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Habían pasado varias semanas desde la quedada con Mike y aún seguían hablando por chat. Él encontraba muy raro que ella no se hubiera cansado de él durante estos días, pero lo agradecía porque él sentía una pequeña atracción hacía ella, quería negarlo, pero cuando su móvil sonaba, solo quería que fuese ella respondiendo a su mensaje o enviándole una foto divertida.

Luke y Miranda eran felices, llevaban bien la relación, pero estas últimas semanas habían sido un poco raras para la pareja. Miranda le revisó el móvil a Luke y vio como en el buscador de Instagram estaba el usuario de Blake, el último usuario que él había buscado. Entonces discutieron ya que ella no soportaba para nada a Blake y él odiaba la invasión de privacidad. Le había pedido mil veces a Miranda que no le revisara el móvil, y ella aún seguía haciéndolo, sabiendo a que a él le molestaba. Cada uno de los dos tenía algo por lo que estar enfadados con el otro, y cada uno esperaba del otro que no volviera a hacer esas acciones.

Hoy Blake iba a quedarse a dormir en casa de Josefine, hacía mucho tiempo que no quedaban las dos solas y echaban de menos tener esa noche de chicas. Blake era la encargada de comprar la comida ya que ella era la que salía de casa.

Entró al súper sin quitarse los auriculares y fue a la sección de snacks y refrescos. Tenía ganas de comer comida basura hoy. Cogió una bolsa de patatas y una botella de sprite, ahora necesitaba la cena, suspiró paseándose por el súper viendo que podía acabar comprando y a unos metros de ella vio a dos figuras conocidas. Se giró un poco para mirar si había algo de comida que le gustara en la estantería de su derecha pero volvió a girar su cabeza hacía Miranda y su novio. Tenía que admitir que se veían adorables juntos, pero a ella le daba rabia al comparar el cómo Luke se comportó con ella y en como se estaba comportando con Miranda en ese momento.

También lo vio el día en que anunciaron su relación el día de la quedada. La atención que él le prestaba cuando ella hablaba, aunque ella no lo estuviera mirando.

Giró su mirada hacia los frascos de aceitunas y dibujó una mueca en su rostro antes de mirar un poco por los lados. Aunque no pudo evitar volver a girarse hacia ellos. Ella estaba mirando en la nevera que tipo de pizza quería, entonces Blake se dio cuenta que la sección donde tenía que estar del súper era ahí, quería cenar pizza, pero de ninguna manera se iba a acercar. Miranda eligió las dos pizzas y preguntó algo a Luke leyendo el tipo de pizza que eran, entonces el rubio rozó su mano contra la de su novia antes de entrelazar sus dedos para dirigirse hacía la caja.

Blake no sabía porque, pero en ese momento deseó no haberse girado y ver esa acción. No sabía el porqué le daba tanta rabia el hecho que él fuera tan cariñoso con Miranda, pero podía notar perfectamente el nudo que se le había formado en la garganta. Se giró yendo hacía el pasillo de al lado para que no la vieran y frunció sus labios mirando los productos lácteos de enfrente.

No valía la pena sentirse rara por alguien como Luke, tenía que actuar con madurez enfrente de estas situaciones y mentalizarse por el hecho que se lo iba a encontrar en muchos más sitios y que no pasaba absolutamente nada por saludarle.

Suspiró y fue a las neveras donde se encontraban las pizzas. Cogió dos mirando bien de que eran y cogió un helado antes de dirigirse a una de las cajas para poder pagar.

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-¿Estás hablando con Ash?-preguntó la morena algo extrañada al ver la pantalla del móvil de Josefine y su amiga le enseñó una pequeña sonrisa antes de bloquear el móvil para sacar las pizzas del horno.

-Sólo estamos hablando, nada más.

-Sabes perfectamente lo que significa esa frase, ahora explícame realmente lo que pasa entre vosotros.-rio suavemente Blake abriendo la bolsa de patatas, puso un poco de música con el volumen bajo para alegrar el ambiente pero para que Josefine pudiera ser escuchada perfectamente.