4. Yo lo quiero.

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Fue alrededor de una semana donde casi me resigne a no saber nada más de aquel bebé, no se porqué, pero no dejaba mi mente, tan pequeño y dejado sólo en el mundo, no se lo que se sentía pero al pensar que nunca conocería a mi familia me era desgarrador. Un sentimiento que nunca quisiera experimentar.

Salí del aula para dirigirme al patio de la escuela, tenía mi almuerzo de hoy así que después de buscar un buen lugar me dispuse a comerlo, no tarde mucho y lo termine cuando mi celular comenzó a vibrar, era mi madre.

— ¿Hola, pasa algo mamá? - voces algo preocupado, no era normal que me llamara cuando estaba en la escuela.

— Hijo quiero que vengas a la dirección que te mandaré, ahora, ya hablé con Servicios Escolares así que puedes salir, no tardes mucho ¿Esta bien? — sin más cortó la llamada, no se escuchaba alterada por lo que me apresure a llegar a mi salón.

Cuando llegue no había casi nadie así que guarde mi lonchera y tomé mis cosas, unos compañeros me veían raro pero no les tome importancia y salí de ahí, cuando llegue a la entrada mostré mi credencial y me dejaron salir, sin tardar escuché como me llegaba un mensaje y me subí a un taxi que pasaba disponible, saque el celular, era la dirección por lo que le indique a donde dirigirme.

En mi cabeza rondaba cualquier cosas, si había hecho algo o había pasado algo; de hecho no pude saber que había ahí en la dirección por lo que ingresé la dirección al celular para sacarme de dudas y era...

El taxi se detuvo y le di la tarifa, cuando salí vi frente a mí un edificio blanco de dos plantas y gran terreno para el jardín que se desplazaba al rededor del edificio. Fui a la caseta a mostrar mi identificación y saber dónde se encontraba mi madre cuando él mismo guardia me indico donde ir. Así que sin perder tiempo entre al lugar. Había muchos juegos infantiles y el lugar estaba bien cuidado, los niños al parecer estaba en receso porque corriendo por todos lados.

— ¡Jin hyung! — escuché el grito de Hoseok.

Mire a dónde estaba y me hacía una señal para ir con él.

— ¿Qué pasa? ¿Por qué estás aquí? — pregunté confundido, él debería estar en la escuela.

— Larga historia hyung, vamos — dijo simplemente.

Sin entender mucho entramos al edificio y pasamos por unos pasillos, tan solo girar a un lugar escuché como un bebé estaba llorando, un escalofrío lleno mi cuerpo y pase junto a mi hermano para entrar a un cuarto donde está la enfermera de hace una semana; estaba cargando al bebé y mis padres que estaban ahí. No entendía mucho cuando el llanto del bebé se volvió más fuerte, sólo les di una mirada confundida y fui a tomar al bebé de los brazos de la enfermera.

— Ey pequeño ¿Estás todo colorado? Pareces un tomate — dije en susurro frente a todos, pues era verdad estaba algo rojo por estar llorando.

Sin esperar mucho el bebé empezó a sollozar y moverse en mi dirección, yo tomé sus manitas para acariciarlas, estaban algo secas. De un momento a otro él se calló, busque con la mirada un lugar para sentarme, no había ni dejado la mochila por lo que era algo incómodo. La enfermera delgada me tomo un banco y le agradecí con la mirada mientras el bebé no soltaba mi dedo.

— ¿Es posible? — dijo de la nada mi madre.

— Es una gran responsabilidad señora, además él es aún menor de edad — escuché un tercero.

— ¿No estaría bien con parte de nuestro sustento? Se que es una locura pero ya lo vio usted misma — fue mi padre quien habló con la persona detrás del escritorio que no había tomado en cuenta.

— ¡Lo... Lo siento! Fui descortés, mi nombre es Kim Seokjin, mucho gusto — hice una reverencia tanto como pude con el bebé en mis brazos.

— Esta bien hijo, estabas absorto con él pequeño — dijo mirándome — ¿Sabes por qué estás aquí? — pregunto de la nada, la mire confundo, es verdad, ¿Por qué mis padres estaban aquí?

— La verdad no tengo idea, ¿mamá, papá? — pregunté y luego mire a Hoseok quien estaba con su celular, levantó la vista y sonrió apenado volviendo a su juego.

—La verdad es que tus padres quieren que adoptes a este niño — dijo sin más.

Pude sentir como mis ojos se abrían más de lo normal, mi boca se agrandaba y miré a mis padres, ellos no me voltearon a ver ¿Cómo que yo adopte al niño? Ni siquiera trabajo, mis padres me sustentan y ¿Acaso piensan que puedo cuidar de una criatura? Mire al bebé segundos después, estaba dormido sosteniendo mi dedo, es verdad que no quisiera tenerlo lejos, me preocupa pero no quiero admitirlo.

— Pero como eres menor no es posible, aún así  tus padres no desisten, ahora sé que el bebé está muy bien contigo —la señora, que pareciera era la directora del orfanato me contempló por un momento antes de volver a hablar — hemos tenido muchas dificultades desde que él llegó, ya que siempre está llorando, pero contigo hasta se quedó dormido, por la integridad del bebé quiero hacerte está pregunta y así podré hacer algo... ¿Puedes cuidar de él? Debes saber que estás cuidando una vida que si no es posible dejaría de existir —dijo como último.

Mire a todos con cuidado, es verdad, cuidar una vida no era cualquier cosa, lo viví cuando mi Hoseok estaba por morir de una infección en su nariz, sin el tratamiento o los recursos necesarios fácilmente podría perecer.

— Seokjin, hijo, ten en cuenta que podrás contar con nosotros el tiempo que sea necesario, cuando tengas mayoría de edad y encuentres un trabajo será más fácil- dijo mi padre.

¿Mayoría de edad? ¿Trabajo? Tendría que tener como 23 años o menos, ¿Tendría que aventarme sin más a la sociedad para vivir y mantener a alguien? Un sollozo se escuchó y el bebé se movió.

Bueno, pudo pasar algo peor.

— Si quiero tenerlo conmigo —fue lo que dije para que la señora firmara una hoja y empezará a hacer una llamada.

(Hace) Hoseok 🐎:
Sabía que harías esto, tienes mi apoyo. (+1)

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12-junio-19
.2024.

¡Sorpresa! Ahora soy Padre [H]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora