° ¿Tongue? °

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Las gotas de agua resbalaban por los cristales de aquella casa, allá en donde un joven de cabellera castaña miraba algún punto fijo en la nada.

Silencio. Nada más que silencio era para él.

Todo era un tormento.

Despejó su mente de cualquier pensamiento que no debía estár ahí y se levantó, dispuesto a preparar la cena.

Colocó los ingredientes sobre la mesa y comenzó a preparar aquél platillo para su esposo que pronto llegaría. ¡Y valla! Parece que adivinó, pues a los minutos de que esta comida estuvo, él aparecío.

Con un ligero temblor en las piernas, Taehyung hizo una reverencia y sirvió en un plato con delicadeza.

—¿Cómo estuvo tu día, cariño? —preguntó Hoseok en un tono de burla. El contrario intento responder, pero cerró la boca al darse cuenta.

Una carcajada resonó por aquellas paredes. Se sentó en uno de los lugares de la mesa y se dispuso a comer.

Era... ¡No!, es tan cruel. ¿Pero por qué con él? ¿por qué con Taehyung?

( ... )

—Ven aquí, TaeTae —palmeó la cama, justamente a su lado. Taehyhung sumiso, obedeció dudando un poco—. ¿Estás estresado?.

Taehyung asintió levemente y cerró sus ojos, evitando el contacto visual. Siempre era lo mismo.

—Ugh... ¿Tampoco quieres tus lindos ojos? —cuestionó deslizando su dedo hasta el pecho de este, quién rápidamente negó sobre saltado.
El peli-negro sonrió con satisfacción y se levantó de la cama.

El contrarió respiró con tranquilidad cuando salió de la habitación, claro que esto no duró mucho. Brincó al verlo ingresar nuevamente con unas esposas.

—Juguemos un rato, ¿te parece, bonito? —preguntó con morbo.

Él suspiró con frustración y asintió. No sería tan malo si cooperaba, ya le había quedado en claro aquello.

Miró con miedo a Hoseok, quien esos instantes lo esposaba a la cama.

Literal, rompió la camisa a cuadros que portaba el castaño, y sin cuidado alguno también retiró el pantalón.

—Amor... —murmuró sobando su miembro sobre la delgada tela del boxer, la cual estaba húmeda por la estimulación. Un pequeño jadeo fue la respuesta ante tal acto.

Su mano un tanto fría recorrió su torso, cada centímetro de la piel color canela que tenía expuesta frente a él. No podía negar que le excitaba demasiado tenerlo de aquella forma después de la última vez.

—¡No más! —era todo lo que pasaba por la mente Kim. Aún con esto, no podía hacer nada, era como un pantano.

Apretó sus ojos con un poco de fuerza al sentir dos de los largos dedos de su esposo en su interior, haciendo movimientos circulares y en forma de tijera.

—Ah... Taehyung —rió con suavidad y sacó sus dedos, dejando en su lugar el vibrador en un nivel medio.

El cuerpo de Taehyung reaccionaba con temblores, se removía incontrolablemente apretando sus manos entre sí.

—Mgh... —un gemido un tanto ronco salió de la boca de Hoseok al estar tocando su erecto pene, apreciando la hermosa escena que ocurría sobre las sábanas de color azul pastel.

Taehyung odiaba la sensación que le provocaba aquél objeto, odiaba cada vez que era utilizado simplemente para satisfacerse sexualmente

( ... )

Dos, tres, cuatro horas pasaron follando. Cuatro horas en las que Taehyung soportó una vez más los movimientos bruscos que desgarraban su próstata con cada segundo que pasaba.

Las respiraciones agitadas e irregulares de ambos inundaban la habitación, sus cuerpos sudados seguían unidos por la gran polla de Jung, y las lágrimas por las mejillas de Taehyung resbalaban humedeciendo estas al instante.

—A veces desearía escuchar tus súplicas de nuevo —recalcó el mayor acariciando su fino cabello teñido—. Sería más divertido, ¿No crees?.

Desearía no haberle cortado la lengua.

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Osi, puse bastante esfuerzo en esta historia, ¿No se nota, verdad?. ¡Me quedó horrible! Está mejor mi cara :,u.

Denme amor que aquí son ¿604 palabras?, nuevo récord. xd

Nos vemos dentro de meses, ajua.