24.

7.8K 703 286
                                    

3/3

Zayn salió de su cuarto, iba muy bien abrigado, no quería arriesgarse y enfermarse.

Mientras el mayor pasaba por la sala, pudo escuchar que Liam hablaba por celular con su madre. Sonrió victorioso, el menor no se daría cuenta de que había salido, y mucho menos que iba a usar supresores.

Sin hacer mucho ruido, Zayn pudo salir de la casa, con una gran sonrisa en sus labios. Los Alfas odian que los Omegas usen supresores, pues eso les cubre todo el delicioso olor que sueltan cuando estan en celo.

La sonrisa de Zayn se borró cuando recordó que las llaves del carro las tenía Liam, puesto que la noche anterior, el menor se la quitó por que Zayn quería ir a buscar algo en plena lluvia.

El mayor suspiró, para empezar a caminar, la farmacia no estaba muy lejos, unos 15 minutos caminando y llegaba.

Mientras caminaba, el mayor se puso a pensar en como Liam se había convertido en su pareja, no pudo evitar sonreír al recordar como pasaron del odio, al amor, y aunque estaba ansioso para que Liam hiciera la marca en su cuello de nuevo, aún no se sentía lo suficientemente atractivo para el menor.

Así que usaría los supresores esta vez e iría al Gimnasio, para que así Liam estuviera feliz con su cuerpo.

—Adiós pancita de bebé.—susurró feliz Zayn.

Zayn empezó a sentirse confundido, tenía demasiado calor a pesar de que estaba haciendo frío. Tal vez el clima ya estaba cambiando.

Rápidamente, el mayor se metió hacía un callejón para poder quitarse el suéter de a bajo, pero sólo siguió sintiendo más calor.

—P-por qué cambió el clima tan rápido.

Zayn pegó su espalda hacía la pared y empezó a respirar profundamente, no podía ser, su celo había llegado antes de lo esperado, no le había dado ni tiempo de comprar sus supresores.

—M-mierda.—el mayor susurró mientras sentía como sus piernas se sentían débiles.

Había sido un error salir de casa sin Liam, sentía que su ropa estaba sofocándolo.

El mayor volteó a mirar hacía todas partes, pero nadie venía. Necesitaba que Liam viniera por él, se sentía muy débil, su celular estaba en casa.

—Mira, ¿no es un Omega?—se escuchó a lo lejos.

—Sí lo es, parece que está en celo.

Zayn empezó a escuchar como caminaban rápidamente hacía él y como susurraban.

—Lindo Omega, ¿por qué estás solo?.

Zayn subió la mirada, encontrándose con dos hombres altos, uno de cabello grisáceo, y otro de cabello oscuro, quienes lo miraban con una gran sonrisa en sus labios.

—P-por favor, necesito hacer una llamada, ¿Podrían... Prestarme su celular?—la voz de Zayn salía entrecortada.

Los ojos de Zayn se pusieron llorosos, y sus mejillas rojas. Tenía demasiado calor, iba a enloquecer.

—Parece que estás en celo. Podemos ayudarte en eso.

Zayn negó con la cabeza mientras intentaba pararse, pero le fue inútil, por que ambos chicos lo agarraron de la mano y lo tiraron al suelo, haciendo que a el mayor se le salga un chillido de dolor.

—Estamos siendo amables contigo Omega, acepta nuestra ayuda y nadie saldrá lastimado.













Tengo sueño, pero tengo que escribir :)

Eres Mío [Ziam]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora