Capítulo 6

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Harry desde ese momento espero que algo más pasará en cuanto a los caprichos del rubio, pero no hacia más que pedirle cosas básicas como comida y cuidados básicos, se sentía como los esclavos de las películas que veía con Remus sobre la Grecia antigua, porque era básicamente lo que le pedía, que lo bañara, que le alimentara, que le cuidara. 

Había pasado una semana desde lo sucedido, notaba como el rubio se marchaba y volvía, siempre por la tarde, regresando antes del anochecer, parecía una costumbre, se quedaba con su computador y hablaba rendidamente por teléfono. 

Lucius le había visitado una vez, reviso todo, charlaron un poco y le felicito por permanecer ahí una semana, al parecer "le agradaba" a Draco. Fue obvio el quejarse sobre lo sucedido, pero el hombre parecía totalmente indiferente al respecto, de hecho podía ver un brillo de alegría cuando relato lo sucedido, el hombre le dejó en claro que no estaba obligado más que a cumplir con las cosas básicas, que lo que hiciera fuera de contrato con Draco era su responsabilidad, no estaba obligado a nada, que el rubio menor jamás se quejaría por que no aceptara y no tenía el derecho de despedirlo o algo, así que no debía preocuparse el quedarse de la noche a la mañana sin lugar donde quedarse. 

De cierta manera era bueno saber que no iba a ser echado por desobedecer al rubio menor, pero era igual de fastidioso el cómo el hombre mayor se limpiaba las manos del asunto, pero no podía esperar mucho de ellos, Sirius se lo repitió muchas veces y por sus estupideces terminó en esa situación "no firmes nada sin un abogado presente" "Jamás firmes algo que no has leído completamente" "no firmes algo de lo que estés seguro, por más mínimo que sea ese detalle que te incomoda, debes estar conforme" "Jamás firmes un contrato con un Malfoy, un Black o una familia del estilo, van a intentar devorarte vivo, porque así son los negocios Harry".

Pudo salir con sus amigos gracias al dinero que Draco le dio, sin mencionar que Snape era muy bueno investigando, porque no importa cuánto se negara y se empeñara en ocultarse, el hombre había comenzado a dejar una cantidad decente en su cuenta bancaria, pero por orgullo no quiso tocar ni un centavo, al menos hasta ese momento, el hombre no parecía ser de cuentas sociales, pero tenía unas propias, mejor dicho dos, tenía lo necesario para un contacto profesional y luego estaban las que Sirius había hecho para el hombre, que apenas tocaba, pero Sirius si que las usaba por él, o eso pensó, ya que el hombre había creado una cuenta de pareja para ambos, no era nada público, pero ahí si que Sirius intervenía. 

Harry podía mantenerse de cierta manera en contacto con Sirius de esa manera, el no usaba mucho sus propias redes porque era acosado, solo mantenía una imagen profesional de empresario, así que de cierta manera era grato ver como Snape era tan considerado y consciente de Harry que comenzó a hacer uso de las mismas para darle algo de contacto con su padrino. Su cuenta era privada, así que eso le ayudaba a tener controlado el quien miraba tal contenido.

Estaba sentado, con algunas lágrimas intentando salir de sus ojos, estaba hecho un ovillo en su cama, había dejado sus estudios de lado porque se sentía solo ese día y deseaba tener algo de contacto con su padre, así que entro al dichoso perfil del hombre. 

—"Sirius, haz vuelto a beber de más"— hablaba el hombre que parecía estar sentado y grabar perezosamente desde el celular, su tono era bajo, el lugar parecía iluminado con unas luces tenues y el mencionado bajaba una vaso de whisky a medio beber, la bebida favorita de ambos.

El vídeo terminaba ahí, así que presiono para ver el siguiente, donde parecía continuar la grabación anterior. 

—"¿Eso crees Sev?"— preguntó girando finalmente a verlo, se le veía su mirada triste.

—"Yo lo sé"— sentenció el hombre serio, recibiendo una pequeña risa en forma de respuesta. 

—"Me conoces muy bien, sabes que extraño a Harry"— 

Simple caprichoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora