Promise // Jung Wooyoung

Capítulo III

Abrí los ojos despacio y suspiré con una sonrisa. No había nada que mejor que tener un día libre. Paz absoluta.

Comenzaron a sonar golpes en la puerta principal de la casa. Vi la hora.

¡¿5:30 de la mañana?! ¿Qué tipo de persona viene a la casa a estas horas?

Esperé por un momento a que pararan, sin embargo no sucedió, así que me levanté y bajé a abrir la puerta.

-¿Quién debe ser para andar huebeando a ésta hora? - maldije mientras abría la puerta. Al abrirla quedé sorprendida.

Cuatro hombres con rasgos asiáticos vestidos de terno y mirándome sin ningúna expresión.

Igual que miedo, y si me vienen a secuestrar, ¿o quizás son strippers? Así suena mejor.

-¿Y ustedes?- levanté mis cejas.

-¿Usted es la señorita Marlene Pierce?- lo miré con duda, pero no era necesario decir mi apellido.

-Ajá, soy yo. Adelante pasen- me hice al lado para que entraran, pero, ¿Cómo me conocían?

-Nosotros venimos desde Corea por parte de KQ entreteinment, exactamente por su postulacion para fotógrafa de un grupo de k-pop- los miré totalmente desconcertada y confundida.

¡¿Postulacion?! ¡¿Grupo de k-pop?! ¡¿Fotógrafa?! Qué verga estaba pasando.

-Debe ser un gran error, porque la verdad yo no he postu..- expresé con molestia, pero me interrumpió una voz.

-No es ningún error- dijo Madi mientras estaba atrás mío con una mirada seria. Realmente no entendía nada.

Esto me estaba volviendo loca. Wtf.

Primero llegan estos hombres coreanos por una postulación, después mi hermana en esto, estaba muy confundida, pero unos recuerdos se me vinieron a la mente.

Flash Back.

-¿Mar? Si no trabajarás en la asquerosidad que estás ahora, y fueras fotógrafa ¿Trabajarías con un grupo de chicos?

******

-Perdón.

-¿Por?- pregunté extrañada.

-Solo perdón- dijo mientras jugaba con sus dedos. Sin duda alguna algo le pasaba.

Fin Flash Back.

Ahora todo tenía sentido. Mi querida hermana tenía la culpa. No podía ser posible.

Me acerqué peligrosamente a Mad y la agarré por los hombros.-¡¿Tú fuiste, verdad?! Tú fuiste la idiota que me postuló sin mi permiso?! - le grité haciendo que se asustara. Me arrepentí.

-Si, fui yo, pero no lo hice por mí, ¡lo hice por ti!- esta vez ella me gritó.-Lo hice porque me aburrí de verte sufriendo en ese maldito trabajo, ¿o acaso lo de tus muñecas fue un accidente?- Mierda. Se dio cuenta.

-Ese es mi problema Madison, ¡no el tuyo!

-¡Claro que es el mío también! Porque eres mi hermana, y si tengo que hacer lo imposible por ayudarte y protegerte ¡lo haré!- la miré y tenía sus ojos aguados.

-Lo sé, pero eso no te da el derecho de tomar decisiones por mí, y para tu información no viajaré a Corea y menos voy a ser fotógrafa. ¡¿Me entendiste?!- me senté en el sofá mientras me agarraba la cabeza con ambas manos. Esto no podía ser peor.

-Por favor, hija, hazlo- levanté rápidamente la cabeza y ahí estaba mamá, mirándome con dolor.-Tu hermana tiene razón, además es lo que siempre has querido. Deja el orgullo, Mar- me levanté y me acerqué a ella.