31 de Octubre.1989_
Mi alarma sonó y al instante la apagué.No había dormido en toda la noche,pero no podía no ir a la escuela,hoy tenía dos exámenes,y le había prometido a mis padres subir mis notas,y todo eso.
Me levanté de la cama lentamente,y me quedé sentada.Miré mi closet,y luego fui hasta éste a buscar mi uniforme,de todos los días.Hoy era el primer día en que me sentía destrozada. Ayer me enteré de que mi padre no sobrevivió,y hoy iba a ser de esos días horribles,en los que tienes que soportar a los chistes de la gente,aunque no sepan de tu estado,y soportar a los profesores que comenten lo sucedido.
En fin,me coloqué un maquillaje natural,que tape un poco las ojeras,y mi no tan buen descanso. No es que me importara que la gente se entere,la cosa era normal en mí. Me daba igual lo que la gente pensara de mi,a menos que venga de alguien a quien de verdad quiero.
Un poco de perfume y tomé mi moquila para ir a comer algo y de ahí,ir al instituto.
Tomé una manzana,y luego salí de la casa.Mi madre se había ido a trabajar,y era mejor,no quería verla destrozada,pero quería que por lo menos despeje su mente un poco. Al igual que yo.
Escuché una bocina y miré de donde venía. El auto de Moon.
Bajó la ventanilla e intentó esconder bastante una sonrisa.
-¿Subes?-preguntó.Hice una mueca.-Vamos,por favor.-casi suplicó.Asentí y me subí del lado del copiloto.
Arrancó el auto y lo condujo hasta el instituto.El camino,por nuestra parte,fue silencioso,mientras que la música de Jason Mraz sonaba. No quise mirarlo,solo miré las calles por la ventanilla.-Bien...-dijo mientras bajaba del auto.Hice su mismo gesto.- Te veo en clases.-continuó y noté que quiso saludarme,y mis nervios se aproximaron. Me besó en la mejilla y se fue.
¡Oh Dios Mio!
Ya,tranquila,solo fue un beso en la mejilla,no es para que tus mejillas se rubori....Tarde.
Evité que alguien viera mis mejilla,y luego caminé hasta salir del estacionamiento de la escuela,hasta llegar al campus.
-Holliday...Buenos días.-me dijeron unos compañeros que estaban entrenando.Hice una mueca,mientras todos los de la escuela me decían que lo sentían.
Ya todos estaban enterados de lo sucedido,pero no podía hacer nada.
Chris Loud se acercó a mi con Marco Young,y Teo Moon. Como no esperarse eso.-
-Hola Diann.-me saludaron los dos,menos Moon,quién solo me mostró una de sus pequñas sonrisas.Pero que me gustaban.-Nos enteramos de ya sabes...Lo sentimos.-dijeron.No dije ni hice nada.Me limité a caminar para encontrar mi casillero y comenzar las clases de una buena vez.
Tomé mis libros de Francés y otros de Biología.
Dios,como odiaba este día.Exámenes y lamentos.
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-Cuéntame Diann...¿Cómo te sientes hoy?-preguntó Dylan pasando un brazo por mis hombros.-
-Bien...Oye,ya no quiero escuchar los pésames de nadie,por favor...Solo,pasemos el día.Hasta los profesores me atormentaron.-le supliqué a Dylan.-
-Bueno,¿en dónde nos sentamos?-preguntó Liz quién no había pronunciado palabra alguna.La miramos,mientras ella buscaba con la mirada una mesa. Ya teníamos las bandejas en manos,por suerte no había tanta fila.- En esa.-señaló una que estaba vacía,por suerte.Aunque era obvio que alguien más se sentaría con nosotros. Caminamos hasta ahí,y luego nos acomodamos.-
