Capítulo Seis

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—¡No me importa! No quiero que vengas, no le hagas caso a mi mamá.

—Pero solo te quiero ayudar, somos amigos.

—Yo no quiero que me ayudes, y no somos amigos.—Taehyun movió la cabeza hacia el lado contrario, mostrándose enojado y dejando a BeomGyu con un mohín.

—...N-no me gusta cuando me hablas así.

Taehyun se quedó quieto, ignorándolo.

—Si no quieres que seamos amigos, está bien. Ya no te voy a molestar.

BeomGyu se levantó del suelo del baño, dirigiéndose a los lavados y limpiando sus manos rápidamente.—Adiós.

Noooo.—Taehyun hizo un puchero, viéndose frustrado.—Es que no son tareas.—susurró.—mi mamá te está mintiendo.

—¿Entonces para qué me invitó a tu casa?

—Por qué mi perrito murió, y ella cree que si vienes, yo no lloraré al momento de enterrarlo.

BeomGyu se puso nervioso, sin saber que decir o hacer.

—Pero si voy, no afectaría en nada.

—Sí, pero no quiero que vengas.

—¿Por qué?

—Por que... me voy a poner a llorar.

—¿Y eso que importa?

—Sí importa.—Taehyun movió sus pies de un lado a otro, sentado en el suelo.—Cuando lloro, me veo feo.

BeomGyu empezó a reír, y Taehyun lo tomó como una burla, levantándose enojado del suelo y enfrentándolo.

—Te estoy diciendo esto ¿y te burlas de mi?—La voz del menor se empezó a quebrar, combinándose su enojo con su tristeza.

—No, no.—BeomGyu se apuró en tomarlo de los hombros.—No es eso, en realidad, tú te ves bien siempre, no deberías por qué avergonzarte.

Taehyun negó, sonándose los ojos y empezando a llorar.

—¿Te hice sentir mal?—BeomGyu se asustó.—Perdón, no quería que te pusieras así.

—N-No, solo estoy triste por mi perrito.

—Pero ya no llores.—murmuró BeomGyu, sobando la espalda de Taehyun.—Todo va a estar bien.

—Mi mamá me dijo que no.—sollozó.

Taehyun llorando por su perrito y BeomGyu tratando de consolarlo. El último sabía que doloroso era perder una mascota -el había perdido a su hámster- y entendía perfectamente que Taehyun no dejara de llorar.

—Si se ha ido es por que ya estaba muy viejito, debes comprender eso.—murmuró el mayor, abrazando el delgado cuerpo de su donsaeng.—Cuando un animal es viejito, hay más probabilidad de que se enferme, y termina sufriendo.

—Pero era mi perrito, yo lo quiero mucho, quiero que esté aquí.—Hipó, poco a poco calmándose.

En cierta forma, las manos de BeomGyu, dándole suaves toques en la espalda, lo relajaba. Aún le dolía que su perrito no esté, pero en esos momentos, podía dejar de pensar en eso.

—Tu perrito ahora está mejor, y de seguro está en el cielo con mi hámster.—BeomGyu se separó de Taehyun, secando sus lágrimas con los pulgares.—Ahora ellos nos cuidarán de las cosas malas, mi mamá siempre me dice eso.

Taehyun hipo una vez más, asintiendo a las palabras del mayor.

—Lávate la cara, debemos ir al salón antes de que la Miss venga.

Miss, BeomGyu me está molestando. (TaeGyu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora