Él perdió la vista por una enfermedad...
Ella se enamoró de él desde la primera vez que lo vió...
Ellos se descubrieron un año atrás cuando él podía ver...
Pero el destino los vuelve a juntar
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BELÉN
Desde ese día que lo ví en la cafetería no lo puedo sacar de mi cabeza lo observo todos los días cuál acosadora y si desde ese día me enamoré de Matías. No creía en el amor a primera vista hasta que lo ví y también ví como me miraba ese día eso me animó a darle mi número de teléfono supe por su mirada que yo no le era para nada indiferente.
Estuve esperando un mensaje o una llamada pero nada de nada llegué a arrepentirme de haberle dado mi número hasta que una semana después de haberle visto por primera vez me enteré que había tenido un accidente que estaba internado en coma farmacológico porque había tenido un traumatismo de cráneo, el miedo se apoderó de mí, ese día pensé que lo perdía me agarró una desesperación tremenda más de una noche entraba a verlo aunque sea unos minutos y aunque sabía que estaba en coma igual me conformaba con solo verlo.
Cuando me enteré que perdió la vista tomé la decisión de acercarme a él pero no me animaba tenía miedo al rechazo se que las personas no videntes no quieren ser una carga para nadie no quieren ayuda de nadie y eso es lo que me frenaba para no acercarme a él más de una vez estuve tentada a hacerlo pero siempre me detenía.
Hasta hoy que simule chocarlo y espere que él hablara pero no lo hizo así que hablé yo, me sentí como una adolescente enamorada por primera vez no me salían las palabras por suerte encontré mi voz y me disculpé.
Me ofrecí a acompañarlo por suerte no se negó y eso me dió un envión de esperanza. Quiero hacerle compañía demostrarle que aunque no pueda ver no es el fin del mundo que se puede volver a enamorar de la vida y sobre todo quiero que se enamore de mi.
Lo quiero me enamoré de él y eso es algo que no lo pude evitar nadie manda en el corazón ni en los sentimientos, quiero ayudarlo y voy a ayudarlo ahora que comprobé que no le molesta mi compañía y que me decidí a hablarle me voy a acercar a él ya lo tengo decidido y lo que se me mete en la cabeza nadie puede hacerme cambiar de opinión.
AL DÍA SIGUIENTE
Salgo de trabajar y justo lo veo que pasa entonces me pongo al lado de él y lo saludo él me saluda y me llama por mi nombre, hola Belén me dijo por lo menos se acordó de mi nombre. Nos fuimos hablando y le conté que mi compañero de trabajo se cayó con una bandeja hoy y nos reímos juntos.
Amo verlo reír y saber que yo soy la que lo hace, hoy al verlo reír me enamoré más todavía si eso es posible es muy lindo y su cuerpo por Dios tiene unos músculos. Me pregunto si irá al gimnasio.
Es un muy buen hombre no se merece la desgracia que le pasó, se por lo que dicen por ahí que tiene pesadillas y no lo dejan dormir. Siento que me tocan el brazo y vuelvo de mis pensamientos, Belén estás ahí me pregunta Matías, si le dije y seguimos hablando él me contó que tiene a su mamá y a su hermana que como yo sabía no quiere ser una carga para ellas que por ahora se maneja bien en su casa y en la calle eso me alegra mucho.
SEMANAS DESPUÉS
Casi todos los días nos quedabamos hasta tarde hablando, riendo o contándonos anécdotas. Nos hicimos muy cercanos y eso me ponía muy contenta con paciencia mi plan iba saliendo muy bien, él me tenía confianza y no me rechazaba.
Nos acostumbramos a vernos casi todos los días y los que no, lo extrañaba horrores, había veces que no lo podía ver porque me tenía que quedar trabajando hasta tarde. Hasta que una tarde nos fuimos a una plaza nos sentamos en un banco y entonces él me pidió si podía tocarme el rostro según él para conocerme obvio que lo dejé tocarme por supuesto.
Él apenas puso su mano en mi mejilla me estremecí y creo que se dió cuenta pero agradecí que no me haya dicho nada. Siguió tocando toda mi cara y lo dejé porque se sentía demasiado bien su tacto en mi piel, cuando dejo de tocarme se le formó una hermosa sonrisa y quedé deslumbrada no puede ser tan lindo.
Sos muy linda me dijo yo solo me sonrojé y traté de esconderme después me dije que soy una boba porque él no puede verme, seguimos hablando un rato más hasta que se hizo tarde así que me ofrecí a acompañarlo hasta su departamento y cuando me iba a ir a mi casa él me pidió que cenaramos juntos y no me negué.
Me ofrecí a cocinar saqué todos los ingredientes para cocinar arroz con pollo , me puse a cortar las verduras mientras él me hacía compañía. Cuando terminé de cocinar nos sentamos a comer y hablamos de todo un poco, eso me gustaba de estar con él que siempre teníamos algo de que hablar y disfrutaba mucho de su compañía y se notaba que él también disfrutaba de la mía.
Cuándo terminamos de cenar nos tomamos un café sentados en el sofá del living y se me da por mirar el reloj y me di cuenta que ya era medianoche me tenía que ir a dormir ya que mañana me tocaba trabajar temprano en la cafetería así que con toda la bronca del mundo me tuve que despedir de él con un beso en la mejilla.
Cada vez se me hacía más difícil tener que despedirme de él sobre todo porque sabía por lo que me contaba que a la noche las pesadillas de lo que pasó en el accidente lo atormentaban y eso me daba mucha impotencia le ofrecí varias veces para que vaya a un psicólogo varias veces le sugerí que busque ayuda pero es muy terco y yo no quiero discutir con él así que me tengo que quedar callada.
Llego a mi casa me lavo los dientes y me acuesto pensando en el día de mañana y queriendo que pase rápido las horas para volver a ver al hombre que me tiene muy enamorada.
N/A: Bueno acá les dejo un nuevo capítulo. Este es el punto de vista de nuestra protagonista.
Espero que le guste y ya saben voten con la estrellita y comenten.
