Capítulo 5 Huyendo de la ley

16 0 1
                                    

Esa noche dormimos en una pequeña casa que encontramos por ahí y tuve un sueño muy raro, en el veía a mis padres, compañeros y extras a los que no pude salvar y decían que era mi culpa y porque los había abandonado. Desperté sudando a la mañana siguiente aliviado de que todo hubiese sido un sueño, no tardé en levantar a los demás, después de todo debíamos seguir caminando pero justo cuando íbamos a partir se oyó un quejido a lo lejos, sobre los escombros de lo que alguna vez fue el edificio, fuimos rápidamente a revisar y nos topamos con la sorpresa de que el soldado seguía vivo (por cierto, se llamaba Wilbur)

-Wil... Wil estas bien?- dije

-s si argh, que diablos pasó?-

-nos encontraron, nos seguirán, tenemos que irnos ahora- dijo Sarah

-ESPEREN!!, deben saber algo, el virus, yo lo liberé-

-QUÉ!!-

-Lo siento, todo comenzó con un simple experimento, intentábamos crear algo bueno que nos beneficiara en la guerra pero todo salió mal, sonó la alarma y mi peor equivocación fue abrir esa puerta, en ese momento todo se fue al demonio, tuve suerte de que la explosión no me afectara yo solo podía ver a mis compañeros toser y caer, me escondí pero seguía escuchando cuando salí todavía quedaban amigos míos, al poco tiempo el enemigo atacó y en ese entonces fue cuando me quedé solo, Sebas muchacho, acércate, ten esto, vallanse de aquí lo más pronto posible, no confíen en nadie, vallan al área 51, sonará loco pero ese es el único lugar que cuenta con la tecnología suficiente para salvar al mundo, el virus se esparce más rápido de lo que parece, la contraseña es JfgZa2wn, cuando estés dentro simplemente ve al cuarto de seguridad y di: computadora inicia el procedimiento 17-A, carga la sustancia y dispara, hazlo o todos estaremos perdidos (muere)

-¿Qué fue todo eso?- dijo Cesar

-No lo sé, pero será mejor que nos movamos- dijo Diego

Yo agarré un radio que Wilbur tenía en el bolsillo y salí corriendo.

Al poco tiempo nos detuvimos a comer y yo aproveché para usar la radio intentaba comunicarme pero no pasaba nada, cuando estábamos por irnos algo sonó en mi bolsillo

-ehh hola, hay alguien ahí? HOLA

-eh si si hola

-¿Qué sucede?

Diego me quitó el radio y comenzó a hablar

-eh disculpe pero estamos solos en cuba y todo es horrible, necesitamos ayuda y transporte al área 51

-muy bien enviaremos un helicóptero, esperen y tengan cuidado

-si está bien, igual, tengan cuidado con los policías corruptos y con esas cosas

-Enterado señor

Después de eso nos pusimos muy felices pero a la vez yo me sentía preocupado ya que debíamos ir al área 51 y ese lugar siempre había estado dentro de mis peores pesadillas.

Después nos dirigimos al aeropuerto, nos llevaría un tiempo, estaba muy retirado y el tiempo corría. Duramos caminando muchas horas y teníamos que apresurarnos empezaba a anochecer y el peligro surgiría, corrimos lo más rápido posible pero al fin pudimos llegar, pero justo cuando por fin estábamos en las puertas parecía que las cosas se repetían y lamentablemente, esta vez el destino no quitó a uno

(Escenario lluvioso)

-VAMOS VAMOS CORRE!!!- me dijo Diego

-Lo siento *cof cof* salieron de la nada-

-ya todo está bien hermanito- me dijo

-MUEVANSE- decían los soldados de fondo

-OIGAN VIENEN O QUE- nos gritaba Sarah

-YA VAMOS-

-vamos chicos no se queden atrás, aaaaahhhh- nos dijo Oscar y luego gritó porque un desgraciado lo tomó de las piernas, lo tumbó y se lo comió

-NOOOOOOOOO OSCAR NOOOOO- grité lleno de dolor y tristeza mientras Diego me arrastraba al helicóptero

-Oigan ya tenemos que irn...*crash*-dijo el piloto mientras un Zombie rompía el cristal, por suerte, a penas lo rasguñó

Luego subimos al helicóptero

APOCALIPSIS NUCLEARWhere stories live. Discover now