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.Luka.

"Andábamos sin buscarnos, pero sabiendo que andábamos para encontrarnos"

Era viernes por la mañana y un chico corría de lado a lado para buscar la uñeta de la suerte que utilizaba en cada concierto.

Habían pasado un par de días desde el incidente con Marinette y el solo recuerdo de la chica lo atormentaba hora tras hora.
La buscó por los alrededores de su departamento y los alrededores de la Place de la Bastille, de mañana a noche pero sin resultado alguno.

Optó por olvidarla pero fue totalmente en vano.

Dónde dejé esa maldita uñeta.- exclamó furioso. Pronto debía marchar al concierto y la uñeta no aparecía por ningún lado.

Buscó entre cajones, ropa sucia, levantó cojines y hasta por las plantas del balcón... No había rastro.
Marcó al número de su hermana para saber si ella la tenía, después de todo habían ensayado lo que restaba de semana y pensar que ella la podía tener lo calmaba un poco.

¡Como que no la tienes! .- era su fin.
Juleka, ¿estás completamente segura?.-

Escuchaba atento a su hermana al otro lado del teléfono.
Luka se resignó y buscó otra uñeta.

La mañana pasó lenta y aburrida, el concierto era por la tarde y todas esas horas solo se dedicó a pensar en marinette.
La canción que ella había inspirado, llevaba por nombre "Pequeños Puntos" y sólo esperaba ver a aquella chica para mostrarle la creación que ella misma ocasionó.

Es increíble la forma en la que esa chica se metió en mi cabeza. - se decía a sí mismo a cada hora.

Finalmente, luego de tantos pensamientos y ensayos. Llegó la hora del concierto.
El escenario era grande e iluminado por varias luces multicolores y la galería de gente estaba repleta.
Luka miró de reojo a su hermana y esta solo asintió con una sonrisa cómplice, mientras sincronizaba el audio de los micrófonos.

El concierto dio comienzo con grandes aplausos y gritos, el calor corporal se sentía en el ambiente y la voz de luka hacia estrépito en todo el lugar al igual que los solos de su guitarra.
Do, sol, fa... notas altas y bajas, gritos y luces cegadoras, olor a cigarro y en un abrir y cerrar de ojos ahí estaba.
Marinette estaba mirando estupefacta al guitarrista de la banda con un sonrojo inevitable de ver, ¿O a caso era un reflejo de las luces? Luka ya no estaba seguro, lo único que sabia era qué; una vez más, el destino la había guiado a él y esta vez, no la dejaría ir.










Capítulo mega corto.
Espero les guste ♡

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