ¡Eh!, encima que te ofrezco asiento sobre mis piernas me pegas. - Se quejo.
— Yo nunca te pedí que me dejes sentarme aqui. - Ruben rodó los ojos.
