Love, Asphyxiate ; Tendery ──trad. español

2. Remanentes del pasado.

❝Puede que Ten no tenga razón para salir con Hendery, pero ciertamente tuvo una para salir con Johnny antes de comenzar a escupir flores.❞

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Habían diversas cosas que Ten amaba de Johnny. Sus ojos, sus labios, su cuerpo, su tibieza, su cabello; pero una de las que más amaba era su voz.

Cada vez que Ten lo escuchaba cantar, su corazón balbuceaba al ritmo, encontrándose con su propio aliento atrapado en la garganta. Con frecuencia resultaría cautivado y asombrado de sus habilidades, y no se olvidaba de hacérselo saber en cada ocasión. También amaba cuando Johnny lo llamaba por su nombre, haciéndolo solo cuando fuese necesario para bromear. Entonces Ten actuaría totalmente avergonzado y molesto por su atención, y funcionaba. Funcionaba todas las veces. Nunca iba a olvidar como es que su voz lo hacía feliz cuando volvía de su programa de radio nocturno con Jaehyun y saludaba a todos en el dormitorio. Ten se disponía a esperar en su dormitorio hasta que regresara, a veces quedándose dormido en la cama de Taeyong, aunque a ninguno de ellos le molestaba. Adoraban a Ten justo de la manera en que Johnny lo hacía.

Pero eso era todo.

Johnny no albergaba ninguna clase de sentimiento romántico hacia él, diciendo que estaba enamorado de otra persona. Ten supuso que se trataba de Jaehyun. ¿Pero por qué debía importarle cuando su corazón se había quebrado en pedazos esa misma noche? Se sentía como la mierda pensar que podría tener una oportunidad contra el chico, y Johnny era tan amable con él que le parecía sofocante. Besaba su frente antes de dejarlo a solas en la sala del dormitorio, en silencio pidiendo a Ten que simplemente se fuera y regresara a su propia habitación. Estaba agradecido de que los demás miembros estuviesen en sus respectivos cuartos, porque aquella fue la primera vez que se encontró tosiendo un velo de novia.

A esto no lo halló extraño en un principio, pero después de un tiempo comenzó a molestar sus actividades diarias. No podía cantar sin tener un ataque de tos, bailar durante un minuto entero sin romper con otro ataque. Ten se encontraba confundido y culpaba al clima, pero sabía que algo estaba mal con su cuerpo. Fue solo después de unos pocos clics en Internet que finalmente trató de creer su condición. Recordó llegar a la habitación de Johnny con lágrimas en los ojos, rogándole con al menos salir con él por un año, con la esperanza de que correspondiera a sus sentimientos. Johnny se sorprendió ante la repentina solicitud, pero, como siempre todo un caballero, también lo había aceptado.

—Esto es estúpido. —Ten murmuró una noche. Johnny no dijo nada cuando continuó jugando con su cabello, con el más joven tendido en su regazo. El silencio persistió entre ellos y Ten no pudo soportarlo mucho más. Se levantó y observó a Johnny directo a los ojos.

—¿Me amas?

Una pregunta que le ha hecho hecho bastantes veces, pero que ha dejado sin contestar. Normalmente Johnny la evadiría besando sus mejillas, luego sus labios y permitiendo que ambos se ahogaran en la calidez del otro. La pregunta era dejada y olvidada en la mitad de una sesión acalorada que en ocasiones compartirían como combustible de la lujuria y el deseo carnal. El corazón de Ten lloraba de dolor en cada ocasión, pero Johnny era lo suficientemente reconfortante para hacerlo continuar.

Pero hoy se sentía diferente. Algo en los ojos de Ten le decía que estaba cansado. Estaba cansado de esto, cansado de ellos, cansado de todo. Y Johnny ya no tenía más el corazón para correr y ocultar.

—No, no lo hago.

Ha pasado un año desde que comenzaron a salir, pero es la primera vez que Ten lo ha escuchado por sí mismo. La esquina de sus labios se curvó hacia arriba en represalia y por primera vez, odió la voz de Johnny. Deseó que no hubiese respondido y solo lo besara de nuevo como siempre hacía, tirando de él en su abrazo. Pero era demasiado tarde ahora. Podía sentir sus pulmones contraerse mientras el sabor del velo de novia inundaba sus sentidos de nuevo.