Cálido Averno.

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Advertencia : Contenido de una violación, transtornos mentales desarrollados y violencia, por favor, no apto para sensibles.

Sinceramente soy una persona que le gusta dar detalle para que el lector sienta empatía al personaje, pero si no les gusta lo explícito, háganmelo saber y trataré de hacer ésto menos... Violento, menos sádico, sin más preámbulos sigamos.

/actualizaciones cada fin de semana/ inspirado en : What he wrote - Laura Marling. /

"El cortó mi lengua, no hay nada que decir, ámame caballero, él se río de mis pecados

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"El cortó mi lengua, no hay nada que decir, ámame caballero, él se río de mis pecados... A su lado debo quedarme".

Su mente incapaz de procesar los sucesos anteriores, repitiendo la misma escena, una y otra vez, como un vicio consecutivo, ignorando el ardor recíproco de su espalda, contando los segundos para el próximo latigazo y luego la sangre bajaba pintando el lienzo blanquecino de su piel, como un río que se llevaba sus pecados dejándolos cerca de la corriente, con su cuerpo inerte salpicado de quemaduras sin atender, y cortes superficiales que eran apretados para sacar aquel pinta rojo y terminar su obra artística con finos detalles carmesí.

La suave sutileza del dolor lo invadía con ráfagas violentas de una toxina adictiva que le penetraba el alma y lo ahogaba en mares de ofuscación, perdiéndose entre las tiras de cuero que servían con la única función de abrir su piel y provocar aflicción, con la garganta demasiado adolorida para gritar por un poco de clemencia y las lágrimas que creía abandonadas, bajaban por sus mejillas cual tormenta desatada en un vaso de agua, con la culpa que cernía su mente y desgarraba la ligera cordura que aún conservaba, los muros que había tardado años en construir fueron derribados tras simples toques insolentes cargados de una lujuria desatada en frenesí, mientras que las manos ajenas seguían su travesía, recorriendo vagamente su cuerpo maltratado. Susurrando palabras obscenas, elogiando lo bien que era en el sexo, que no era más que una simple puta a la merced de ellos, sus amos y por un momento lo llegó a creer...

Con un sollozo callado a través de un beso melancólico y vacío, con la vacilación de sus acciones y la poca fuerza que tenía era ocupada para mantenerse de pie en un tiempo limitado, las cadenas fueron jaladas con brusquedad, cayendo a bruces en el frío concretó, con la mirada perdida en algún punto de la habitación, sin acatar la orden de levantarse y es que sus brazos temblorosos apenas servían como soporte, tras eso el sonido de una bomba estallar no se hizo de esperar, provocando una nueva quemadura de segundo grado y el grito no fue más que un simple gemido lamentable, sus hebras plateadas ahora sucias eran agarradas con ira, obligándolo a soltar un jadeo; al separar los labios el sabor amargo y salado no tardo en gobernar toda su boca, asfixiandose y tratando de pelear por volver a respirar, pero al hacerlo un simple golpe le recordó quién tenía el poder, él no, por lo cual se limitó a llorar en silencio con la necesidad de un deseo ambiguo, pues la muerte ahora sonaba bastante tentiva.

Sus ojos cansados de la misma imágen, su mandíbula dolida por la rudeza de los movimientos contra su garganta, se estaba muriendo lentamente y no podía hacer nada más que suplicar estúpidamente por algo de piedad, todos los lamentos ignorados e incluso sus secuestradores se satisfacían contra su vulnerabilidad y dolor, ese dolor que lo consumía como un fuego errático, que lo carcomía desde adentro hasta acabar con la última pizca de esperanza, tan ruil el sentimiento que lo aniquilaba por completo.

Lloriqueo inútilmente tras la bofetada en su mejilla izquierda, cada parte de él estaba destrozada y su dignidad pisoteada, la necedad ahora convertida en una sumisión inevitable y el poco espíritu valiente que le quedaba estaba resguardado con la finalidad de arrojarse contra el enmascarado, arrastrado por el cálido averno que le daba la bienvenida a un sufrimiento sempiterno. Un azote repentino le hizo volver a la realidad, viendo aquella sonrisa burlesca que le recordaba cada segundo el querer morir, mientras que su prisión clandestina era abarcada por pensamientos ilustrativos de sus anteriores abusos. Todo se torno confuso, sus párpados caídos a causa del faltante descanso y el grito lejano convertido en una exclamación furibunda.

Todo guardo silencio y se concentró en el negro que nublaba su vista...

Abrió los ojos tras el impacto del recuerdo y vio a Konan con la mirada fija en él, reflejando lástima, desvío la mirada de los iris anaranjados y luego todo cayó en un balde de agua fría, rápidamente trató de pararse más sin embargo su cuerpo ter...

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Abrió los ojos tras el impacto del recuerdo y vio a Konan con la mirada fija en él, reflejando lástima, desvío la mirada de los iris anaranjados y luego todo cayó en un balde de agua fría, rápidamente trató de pararse más sin embargo su cuerpo terminó en un impacto desapacible, konan llegó preocupada a su lado y lo ayudó a levantarse nuevamente hasta llegar a la camilla.

-Shhh... Tranquilo, tienes contusiones por todo el cuerpo, lo mejor es permanecer en reposo, hablaré con-...

-¡No!, por favor, por favor... - su respiración agitada a causa del miedo repentino, sus ojos cristalizados por las gotas saladas que amenazaban con salir en cualquier momento. - No lo hagas, yo... Cometí un error, me desmaye, pero no volverá a pasar, ¡lo prometo!, por favor, no me castiguen, ya no... Te lo suplico... - estaba teniendo un ataque de pánico, las ganas de vomitar lo invadieron y múltiples pensamientos irrumpieron su mente a una velocidad como la luz.

-Kakashi... - se tensó, comenzó a rasguñar su piel con desesperación, el dolor de cabeza se hizo más fuerte y el sudor bajaba en una fina línea de agua, las lágrimas descendieron con desesperación y el dolor del pecho lo entumeció, las ganas de vomitar sólo se hicieron más potentes, hasta que sintió la calidez embriagar su cuerpo, acompañado de débiles susurros "todo estará bien" prometió aquella melodiosa voz, exhalo con dificultad y pronto su cuerpo se relajo, tardo varios minutos pero por fin consiguió algo de calma, luego el cansancio lo golpeó con frialdad. - Duerme, te cuidaré...- y por primera vez, tuvo la ligera esperanza de que podría soportar un poco más... Sin poder evitarlo, su mente se desconecto de la realidad, cayendo ante la ensoñación que lo invadía.

🌺Los amo, espero que les haya gustado el capítulo, ya saben que si gustan apoyarme denme una estrellita y recomienden está inusual historia, sin nada más que decir, nos leemos pronto ;)

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🌺Los amo, espero que les haya gustado el capítulo, ya saben que si gustan apoyarme denme una estrellita y recomienden está inusual historia, sin nada más que decir, nos leemos pronto ;).

Eres nuestro y nosotros tuyos...(Akatsuki x Kakashi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora