I Can't Drown My Demons They Know How To Swim (Oliver Sykes y ______)

Capítulo 54: FINAL

Volteé a verlos, al parecer todavía no se percataban de mi presencia. Me cubrí la boca y empecé a gritar, no es posible que esto esté pasando....

- ______, yo-

- ¿QUÉ? ¿QUE TÚ QUÉ?- grité.- ¡NOS ACABAMOS DE CASAR Y YA TE FOLLAS A OTRA!

- ________, cálmate.- dijo Hannah acomodándose el vestido. Intentó agarrarme pero corrí hacia la puerta y salí de ahí.

Corrí entre la gente, las lágrimas brotaban de mis ojos como cascadas de agua salada. Fui a la mesa a buscar mi móvil y fui a la habitación a paso rápido, Alex intentó detenerme pero no le hice caso. Oliver me perseguía gritando mi nombre varias veces pidiendo que me detuviera, pero lo ignoré. Entré a la habitación y empecé a hacer mis maletas sin doblar la ropa, tenía demasiada rabia como para empezar a ordenar todo.

- Amor, por favor, déjame explicarte.- me rogó.

- ¿Para qué explicaciones? No quiero verte más.

- Por favor, no me dejes.- intentó abrazarme.

- SUÉLTAME OLIVER.- grité y lo empujé.- ¡¿POR QUÉ TE CUESTA ACEPTAR QUE NO QUIERO VERTE?!

- Porque te necesito para vivir.

- Ajá, si.- solté una irónica carcajada.- Lo dice el que estaba siéndole infiel a su esposa justo el día después de la boda.

- No quería hacerlo, por favor, déjame explicarte.

- Bien, tienes un minuto.- dejé de arreglar las maletas y lo miré enojada.

- Hannah....Ella...

- Sí, sí, tiene mucho sentido.- dije sarcástica.

- Hannah era mi amor platónico cuando era delincuente.- se rascó la nuca.

- ¿Y qué? Ahora estás casado CONMIGO.

- Es que...¡Argh!- gruñó.- La había olvidado, había olvidado todos esos sentimientos por ella cuando te ví aquel día en la enfermería de la escuela, pero... Me robó un beso cuando estaba desprevenido y todos esos sentimientos volvieron a mí, te juro que no la amo.

- Ah, claro, no la amas, ¿pero ibas a follarla? Vaya que eres imbécil.- volví a arreglar mis cosas.

- Golpéame, grítame, haz lo que quieras conmigo, pero no te vayas de mi vida.

- ¿Ah si?- pregunté.- Bien, ésta es por haberme conocido.- lo empujé.- Esto por haberme dicho que me amabas.- le di un puñetazo en el pecho.

- Ya, entiendo, detente.- dijo él tociendo.

- Esto por haberme hecho falsamente feliz.- le di un golpe en el estómago.

- ______, detente por favor.

- Y esta por haberme jurado amor eterno.- le intenté dar una bofetada.

- ¡YA BASTA!- me gritó y agarró mi mano antes de que le golpeara.- DETENTE, ENTIENDO QUE TE HICE SUFRIR, Y ME ODIO POR ESO PORQUE ME DUELE VERTE LLORAR POR MI CULPA, PERO TE ESTÁS PASANDO.

- NO ME ESTOY PASANDO OLIVER, ¡¿ACASO TIENES IDEA DE LO MUCHO QUE ME DUELE HABERTE VISTO ASÍ CON HANNAH?! DUELE OLIVER, DUELE.- mis lágrimas empezaron a brotar de nuevo.- ERES UN CABRÓN, NO TE QUIERO VER NUNCA MÁS.- me solté de él y cogí mis maletas.

Justo cuando abrí la puerta Hannah iba a tocarla, sus ojos se abrieron como platos al ver las maletas en mis manos. La esquivé y fui al ascensor y bajé al Lobby. Cuando pude detener un taxi Oliver se apareció de nuevo.

- ________, no me dejes...- sus ojos se aguaban.

- Agsh.- balbuceé.- Elige, ¿ella o yo?- Oliver sólo se limitó a halarse el cabello y rascarse la nuca, dejando caer una lágrima por su mejilla.- Eso pensé.- me quité el anillo, se lo lancé en la cara y entré al taxi. Oliver se pegó del cristal gritando que no lo dejase, le pedí al taxi que arrancara y observé por el cristal trasero como él se desplomaba en el suelo llorando y desapareciendo en la distancia, sentí como si algo de mí de arrancara provocando tanto dolor que mis lágrimas se hicieron presentes.

No puedo ahogar mis demonios, ellos saben como nadar.