Después de los sucesos de Iron Man: Traición. Bruce Wayne regresa a su identidad de Batman. Su regreso no podría ser más oportuno, ya que en Ghotam hay una secta satánica que sacrifica niños mutantes. La investigación del detective lo llevará a top...
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Batman se encontraba en una camilla al borde de la muerte, mientras por su parte Logan sin la capucha de su máscara puesta, juntaba todas las plantas que le encargó a Alfred en un mismo tazón. Después de machacarlas y revolver todo cuidadosamente; puso el tazón arriba de un encendedor prendido; calentando la sustancia. Una vez terminado esto, Logan tomo el tazón con ambas manos y se lo tomó dejando boquiabierto a Alfred.
—Ah ya me hacía falta —exclamo Wolverine limpiándose con su brazo derecho.
—Disculpe —dijo Alfred.
—A eso voy —respondió Logan tomando una especie de nuez para acercarse a Batman y romperla frente a su nariz; está libero una especie de polvo que entró en las fosas nasales del vigilante. Pero no pasó nada.
—¿Y ahora? —pregunto Alfred.
Logan se tomó del mentón pensativo, solo para después golpear el pecho de Batman haciendo que este despertará de golpe. Este empezó a toser mientras Alfred le sostenía.
—Listo —exclamó Wolverine regresando a la mesa donde había preparado todo—. ¿Así qué Bruce Wayne eh? —preguntó Logan mirando aquella cueva.
—¿Se encuentra bien amo Bruce? —le preguntó Alfred.
—Mi identidad y mi cueva ya parecen bar para superhéroes —exclamó Batman bajando de la camilla con cierto dolor muscular.
—Sí, no eres bueno con las identidades secretas bub.
—Y tú estás fuera de tu ciudad, "X-Men" —agrego Batman.
—De nada por salvarte la vida —respondió Logan tomando de vuelta el tazón para tomarse el resto del jugo.
—¿Qué es eso? —preguntó Batman.
—Sangre de unicornio —respondió Logan indiferente—. Soy como voldemort; boo.
—No me tomas en serio —exclamó Batman.
—Ok tipo —exclamo Logan dejando el tazón a un lado para caminar hacia Batman quedando cara a cara—. ¿Quieres saber que hago aquí? Primero dime porque tienes una prisión que parece estar diseñada para los X-Men.
—¿Cómo sabes?..
—¿En dónde crees qué metí a mi doble?
En una jaula en la baticueva, James Howlett se encontraba encadenado con las muñecas pegadas al suelo; así aunque sacara las garras no podría hacer mucho. En ese momento llegaron Wolverine y Batman al lugar; ambos con máscaras puestas.
—¿De dónde vienes? —preguntó Batman.
James solo se quedó en silencio; pensativo.
—Dame unos momentos bub —exclamó Wolverine tronando los nudillos—, yo lo haré cantar.
