Boquitas Azules, Violácias, Negras

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DECIMOQUINTA ENTREGA


azul, como una ojera de mujer,

como un jirón azul, azul de atardecer

AGUSTÍN LARA


Coronel Vallejos, 21 de agosto de 1947

Querida Nené:

Espero que estas líneas te encuentren con salud. Ante todo te pido perdón por haberme demorado tanto en contestar a tus cartas, pero te puedes imaginar bien la razón, cuando se trata de alguien con mis años. Achaques, hijita, que no me dejan hacer todo lo que quiero, cada vez menos.

Resulta que estuve un poco resfriada y no podía ir al correo, y no quiero confiarme en nadie, así que recién hace pocos días retiré tus cartas de la casilla, tengo que cuidarme tanto de Celina, que no vaya a sospechar. Y cómo me apena saberte a ti también mortificada porque el inocente se nos ha ido y la culpable está viva, pero yo creo que debemos dejar que el destino se encargue de darle su merecido a esa mujer viciosa, no pensemos más en quién pudo haber sido, ¿para qué desenmascararla? el mal está hecho.

Mejor es que nos escribamos contándonos nuestras cosas y acercándonos cada vez más. Yo querida qué puedo decirte, mi vida está terminada, me ayudan nada más las amigas como tú, que son tan buenas en recordarme, y también en recordar a Juan Carlos, que Dios lo tenga en su gloria.

En tu carta de fecha más reciente te noto un poco ofendida, pero ahora verás que si no te escribía era por razones de salud. Deseo tanto que tu vida matrimonial vaya mejor ¿qué es lo que pasa entre ustedes dos? A lo mejor yo con mi experiencia puedo aconsejarte. Yo creo que hasta es posible ser feliz al lado de un hombre al que no se quiere, basta saberse comprender y perdonar ¿Él tiene algún defecto muy feo? me refiero a defectos de carácter. A mí también me viene esa tristeza a la tarde ¡qué horas que no pasan nunca! entre las cuatro y las ocho de la noche, desde que empieza a oscurecer hasta la hora de cenar, me la paso buscando alguna tontería que hacer, algún zurcido, alguna costurita liviana. ¿Y tus chicos no te ayudan a vivir más contenta? ¿te han defraudado en algo?

Perdoname que sea tan entrometida, pero como te estoy tomando un gran cariño querría saber de tu vida, y poder ayudarte aunque sea con mis ruegos.

Perdón también por haberte hecho esperar con mi respuesta. Por fervor escríbeme pronto y recibe todo el cariño de

Leonor Saldívar de Etchepare

Postdata: me olvidaba agradecerte que me recordaras el deseo de Juan Carlos de ser cremado. Debemos olvidar todo egoísmo y hacer su voluntad, aunque no esté de acuerdo con nuestras creencias ¿no es así?


Antes de escribir el sobre mira a su madre, tejiendo sentada en un sillón a varios metros de distancia. El ritmo del tejido es sostenido, no denota cansancio, lo cual hace pensar que la anciana continuará sentada algunos minutos más. Se apresura a escribir el sobre antes de ser descubierta y sale rumbo al correo después de dejar a su madre que va a la farmacia.


*


Coronel Vallejos, 10 de setiembre de 1947

Queridísima Nené:

¡Qué alegría recibir tu cartita tan cariñosa! Me alegro de saber que has perdonado mi demora en escribirte y te agradezco que me tengas tanta confianza para contarme tus problemas: Yo también necesito alguien en quien confiarme, Nené, porque mi hija me tiene tan preocupada. Resulta que ha venido el Dr. Marengo, un médico joven que era de Buenos Aires, y está acá trabajando en el sanatorio nuevo, un muchacho muy simpático y de mucho porvenir, y buen mozo que todas las chicas lo persiguen, bueno, y el otro día vino a pedirme la mano de Celina. Pero es un desconocido, y yo estoy tan preocupada, que le pedí unos meses, por lo menos los meses de luto, para decidirme a aceptarlo. Celina es muy obediente y aceptó mis condiciones. ¿Te parece que hice bien? Ojalá sea un buen muchacho, porque entonces Celina se casará con uno de los mejores partidos del pueblo.

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