CAPÍTULO 3

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Eric

Me oculto en uno de los cuartos abandonados del castillo que se hallan en lo más recóndito del castillo en la zona de cocina en almacenamiento y rebusco dentro de las calderas, donde dentro de una de ellas se encuentra el comunicador que he estado usando para localizar a Jonson. El cual él me ha obligado a traer para reportarle sobre Sara.

- Jonson, ¿me escuchas?

- Si idiota, te escucho.

- Perfecto, necesito que saques a Sara de aquí como se te dé la gana.

- ¿Qué drogas te han inyectado Eric?

- Ninguna droga, deja la ridiculez.

- Entonces, ¿Qué está pasando?
Suspiro. No existe forma de que este no sea un golpe fuerte para él.

- Siéntate.

- Deja el espectáculo para tu show de circo y habla de una vez, estúpido.

- Se trata del experimento.

- Ya averiguaron ¿porque es tan importante para los gobernantes?

- No, se trata de algo peor.

- No se encuentra en los laboratorios, ¿cambiaron el cuarto?, ¿Era falsa la información?...

- No, Jonson, ¿puedes cerrar el pico de una pinche vez?

- Entonces habla de una vez, por el amor a cristo.

- No metas a cristo en este circo de pacotilla y con respecto a la información, en la habitación donde se supone que debe estar el experimento, he encontrado a Henry
Williams - un silencio que parece interminable se aloja entre las líneas. Entiendo cómo se debe sentir, pero es mejor que se entere antes de que sea tarde – Jonson, tu padre es el experimento 301AS y es evidente la razón por la que es peligroso para ellos. Pero es necesario que ahora saquemos a Sara de aquí antes de que se entere de todo esto.

- ella, ¿ella aún no sabe nada de esto?

- No, como se te ocurre que le diría algo así. Ella fue quien abrió ese sobre verde y supo de su muerte, conoces perfectamente cómo se puso. No se movió de la cama por tres semanas
enteras y crees que sería capaz de decirle "no Sara, imagínate que tu padre no está muerto, estaba de parranda. Por cierto es el experimento que tanto hemos estado buscando". Soy una horrible persona, pero no tanto.

- ¿Cómo pretendes sacarla de allá?

- No se Rick, pensaba decirle "oye, ¿qué te parece si nos vamos a casa, nos tomamos unas cervezas y dejamos botada la misión?, no importa lo que piense Jonson, da igual" y ella
vendría conmigo así como si nada. Deja la ridiculez, si te llame es para que pensarás en algo, sino lo hubiera hecho por mí solo y listo.

- Ok, relaja las tetas ¿quieres?...

- si no te diste cuenta, soy chico y NO TENGO TETAS

- olvídalo, primero háblale de la existencia de este comunicador a Sara, ¿puedes?

- Si, si, como sea.

- Luego, busca la forma de que los dos salgan de allá, porque Eric, no pensarás que te voy a dejar estar solo allá, ¿verdad?

- Mira Jonson, te voy a ser sincero.

- ¿no lo eres siempre pequeña flor de loto?

- Cállate, capullo. Si tu padre está vivo y cojeando entonces existe la mínima posibilidad de que mi padre este vivo, ok. Así que no me moveré de aquí cueste lo que cueste.

- Eric, volverás, es una orden.

- Jonson, pequeño Jonson, si no te has dado cuenta, al no ser una misión oficial, no tienes el poder a obligarme a hacer nada. El silencio inunda nuevamente la línea.

- Eric, hazlo por tu hermana, por favor

- Por ella hago todo esto, protégela ¿quieres?

Y así es como la línea se corta, dejándonos en diferentes mundos. Me encamino al comedor
de empleados en busca de Sara.

- ¿Dónde estabas?, En cinco minutos entras a turno

- Buscando nueva información, ¿Que creías? ¿Qué te estaba engañando?

- Por Dios, matate

- Mátame - le susurro en su oído y me empuja mientras me muero de la risa
Le pido a mi compañero de cuarto que me pase un sándwich y me lo como mientras camino hasta mi puesto.


Dylan

Se diría que un desierto viene siendo un lugar menos adecuado para estar, pero en esta ocasión lo considero el mejor lugar para dar un largo paseo. No hay de quien esconderse, ni
preocuparse. No existen adultos que te abandonan por la mierda de "protección", la cual considero simplemente miedo. Oh bueno, en mi caso.

Llevamos días caminando a la deriva, buscando un lugar que puede que no se encuentre allí. Chris puede ser terca a veces, pero sigue siendo mi única familia desde pequeños,
después que me abandonaron frente al castillo.

En mi mente solo existen recuerdos de un cuarto oscuro donde solo se encontraban espejos y objetos sin sentido a mí alrededor. Donde un hombre alto y rubio grita mi nombre varias veces y luego el escenario cambia; a mis espaldas se encuentra un sofá cubierto de telas finas justo en el momento que soy tirado al suelo y golpeado por este hombre que me mira como si de una cucaracha se tratara.

Fragmento de memorias


Tres días antes

Me dejaron en la puerta del castillo en manos de Esteban, el guardia.


Su compañero que desconozco el nombre, se encuentra buscando a Chat Hotman

A los minutos, me arrastran a la parte posterior del castillo hasta detenernos en medio de un campo algo alejado del esté. Cuando llegamos, él susodicho se encontraba dándonos la espalda con los brazos cruzados y viendo algún punto alejado.


- Así que tú eres el mugriento infante que me dejaron de regaló

En algo que soy muy reconocido es en recordar muchos detalles innecesarios. Así que chat,
tu nombre de mi mente no saldrá por un muy largo rato.

Castillo De MentirasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora