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6 meses después.

Enero 20.

-Vamos Tae, ya es hora- él peli-azul asintió.

Miro a Jin y Jimin a su lado, ambos portaban trajes formales de colores oscuros, mientras que el vestía uno blanco.

Este era el momento.

Este era el día.

Hoy era su boda.

...

La estancia de aquel día era un restaurante, el favorito de la pareja.

Paredes y adornos tallados en madera, ventanales adornados por largas cortinas en color vino y candelabros antiguos que daban la más cómoda y sofisticada bienvenida a los invitados.

Las mesas a su alrededor con un centro de mesa hecho con rosas de distintos colores pasteles y manteles blancos.

-Wow, esto es increíble- al entrar al restaurante, Jisoo quedó fascinada con el lugar y el empeño que sus amigos pusieron en la decoración del lugar.

-Se ve que Jimin y Tae se esmeraron en los arreglos— dijo Hoseok a su lado mientras se tomaban de la mano.

—¿Y entonces Jungkook que hizo?—.

—Hizo más de lo que crees pequeña— una voz grave a su lado los hizo voltear, Namjoon había llegado con ellos, con una copa en su mano y acompañado por Yoongi.

—Por él es que ahora mismo vas a disfrutar de las delicias de este restaurante— dijo Yoongi mientras bebía lo último de su copa de vino tinto.

—¿A caso hay exclusividad para amigos?— Namjoon le hizo una pequeña seña para susurrarle al oído.

—Con solo decir tu nombre puedes pedir lo que sea en la barra, sin necesidad de esperar hasta el banquete—.

Si este era un gran día de festejo, era claro que no desperdiciarían ni un momento... A pesar de que aún no empieze la ceremonia.


~~~~~~~~~~~~~~

Minutos después de que Jin y Jimin regresaran con sus parejas, una música tranquila de violín comenzó a sonar en el lugar, Hoseok quien se encontraba en el altar -calmando los nervios de Jungkook- acomodo su traje y el de su amigo para que estuviera impecable para Tae.

—Joder, mis manos no dejan de sudar— murmuró el pelinegro, mirando a  cada segundo la puerta por donde entraría su futuro esposo.

—Tan solo respira—.

En ese momento las personas se giraron al escuchar la puerta abrirse, dando paso al peliazul, portando un hermoso traje blanco con pequeños detalles en rojo.

Entre esos detalles se encontraba un pequeño ramillete de flores rojas atado a manera de pulcera en su muñeca derecha.

TaeHyung era acompañado por su madre, tomados de la mano avanzaron por el pequeño pasillo hasta quedar frente al pelinegro. Jungkook había quedado estático en su lugar al momento de divisar por primera vez en el día a su pareja.

"No debes ver aún su traje hasta la boda, es de mala suerte".

Con una pequeña sonrisa en sus labios recordó las palabras de Jimin, debido a eso ahora se encontraba totalmente hipnotizado por lo hermoso que parecía Tae frente a él.

Podía jugar que al rededor de Tae un aura muy brillante iluminaba su camino. Qué sin importar el abismo en el que habían caído, con su simple sonrisa y brillar de Tae encontraba una salida para ambos. Y nuevamente se juraban amor.

Mute ~KookV~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora