"Wonderland" Ppg (Pausada)

Capitulo 1

Londres 2006

La luz de la luna brillaba en toda la ciudad de Inglaterra, como la misma noche que reemplazó la luz del día, no muy lejos de ahí en una mansión se encontraba un hombre de cabellos negros y ojos cafés conversando con quienes parecían ser sus socios, tenía puesto un traje muy elegante de color negro acompañado de una corbata de color azul marino cómo el mismo mar y zapatos del mismo color de su traje, ese era Peter Prince uno de los inversionistas y empresarios más poderosos de toda Europa, era famoso por sus investigaciones e inventos que se decían que era fuera de este mundo o así lo veía él.

— Como pueden ver caballeros — habló Peter tomando una copa de vino — El presupuesto de esta semana es de 10.000 libras por lo que me es posible lanzar un nuevo proyecto a todo el mundo y es por eso que quiero hacerles una propuesta.

— ¿Una propuesta? — preguntó uno de ellos que parecía estar tomando nota

— Claro, y les aseguro que está propuesta no la podrán rechazar — contestó con una sonrisa satisfactoria — Será parte de nuestro gran proyecto.

Mientras tanto ellos discutían sus negocios, en una habitación a lo más al fondo de la mansión dormían tres pequeñas niñas, una pelirroja, una pelinegra y una rubia que tenía un pulpo de peluche en sus manos. Ellas eran Blossom, Buttercup y Bubbles Prince de tan sólo 6 años de edad, hijas del poderoso empresario Peter Prince, cabe demás decir que las tres niñas tenían hermanos mayores, pero estaban de viaje ya que eran estudiantes de intercambio y no regresarían hasta dentro de dos meses.

Las pequeñas dormían sin ninguna preocupación o eso parecía porque se podía notar como las tres fruncían el ceño y daban vueltas en sus camas, era un momento algo ¿Incomodo? ¿Raro? ¿Fuera de lo común? Algo así se veía pero en cuanto las tres abrieron los ojos de golpe...

— ¡Nooo! — gritaron las tres respirando agitadamente mirándose entre sí.

Agradecían que su padre estuviera ocupado en sus negocios con sus socios, no querían preocuparlo por una tontería como esa pero aún así no dejaban de sentir miedo por ese sueño.

Ninguna de las tres tenían palabras para explicar lo que acababan de soñar, cómo pudieron se levantaron de sus camas y decidieron caminar un rato para olvidarse de ese sueño tan extraño y pensar en otra cosa, sin darse cuenta habían pasado por el estudio donde vieron a su padre que discutía con sus socios sobre su nuevo proyecto.

— Creo que al fin has perdido la cordura Peter — habló Édgar Collins, socio y mejor amigo de este — Esa idea que tienes en mente es demasiado descabellada y es imposible que logres llevarla a cabo.

— Para mí no hay imposibles y más cuando se trata de hacer crecer las empresas — sonrió con satisfacción Peter

Antes de que dijera otra cosa se giró hacia el pasillo y al igual que sus socios vió a sus hijas despiertas pero pudo notar que las tres parecían estar pálidas y asustadas, lo que lo preocupó al instante sabiendo de lo que se trataba.

— ¿La pesadilla regresó? — preguntó sin rodeos

Las tres sólo asintieron con la cabeza.

— No me tardo — avisó y salió con sus hijas para llevarlas a su habitación

— Claro — ellos sólo asintieron con la cabeza.

Una vez que las llevó a su habitación las arropó en sus camas y se sentó en una silla, pudo ver lo asustadas que se encontraban, aunque la pequeña pelinegra intentaba mostrarse fuerte por lo que esperó a que se tranquilizaran, una vez que las tres se calmaron...

— Vamos cayendo, por un agujero oscuro — comenzó a contar Blossom

— Y ahí hay criaturas extrañas y un mundo igual de extraño — siguió Buttercup

— ¿Qué clase de criaturas y cuál mundo extraño? — quiso saber Peter atento a la historia

— Un dodo, un pájaro y además un conejo — respondió Bubbles aferrada a Pulpí — Y un gato sonriente.

— Los gatos sonríen, no lo sabía — se sorprendió Peter dejando salir una sonrisa

— Nosotras tampoco — opinaron las tres — Y además hay una vieja oruga también y tres chicos con orejas de duendes...

— Okay, una vieja oruga y tres chicos con orejas de duendes — claramente Peter creía que sus hijas tenían una gran imaginación, algo que comenzaba a preocuparle.

— ¿Tú crees que ya perdimos la cabeza? — le preguntaron a su padre

Él se quedó callado por un segundo y decidió responderles...

— Temo que sí — contestó tocándole a cada una la frente — Se han vuelto locas, dementes, chifladas pero les diré un secreto, las mejores personas lo están.

Ellas rieron levemente ante la respuesta de su padre aunque no las convencía del todo.

— Sólo es un sueño niñas, nada ha de dañarlas — dijo con una sonrisa - Pero si se asustan mucho, sólo tienen que estar atentas a todo y darse un pellizco leve así.

Se levantó y las pellizco levemente en sus brazos y ellas se quejaron soltando una risa la cuál fue contagiosa que su padre también se rió mucho.

— Bien mis niñas las dejo para que aborden de nuevo el tren de los sueños — les sonrió dándoles un abrazo fuerte y un beso en la frente para salir de la habitación y apagar la luz — Descansen niñas.

— Igual tú papá — dijeron ellas volviendo a acostarse

Una vez que su padre cerró la puerta dejándolas solas...

— No fué difícil, al menos nos creyó — suspiró pesadamente Blossom

— No era para tanto — renegó Buttercup — Sólo era la misma pesadilla de siempre.

— Pero se ve tan real — opinó Bubbles abrazando fuerte su pulpo de peluche — ¿Creen que sea normal tener esta pesadilla todas las noches?

— Pues.... No lo sabemos — Blossom y Buttercup se encogieron de hombros como si no tuvieran la respuesta a esa pregunta y claro que no la tenían.

— Como sea no debimos interrumpir a papá con este tipo de tonterías — alegó Buttercup

— Es mejor volver a dormir — asintió Blossom volviéndose a acostar — Buenas noches.

— Buenas noches — dijo Buttercup imitando a Blossom

— Ay pues ya que, que descansen niñas — Bubbles parecía no querer cerrar los ojos ya que temía volver a soñar lo mismo o algo peor que eso, por lo que decidió ir a dormir como sus hermanas igual qué ellas sabía que su padre tenía toda la razón, era sólo un sueño y nada habría de dañarlas aunque tenía un ligero presentimiento de que algo estaba por ocurrir...

Continuará