Un cruce, una rosa negra y un trozo de cristal

Recuerdos

Tomó su móvil y contestó:

-Hola, claro que te recuerdo, y no te preocupes por si piensas que te veo como una rarita, me pareciste muy simpática.

La joven estaba en línea y no tardó más de 5 segundos en empezar a escribir:

-Es un alivio que no pienses eso de mí, y bueno... Me gustaría que fueramos amigos, así que. ¿Cuando estás disponible para salir a algún lugar?-

-Mmm... Déjame pensar... ¡Ya sé! Inauguraron una tienda de waffles antes de ayer, ¿Te parece si vamos el viernes a comer allí?-

-¡Claro! Me gustan mucho los waffles, entonces... ¿El viernes a las...?-

- 16:15 horas, yo invito-

-Bueno, ahí nos vemos -

A Jeffar no le duró mucho la felicidad de la organización para su junta, ya que al dirigirse a la cocina, vió sobre la mesa la inquietante carta escrita con letra color carmesí.

-¿Cómo demonios pagaré esa deuda?- pensaba- Si tan solo no hubiera sido tan necio de entrar a ese lugar... No estaría en este aprieto, no se que estará pensando Ruckhie... Pero puedo asegurar que no es nada bueno.

3 años atrás

-Amigo, ¡Nos ganamos la lotería¡. ¿Quién hubiera pensado que un solo robo cambiaría nuestras vidas?-

-Lo sé Ruck, es sensacional, pero porfavor no te desconcentres y sigue mirando el camino, recuerda que estás conduciendo pedazo de im-
Justo antes de que terminara de hablar, el auto se vuelca debido a un bache en la carretera, cayendo a un costado de esta y dejando malheridos a Ruckhie y a Lepson. Ambos salen del auto completamente magullados y cubiertos de sangre.
-Idiota, te dije que estuvieras atento al camino, ¡Pero no! ¿Para que tomar en cuenta al gilipollas de mi compañero cuando puedo hacer las cosas yo solo y cagarla?-

-Ya basta idiota. El dinero, ¿Está donde debe?-

-Sí, toma el maletín y rápido antes de que se incinere junto con lo que queda del vehículo.-

-Llamaré a Jeffy, el nos encontrará una ruta nueva, debido a que tú la volviste a cagar. Menudo asco que me das ahora.-

-¿Podrías olvidarte de eso? Apuesto a que tu también lo hubieras volcado "señor perfección".-

-Hola, Jeffy... ¿Sabes? Necesito que me hagas un favor, estoy en un aprieto debido a que Ruck como siempre... la cagó otra vez. Así que necesito que me envíes una nueva ruta para llegar a la bodega antes de que la policía se de cuenta de que faltan cuarenta millones de dólares en efectivo en el banco de la ciudad. Espera... ¿No eran cua- se interrumpe- sí, entiendo. ¡Lo siento ¡¿Sí?! Es difícil escucharte y poner una maldita clave en una caja fuer- ¡Solo mandame la ruta maldición!-
Lepson cuelga la llamada para dirigirse a Ruckhie y mostrarle el nuevo camino a seguir a pie. Se tardaron 2 horas y media en divisar la construcción rentada. Al llegar a la bodega, ingresaron a esta por una ventana y movieron una palanca escondida que habría a un pasadizo secreto. Al entrar se encontraron en un pasillo adornado con un tapiz rojo y cuadros de paisajes hermosos.
-Hola chicos, ya era hora de que llegaran- La voz era de Jeffar, el que organizó el exitoso robo- Desarrollé algunas cosas nuevas mientras no estaban, espero les sea de utilidad- dijo el joven dándoles una especie de auricular brillante.
-¿Y esto es...? - preguntó Lepson curioso.

-Imaginé que podría pasar una situación como la de ahora, así que para que no tengan que sacar sus teléfonos para llamarme, decidí crear unos comunicadores únicamente para esta línea. Así que cada vez que estén en problemas pulsen el botón, y yo contestaré la llamada de forma instantánea-

-Entiendo- dijo Lep- ¿Sabes? Si fueras una chica definitivamente estaría contigo, eres muy listo, y el ¡único!-alza la voz dirigiéndose a Ruck
quien no estaba poniendo atención al asunto si no a sacarse el polvo del trasero que optuvo al salir del coche- que hace bien las cosas aquí

-Jaja, gracias por el halago Lep, pero recuerda que sin Ruck, jamás se hubiera logrado el atraco, el fue quien vigiló a los guardias durante semanas para estudiar sus turnos y cambios de horario. No te enojes con él por estropear un carro, además tenemos 5 más, y ese ya lo usamos para viajes, lo identificarían rápidamente en las cámaras de seguridad-

-Supongo que tienes razón... de igual manera pudimos haber muerto allí- agregó aún molesto.
Jeffar seguía inquietado por su instinto, algo le inquietaba. Tenían el dinero, borraron la evidencia del auto y nadie los siguió... pero algo le preocupaba. Algo que a simple vista nadie se daría cuenta.

(Continuará)