Enganchado a mi profesor [Yoonmin] ~BTS~

XIV

JIMIN

Tras la excursión no he vuelto a saber nada de Yoongi y por eso vuelvo a sentirme algo... Decaído, aunque ahora voy de camino a ver a Zoe que ella también sabe levantarme el ánimo.

- ¿Jimin puedo preguntarte algo? - Me dice con algo de timidez después de llevar un rato hablando sentados en el banco del otro día.

- Claro - Respondo con curiosidad.

- Mmm... Y-yo... ¿Yo te gusto? - Sinceramente me esperaba cualquier cosa menos esa.

- ¿C-cómo? - No sé qué decir.

- Es que a veces me parece que si... Y yo... Bueno... Puede que me gustes un poquito -

Me quedo paralizado, ahora mismo debo estar más rojo que nunca. ¿Por qué me pasa esto a mí? Hace unos meses le habría dicho que si, que me gusta y la invitaría a salir y seriamos novios. Pero ahora... El contrato... Y no el contrato si no Yoongi, no hay otra persona que me haga sentir como él.

- Zoe, antes me gustabas, me gustabas mucho, pero ahora... -

- ¿De verdad? ¿Qué pasa ahora? - No sé cómo explicarle que firmé un contrato con mi profesor de anatomía en el que me tengo que acostar con él a cambio de aprobados. Y no solo eso, si no que me gusta, bueno, no sé exactamente, pero... Algo siento por él, algo que no he sentido por nadie nunca.

- Hay cosas que han cambiado -

- ¿Soy yo? - Pregunta algo triste.

- No, claro que no - Le digo cogiendo sus manos, lo que menos quiero es hacerle daño a Zoe.

- Es que... Estuve pensando que lo mejor para olvidar a mi ex sería tener otra relación. Y tu Jimin... Eres tan dulce y bueno conmigo - Me sonríe tímida y yo hago lo mismo.

- Zoe... - Acaricio su mejilla y para cuando me puedo dar cuenta pone sus labios sobre los míos y me besa. Yo continuo el beso como puedo, ya que es algo extraño... No había besado a nadie a parte de Yoongi y esto es raro, muy raro y... No me gusta.

- P-perdón - Me dice al separarse. Yo no sé que decir cuando mi móvil comienza a sonar, miro la pantalla y para colmo es Yoongi.

Descuelgo. - ¿Hyung? -

- Ven a mi casa - Utiliza ese tono de voz aterrador.

- ¿Qué? Ahora no puedo -

- Que vengas he dicho - ¿Qué mierdas le pasa?

- Yoon... - Antes de que pueda hablar cuelga.

- Zoe yo... Tengo que irme, lo siento - Me pongo en pie y me voy sin más, me siento mal dejándola ahí, pero tengo miedo de esa forma de hablar de Yoongi, parece muy enfadado, no quiero empeorar las cosas.

Por fin llego a su casa que no está muy lejos y toco a la puerta.

YOONGI

Abro la puerta bruscamente y lo veo ahí parado con su respiración algo agitada y sus mejillas algo rojas por a ver venido andando rápido. No digo nada y agarro sus regordetas mejillas metiéndolo en la casa y acortando por completo nuestra distancia para besarlo. Comienzo algo lento sorbiendo su labio de arriba mientras el sorbe el mío de abajo, luego poco a poco muerdo y estiro de su inferior para abrirle la boca y entrar en ella con mi lengua. Él hace lo mismo jugando con su caliente lengua en mi interior, yo absorbo la suya mientras también recorro toda su deliciosa boca. Nos mezclamos sin control, moviendo nuestras lenguas entre boca y boca intensificando más y más el beso mientras yo aprieto más sus mejillas entre mis manos y el pasa las suyas por mi cuello. Sigo concentrado en el magnífico beso, sorbiendo una y otra vez estos labios gorditos que atrapan mi lengua de una manera exquisita. Podría estar así días enteros, pero no, tengo que parar, tengo que hacer otras cosas.

- ¿Quién besa mejor ella o yo? - Lo observo todavía agarrando su cara y él con sus manos en mi nuca. Está totalmente perdido, con sus labios húmedos y mordidos sin ni siquiera ser consciente de lo que le acabo de preguntar.

- ¿Q-que? -

- Te acabo de ver besando a una chica en el parque - Si, lo he visto todo, no lo estaba espiando... Bueno, puede que un poco si, lo vi caminando por la calle, iba excesivamente hermoso con un vaquero apretado y una camiseta blanca algo grande. No pude evitar no seguirle al recordar lo que habló con Hoseok en el autobús, había quedado con una chica. Mi sorpresa fue cuando vi a la chica, pues la conozco, la conozco demasiado diría yo. Pero ese no es a lo que quiero llegar, si no a que MI Jimin besó a otra persona que no era yo.

- ¿Me estabas espiando otra vez? - Dice separándose de mi algo molesto.

- Puede... - Respondo sarcásticamente.

- Pues para de hacerlo, no te metas así en mi vida - Tenso mi mandíbula algo molesto.

- Oye mira - Me acerco a él sujetándolo de los hombros. - Tenemos un contrato firmado y te has saltado una norma -

- Pues me da igual el estúpido contrato yo beso a quien me da la gana - Aparta mis brazos de mala manera. Lo miro enfadado poniendo mi lengua contra mi moflete interno. Jimin... No deberías haber hecho eso.

Me voy a mi habitación sin decir nada dejándolo solo en el salón. - A dónde vas? - Lo oigo decir desde mi cuarto buscando entre mis papeles.

- Si te da igual el contrato... - Salgo por el pasillo poniéndome en frente suya llevando el contrato en mis manos. - Mejor lo rompemos y ya no hace falta que nos volvamos a ver - Digo eso mientras rasgo el papel por la mitad dejando una mitad en cada mano. Puede que luego me arrepienta de esto, pero ahora no puedo pensar.

- ¿Q-que has hecho? - Mira alterado los pales rotos que tiro al suelo.

Me acerco hasta él y agarro su barbilla con una mano obligando a que me mire. - Ya está, eres libre, vete con ella y daros besitos por el parque. ¿No te gusta tanto? -

- ¡Ella no me gusta! - Dice alzando la voz y retirando mi mano de un golpe.

- A no espera... Te gusta Hoseok ¿Verdad? -

- ¡Que no! - Grita poniéndose rojo.

- ¿Entonces quién? ¡¿Quién es el idiota que te gusta?! - Ahora yo también le grito preguntado, él mira al suelo y casi puedo ver como sus ojos empiezan a cristalizarse. ¿Va a llorar? - Habla Jimin, joder - Me estoy poniendo muy nervioso.

Entonces me mira con las lágrimas a punto de salir de sus ojos. - ¡TU! ¡El idiota que me gusta eres tú! -

Por un momento mi mirada se nubla y lo que me hace volver a enfocar es el portazo que da la puerta cuando Jimin sale corriendo de mi casa dejándome solo. ¡¿QUE COJONES?!

Me quedo quieto, totalmente inmóvil hasta que las necesidades de hacer algo me consumen. Necesito fumar, voy a la cocina, saco una caja que tengo en el cajón, enciendo un cigarro y lo llevo a mi boca. No suelo fumar, solo cuando estoy nervioso, y ahora lo estoy mucho, no, estoy enfadado, estoy la ostia de enfadado porque soy un idiota. Le doy una patada a una silla tirándola al suelo por la rabia que siento y la impotencia de no poder hacer nada, porque ¡Joder! Esto no puede estar pasando, no, no quiero, él no me gusta, y no me importa si le gustan otras personas, él no es nada, sólo uno más, un juguete que no me tienen que importar sus estúpidos sentimientos, me da igual. No me importa lo que haga ese... Ese estúpido niño que... me hace sonreír, que me alegra los días, que me ha ayudado, que me hace sentir bien, que... Joder... que me hace sentir como nadie lo hace.

Cuando me quiero dar cuenta me encuentro en el suelo, apoyando la espalda en la pared y mis mejillas estás húmedas, no me puedo creer que esté llorando, yo no lloro... Pero siento un dolor horrible en el pecho y necesito desahogarme porque la he cagado... La he cagado perdiendo a mi hermoso Jimin.  

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