El plan.

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Las calles pasan rápidamente ante mis ojos, pronto el bullicio de la gran ciudad comienza a desvanecerse al igual que la multitud.

El sol salió hace un par de minutos, un poco más y por fin estaré en el lugar que deseo llegar.

Unos segundos pasaron y al fin miré mi objetivo.

De un solo impulso subí a la pared, atravesé la entrada por en medio del follaje de los árboles, y de la misma forma en que subi... También baje.

Rápidamente corrí hacia el edificio que se veía ya cerca de mi, en tan solo cuatro segundos estaba ya parada en frente de la puerta de aquel recinto.

Leí nuevamente la inscripción que muy delicadamente había sido tallada en el puerta de piedra.

Está se abrió y con prisa me introduje al interior de la casita.

Como cuando desperté, todo  aquel lugar estaba sin luz. Con detenimiento observé cada parte del lugar.

Derrepente... Una sombra se levantó de uno de los pequeños sofás que había en aquella habitación.

Una voz grave pero suave y  aterciopelada, muy conocida para mi me habló:

-¿A qué has venido Candy? Yo que sepa aún no has hecho nada por tratar de recuperar- hizo una pausa y vi como apretó uno de sus puños y se le dibujo en su rostro una sonrisa falsa y triste y continuo después de un par de segundos- al amor de tu vida.

-Por cierto, ¿Cómo dices que se llama?- dijo llevándose el dedo meñique a los labios y haciendose el tonto en no recordar el nombre de mi gran amor y cuando por fin, según él lo recordó continuo-  ¡Ah, sí! Ya lo recuerdo, Terrence Graham Granchester, el famoso actor que toda mujer desea tener en su casa pero mucho más en su cama, ¿no es asi?- finalizó dirijiendo sus pasos a una pequeña mesita de centro, la cual tenía una botella de whisky y votcat.

Tomo la bebida que más se le apetecía en ese momento, osea el whisky, se sirvió una gran copa y me miró fijamente a los ojos esperando mi respuesta.

Con gran resolución le sostuve la mirada y le contesté de la forma más amable y dulce que pude:

- Respondiendo a tus preguntas mi queridísimo Guille... En primer lugar, en efecto no he dado aún mi primer paso y en segundo-en ese momento me acerco a él le susurró lo siguiente- Te aseguro que la única mujer que lo tendrá en su casa y cama, ¡seré yo! - dije muy segura de mi y viéndole a los ojos me dispongo a realizar lo que tengo planeado- Ahora bien, si estoy aquí es por que necesito de tu ayuda- dicho esto, me acerque a él y le tome su mano derecha y me la lleve a mi rostro y continuó con mi discurso- tu dijiste amarme y ahora yo te digo, si realmente lo hacés... Ayudame a efectuar un plan que tengo en mente.

- Y si... Después de todo lo que hagas, él no quiere volver contigo,no, más bien dicho, ¿Que obtengo a cambio de prestar mi ayuda?- dice acariciando mi rostro y delineando suavemente mis labios.

- Si me ayudas Guille y si después de pelear él no quiere volver conmigo- tome aire y baje la mirada y después lo vuelvo a mirar fijamente y digo- Yo te juro... Te prometo que regresaré contigo y correspondere a tus sentimientos, pasaré toda la eternidad a tu lado y lucharé por hacerte feliz. Eso es lo que podrías tener a cambio.

- Me parece perfecto y un buen trato- dice dulcemente y después me da un rápido beso en mis labios- y de esta manera firmamos el convenio- se separa de mi y se dirige al sofá de donde previamente había estado sentado y nuevamente toma su lugar, hecho eso toma su vaso de whisky y me mira a los ojos y me pregunta muy seriamente- ¿Y bien? ¿Cuál es ese plan que quieres llevar a cabo Candy?

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