Capítulo 1

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Harry había quedado huérfano, sus padres murieron en un horrible accidente, por suerte no pasó a manos de instituciones de acogida, orfanatos o personas extrañas que podrían ser dañinas para el. La opción que barajo el sistema en primer lugar era darlo a la hermana de su madre, la más cercana y posiblemente única familia sanguínea que tenía, pero estos se negaron rotundamente, alegando que ya tenían un niño del cual preocuparse, por suerte, el testamento de James Potter indicaba que su deseo era que su mejor amigo y a quien consideraba su hermano, cuidase de el pequeño Harry, así que este con gusto aceptó ese papel de tutor. 

Los Potter eran una familia de buen estatus económico, vivían con suficientes comodidades, aunque no era lo suficiente como para mantener de por vida a Harry, no cómo podía darse lujo Sirius Black, su padrino que tenía tanto dinero como para vivir cinco veces con todo lujo y despilfarro, los señores Black habían muerto por edad, habían intentado desheredar a su hijo, pero ni locos dejarían su dinero al gobierno, así que no les quedó de otra que dárselo a su primogénito tras la muerte de su segundo hijo Regulus. 

Si Lily tenía alguna amiga o amigo a quien le confiaría a su hijo, nadie lo supo y no había prueba de ello, venía de una familia de clase media baja, de la cual no tenían la costumbre de hacer testamentos y actualizarlo ante cualquier cambio de deseo, situación o capricho, de hecho no le agradaba a Sirius, hizo que su amigo dejara su gran casa, la vendiera y vivieran en una miserable y ridícula casa (a ojos de Sirius) donde claramente lo puso en peligro, solo por querer sentirse moralmente superior y decir que no necesitaban de todo eso, su amigo era un estúpido cegado por amor que obedecía las palabras de su pelirroja mujer, desde que se enamoro lo habían perdido e incluso Remus lo aceptaba, no se llevaba mal con la pelirroja, pero era algo cordial más que otra cosa, chocaban mucho sus ideales y maneras de expresarse, aunque no lo pareciera, la pelirroja tenía emociones y pensamientos arrolladores y era verbalmente conflictiva. 

Sirius culpaba a Lily y a Peter de la muerte de su mejor amigo, su supuesto amigo delató a la familia de ser adinerada, entraron a robar todo lo de valor y le robaron la vida al oficial de policía y a la madre, no había la gran cosa, pero si no fuera por la pelirroja y el estúpido director que terminó por convencer a su mejor amigo de mudarse a ese horrible barrio, sin seguridad, sin nadie de su mismo estatus, con gente tan asquerosa que envidiaba hasta el aire que respirabas, las cosas no hubieran sucedido así, Remus se sentía muy identificado con ese pensamiento, pero no lo expresaba tanto como lo hacia el pelinegro. 

El ex policía que era Black, por estar codo a codo con su mejor amigo, se había estado sintiendo inconforme con su trabajo, por la actitud estresada que tomaba James, las disputas entre ambos, no por cosas estúpidas como en la escuela, eran discusiones fuertes donde James decía más de lo que debería y quería, hiriendo a sus amigos quienes solo continuaron con el gracias a que sabían que tras esa fachada de alegría por su matrimonio y pequeño niño, había un cúmulo de sentimientos negativos, miedo por lo peligroso de su trabajo y temor a morir dejando a su familia sin nada, estrés porque se dio cuenta que se volvió muy complaciente, había planeado muchas cosas y por satisfacer a su esposa las dejo atras, piso sus planes, esperanzas, sueños, metas, para que la mujer que decía le amaba no le abandonara, sentía inseguridad, no quería que su hijo creciera en una familia rota, pero tampoco quería que le faltaran sus padres, dudaba de sus sentimientos por Lily, no congeniaban mucho, su autoestima había sido pisada hasta llegar a ser ese adulto con un hijo con una edad que su estatus y sus padres consideraban como muy joven, apenas había terminado los pocos años que pedía la academia de policías, no tenía una maldita carrera, estudios, especialidad, mando su educación familiar, su planificación a la mierda, no regresaba a casa hasta la tarde de su día libre porque bebía con sus amigos el día anterior al terminar el turno y lloraba lleno de preocupación, insatisfecho por su vida, sus decisiones, simplemente aterrado y lleno de celos de sus amigos, el se había estancado y atado, ellos seguían siendo libres. 

Simple caprichoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora