Al otro lado del mundo

Este es el plan

Renata.

Me despierto entre abriendo los ojos, trato de ver que se encuentra a mi alrededor en ese transcurso de segundos puedo sentir los pies de Micaela cerca de mi rostro ya que de alguna manera esta encima de mí.

¡Mica....! ­— digo, con tono de queja mientras saco su pierna encima de mí.

En ese momento ella suelta un pequeño gemido con tono de — "déjame dormir".

No me deja más opción que empujarla al suelo.

¡Plof!— se escuchó en el momento que ella impacta en el suelo de la habitación.

Al instante veo su mano levantarse para señalarme con su índice.

Es la última vez que me haces eso mientras sueño con un macho, ¡señorita!— dice, mientras movía su dedo apuntándome.

¡jajajajajaja! —rompo de risa al instante que dice esas palabras.

Está bien señorita— no interrumpiré sus orgasmos— digo para volverme a reír.

Tonta —dice mientras se levanta y me arroja una almohada.

Después de un rato voy hacia la cocina acercándome a la nevera para ver que se puede comer. Noto que solo hay un poco de leche así que me sirvo solamente un vaso.

¿Qué hora es? ­­­- le pregunto a Micaela mientras me cruzo de piernas en el sofá.

Son las 9:00 de la mañana – incida después de ver su teléfono.

¿Quieres salir a correr después de tomar tu leche? – pregunta Micaela mientras se arrima al mesón detrás de ella.

Pensándolo bien llevo 2 días sin prácticamente moverme mucho además ayer comí cosas grasosas así que sería bueno salir a hacer ejercicio un rato.

Está bien – digo después de acabarme mi leche.

Después de asearme voy hacia el cuarto para ponerme una licra, zapatos deportivos y una camisa deportiva mangas largas de color azul marino, casi se me olvidaba traer la banda para llevar el teléfono.

¿Esta lista chica? – escucho la voz de Micaela viniendo de la sala.

¡Si capitana estamos listos! - Digo mientras entro a la sala levantando los brazos.

Reed

Mi rutina diaria se vuelve a repetir, golpeo el despertador que parece estar hecho de celulares Nokia, después me cepillos los dientes para después bajar a comer lo que sea que hayan preparado los chicos.

Bajando las escaleras le pregunto a Tato - ¿Qué haremos hoy?

¡Cámbiate! - Me ordena mientras se prepara un batido de proteína.

¿Exactamente a dónde vamos?- pregunto, levantado una ceja dándole a entender que no entiendo nada.

Vamos Reed, no has ido al gimnasio en una semana y has tragado como cerdo, déjate de chistes y vámonos - me explica antes de beber otro sorbo de su batido.

Decido obedecerlo ya que tiene toda la razón, después de guardar unas cosas en mi mochila subo al auto con los chicos, el trayecto no fue tan largo ya que el gimnasio está a tan solo 5 minutos de la casa, lo bueno de este lugar es que los chicos y yo somos buenos amigos de los dueños del lugar.

¡Qué tal chicos!, pensé que tiraron la toalla- nos dice Marcus, el dueño del lugar.

Solo hemos tenido varias cosas en mente Marc- le asegura Tato, mientras busco de reojo a Oliver que vaya sorpresa, él está con una de sus amigas del lugar.