¿He Is My Prince? [NAMSON]

• Capítulo 5 •

—¡¿Y que hacías con él?!

—Ya te dije que nada! Solo es un amigo que no veía desde hace tiempo!— Dijo alzando un poco la voz.

—No me levantes la voz Jackson!

—Lo haré cuando quiera!— Sus mejillas se humedecieron de inmediato al sentir esa sensación de estar atrapado —Te dije que no me levantarás la voz!!— Gritó dándole un fuerte golpe haciendo que cayese al suelo, el castaño se acercó bruscamente y Jackson retrocedió un poco —¡No te me acerques!— Dijo asustado, el contrario no hizo caso sujetando su cuello con fuerza —Si sigues haciendo esto Wang te juro que no vas a poder conmigo— Soltó su cuello con molestia.

El rubio tosió unas cuantas veces.

—Recibirás un castigo por esto jovencito...

Jackson miró hacia arriba viendo esa mirada matándolo por dentro —N-No por favor! Han! No lo volveré a hacer te lo juro!— El pánico lo invadió por completo, sabía exactamente a lo que se refería con el castigo.

—Lo siento Jackson.. ahora tendrás que pagar las consecuencias por tus malos actos.

—Han.. Enserio! Lo siento pero por favor no hagas esto!..— Su voz se transformó en una que jamás había escuchado en su vida, una con temor, angustia y desespero.

Lo levantó empujándolo a la cama que tenían justo en la parte de al lado. Han se puso encima de él dejándolo si alguna escapatoria, empezó a besar bruscamente su cuello dejando marcas muy notables en él, Jackson perdió completamente todas sus fuerzas en un par de segundos, sabía que todo esto era un error desde el principio pensando que se arreglaría después pero finalmente era un problema sin solución.

Metió sus manos debajo de su sudadera y camisa, y quitó estas dos de una sola. Entrelazó sus manos con las de él inmovilizándolas para que no pudiera escapar.

—H-Han.. por favor.. n-no lo
hagas— Mencionó con una voz quebradiza. Soltó sus manos para bajar a desabrochar su pantalón mientras Jackson intentaba empujarlo pero no tenía fuerzas en ese momento.

Después de unas horas.

La noche había caído. El silencio invadía todo a su alrededor.

—¿Aprendiste tu lección pequeño?

Jackson no respondió, se encontraba en una esquina de su cama con las piernas encogidas. El castaño se acercó a él acariciando su mejilla

—O acaso... quieres hacerlo otra vez?

Jackson negó lentamente, sus ojos estaban rojos de tanto llorar ese día  no encontraba fuerza alguna para poder enfrentarlo.

—¿Entonces aprendiste tu lección?

—S-si...—

—Bien...—Sonrió, pues obtuvo lo que quería y que Jackson no le quería dar, aunque lo tuvo que hacer a la fuerza lo consiguió y ahora nuestro protagonista estaba devastado.

—Ya es tarde, es hora de irme. Nos vemos pequeño— Se acercó y le dió un beso en la frente para retirarse de la casa de campo.

[...]

Sonó su alarma a las 6:00 am, se levantó lentamente de su cama mientras tallaba sus ojos. El día anterior había regresado a su mansión así que pudo dormir un poco más tranquilo. Se levantó y se fue a dar una ducha rápida para después ponerse nuevamente una sudadera que le cubra bien las marcas de los brazos y cuello, unos jeans oscuros y unos converse negros.

Se sentó un momento en su cama antes de irse y miró hacia abajo, cubrió su rostro con sus manos con un par de lágrimas al borde, cubrió su boca evitando hacer algún sonido.