Kilian era el siguiente Alfa de la manada Stärke, una manada fuerte y poderosa, gobernada por un Alpha justo y amado.
El día que Kilian encontró a su mate fue el día más feliz de su vida, después de muchisimos años, había encontrado a su compañera...
Apenas puedo mantener mis ojos abiertos, o mover una parte de mi cuerpo. Ni siquiera siento el dolor por las cadenas en mis muñecas.
La puerta de la habitación se abre, pero ya no me molesto por ver quien es.
— ¿Kat?— Mi ceño automáticamente se frunce, al escuchar a Esteban
— Vete.— Murmuro tan bajo, que dudo que me haya escuchado
— Te traje agua.— Trago saliva. Hace días que no bebo una gota de ella— Y comida.
Siento sus pasos acercarse. Coloca su mano en mi mejilla y la corre suavemente hacia la izquierda, dejándomever un vaso de agua.
— Ten, toma.— Entreabro la boca y el agua entra. Saca el vaso luego de unos segundos, lo miro fijamente, para luego escupir el agua a su rostro. Aprieta los labios, mientras cierra los ojos
— No quiero nada de ti.— Murmuro, vuelvo a mi posición
— Kat, por favor. Necesitas agua, comida.
— Dijiste que cuando despertara el dolor desaparecería. Me mentiste.— Lo miro— Aunque no me sorprende ahora, después de todo, me traicionaste.
Baja la cabeza.
— Lo siento tanto, Kat. Pero me amenazaron.— Parpadeo, al sentir las lagrimas en mis ojos
— Pudiste habermelo dicho, sabes perfectamenteque yo podría ayudarte.— Me callo por unos segundos, me mira— ¿Para que me tienen aquí?
— Lucian ahora tiene otros planes.— Habla luego de unos segundos, sientomisnervios crecer— Y esta vez, será mejor, te lo prometo.
— Deja de decir eso.— Gruño— Nada nunca será mejor, mi vida ya no existe. Nunca podré estar mejor viviendo esto.
Me mira con pena, miro hacia otro lado.
— Vete.— Suspira, lo escucho alejarse luego de unos segundos
Cierro los ojos.
Solo quiero que todo esto termine.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
