CAPÍTULO 20

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“Me gusta que estés feliz, sólo ten en cuenta eso, tu felicidad, no la de los demás…” V.L.

-¿Por qué obedecen lo que él les dice? – eso no podía coincidir. Las alejó de sus familias, pero ellas estaban hechas y dispuestas.

-Él hizo de nuestras vidas mejores.

-¿Cómo que mejores? April, te alejó de tus padres – ambas se miraron extrañadas.

-¿Cómo sabes quién soy?

-No tengo idea, sólo sé que te conozco por un sueño, o algo así… ¿acaso no eres lúcida sobre el daño que ocasionó a su paso?

-Aún no sabes que es el daño y el caos en toda su magnitud, lo que hizo no fue nada – no estaba grosera, se encontraba relajada y paciente – además es por el bien, precisamente el bien de tu familia.

-Acabó con mi vida, o tú escuchas tu propio corazón latir, esto no es vida.

-¿Y lo que tenías, sí lo era? – probablemente intentaba de una manera dura hacerme dar cuenta de algo que yo aún no veía, pero lamentarme no era una opción ese momento.

-Encontré la forma, pero demasiado tarde para confesarlo… - como seguíamos caminando en dirección a las afueras me pareció curioso - ¿hacia dónde vamos?

-A las afueras de la ciudad.

-Eso ya lo sé – le respondí a la otra muchacha que hasta ese momento no había abierto la boca, se veía impaciente – pero me refiero a después.

-Entraremos por la puerta subterránea, en este caso, porque también te lleva arriba – no entendí a lo que se refería - . Aún no sabes utilizar tus habilidades, por lo que demoraremos un buen rato.

-Así que nos encontramos caminando por una de, me imagino, las pocas ciudades que no presenciaron tal arrebato, eso sí es relajante – nótese la ironía – ahora explíquenme, ¿para qué nos secuestró?

-No es un secuestro, naciste para esto, sólo que no lo sabías.

-¿Cómo?, explícate con detalles y desde el inicio April.

-Nos dirigimos hacia el Bota E Krimit, o como tú lo llamarías, la tierra de abajo, para nosotros es la tierra en llamas, el reino del Senyor del Foc.

-¿No puedes hablar en un solo idioma? – rayos, había comprendido lo que dijo – diantres… albanés y catalán.

-Si te das cuenta, es una habilidad, necesitas saber todas las lenguas de este mundo, de las criaturas de abajo, y seres de arriba, extrañamente, la comunicación con los animales de aquí no es muy sencilla, se comunican a través de gestos y movimientos, lo que lo hace difícil de interpretar para interactuar – se detuvo al ver que ello aún no iba al caso –, veo que ya entiendes, eso es provechoso, así una tarea menos.

-Por favor… continúa.

-¿Qué quieres saber primero? – dijo la otra chica, quien quería hablar conmigo insistentemente.

-Me parece que se me hace raro… que él no tenga nombre.

-Sí lo tiene, pero no nos está permitido saber eso. Nadie lo sabe… y por si te imaginaste que la gente tenía razón al llamarlo Satán o Lucifer, pues no, no es él. Es un error muy común entre las personas hoy, y es de entender, pasaron años de historias y leyendas de un ser que reinaba en la tierra de abajo – nivel de confusión en ese momento: mil, estaba descubriendo datos sobre algo que jamás me había interesado – pero no se trata del mismo personaje. El que conoces, desapareció mucho antes de que la primera retoño fuera solicitada por el Senyor del Foc… para nosotras, es como una leyenda creer que él provocó el destierro y posible homicidio – me causó gracia escucharla decir esa palabra – del anterior gobernante de ese mundo, pero algo sí lo tenemos claro, como él, no hay otro.

Vástago del fuego / LIBRO N°1 DE LA TRILOGÍA DE LOS RETOÑOS DEL INFIERNODonde viven las historias. Descúbrelo ahora