Tattoo |K.V.|

6.0

"Mira, me pareció muy genial lo que hizo ese idiota pero, ¿realmente es necesario ir donde están ellos?" volvió a preguntar por décima vez HoSeok mientras los dos menores buscaban a cierto azabache.

"Ya deja de quejarte y ayúdanos a buscar al chico ese" y ahora fue JiMin el que habló, ya cansado de tanta búsqueda cuando lo único que quería era comer antes de morir de hambre.

Lo miró indignado por su reproche "Oh, ¡por favor!, ni siquiera sabes cómo es el idiota al que buscamos" comentó desesperado y viendo cómo ambos se dirigían a algún lado "Nunca lo viste pero aún así lo buscas como si lo conocieras de toda la vida. Qué estúpido" susurró lo último.

"Deja de insultar a la gente, es irrespetuoso" aunque fue escuchado y recibió un fuerte golpe por ello "Y solo estoy aparentando, total en algún momento Tae se cansará de buscarlo y ya" se encogió de hombros con una sonrisa en cara.

HoSeok solo se limitó a susurrar miles de insultos y quejas mientras los otros seguían en lo suyo.

Odiaba a ese chico, definitivamente. Todo estaba bien, ningún problema entre Tae y él, o al menos hasta que a ese idiota se le ocurrió aparecer en sus vidas. Joder, podría estar perdiendo su única oportunidad de poder estar con TaeHyung por su culpa.

Él sabía que era casi imposible una relación entre dos personas con distintos tatuajes, incluso algunos lo veían mal. Como un simple error, como si en esas pocas relaciones "no destinadas" no existiesen los sentimientos. Pero confiaba en que era posible, estaba seguro que ambos podrían tener una relación más allá de las marcas, al menos sus padres pudieron.

Ambos, a pesar de la discriminación y rechazo, consiguieron seguir juntos y rebosantes de amor a pesar de no ser destinados. Tal vez fue porque el destinado de su madre la rechazó, lo que provocó una fuerte etapa de depresión en ella pero gracias a que su padre estuvo en todo momento pudo superarlo y de paso terminar enamorada de él. HoSeok estaba seguro que podría tener esa misma historia con TaeHyung.

"¡Oh, allí está!" medio gritó el castaño al ver como su destinado agitaba su brazo hacia su dirección, sacando a Seok de su mente "Creo que el chico que está junto a él es el mism-" pero antes de terminar de hablar sonó un celular.

Ambos giraron a ver a JiMin quien sacaba su móvil "¡Mierda!" gritó asustado "Lo siento, chicos pero olvidé que le había prometido a JiSoo que la ayudaría con el trabajo de su club" comentó apurado mientras tiraba su almuerzo. ¿Ahora como sobreviviría el resto del día? "Nos vemos en clases, ya que si no me apuro ella me molestará en casa y no quiero eso"

"Se fué" dijo al aire al ver a su amigo correr a la puerta del comedor. Suspiró "Como sea, vamos hyung" le tomó de la mano para que le siga, sin saber que dejó atontado al contrario con eso.

Y definitivamente el ambiente que se formó en aquella mesa cuando ambos llegaron y se sentaron frente a los otros, todo con las manos aún unidas, no fue para nada agradable. Era gracioso ver la forma en que HoSeok y JungKook se mataban con la mirada.

"Hola, soy TaeHyung y él es HoSeok. Mucho gusto" se dirigió al chico de cabello menta, ignorando el tenso ambiente y las malas miradas de los contrarios.

"Eh, el gusto es mío. Soy YoonGi y..." miró al idiota uno e idiota dos, como decidió apodarlos a pesar de no conocer a uno y al otro si, lastimosamente "¿Es normal que el aire sea tan pesado de repente?"

"No sé, tal vez" respondió confundido, sin notar la obvia referencia a la guerra de miradas de que había junto a ellos.

Y así pasó el almuerzo, entre agradables charlas entre YoonGi y TaeHyung, y muchas más interrumpidas entre este y los dos idiotas enamorados.