LO HE VISTO, LO HE VIVIDO

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Hoy nuevamente vuelvo a visitar a mi familia. Muy feliz y alegre después de trabajar veinte y cuatro horas, ¡Quisiera descansar!, ¡sí! Pero respirar hondo, inhalar y exhalar este aire diferente a lo que hay en la ciudad. Es realmente hermoso.

Papá como siempre pendiente de que todo esté marchando  bien.
Con esa sonrisa en sus labios, alegre de ver sano y salvo  a su hijo.
Mamá pregunta como he estado.
Mis hermanos dicen que sí no llamo; ella se pone muy ansiosa.
Cuando nos vemos siempre hace  preguntas de todo y en todo; en sus ojos sigue aquel niño pequeño tímido y lloroso de hace unos años atras, que no acepta creer que ya los años de la infancia pasaron tan rápido.
Para mamá siempre seremos niños aunque el tiempo se marche y nos empiece a dejar huellas y cicatrices.

_Después de saludarnos comenzamos hablar de todo lo que nos a sucedido.
Poco después decido acostarme un momento; para reducir el sueño y el cansancio que llevo, mientras descanso decido tomar papel, lapiz y escribir:
Los veo siempre, familia unida luchando y tratando de sobresalir, padres y hermanos, pude ver mi unica hermana; trayendo en el brazo derecho una bolsa con libros y cuadernos. Tantas tareas acumuladas, mientras trabaja de sol a sol para poder sufragar los gastos del colegio
Yo sé que las ganas de llegar a un día mejor, esta siempre presente en la mente de todos. Pero la economía no deja dar pasos largos. Pero en medio de la escases; los veo felices y alegres y eso, eso realmente me alegra, me alegra tanto.

Puedo escuchar desde aquí, risas y carcajadas, bromas y chistes en un ambiente agradable; todos felices y alegres. Hay momentos de tomar decisiones serias y se puede oír una conversación formal.
_En mi mente todavía se escucha el eco de las risas Me imagino el rostro de mamá.
Pero se hizo un silencio, pues hay mucha necesidad y hay que hablar seriamente, ahora todos aportan ideas  sobre que hacer.
Todos bajo techo buscando momento oportuno para dar un salto y sobresalir, todos los días buscamos eso, todos los días.

He vivido ya casi veinte y cinco años, yo el segundo de siete hermanos. Todos como siempre con mentes muy positivas, siempre luchando por nuestros sueños y metas pero todo el proceso es lento. Después de todo, la familia es débil y joven todavía; pues la mayoría de mis hermanos son niños.

He visto tantas luchas, éxitos y fracasos en la familia. He visto a mamá llorar y reír, enfermarse y volver a vivir.
Puedo decir que la familia es muy unida pues de todo ha sabido como volver a sobresalir. Me alegra al pensar en eso, me alegra mucho, mamá siempre quiso y sé que siempre querrá vivir una vida más tranquila y más  cómoda.
Eso era y es su intención, ahora ya está muy grande los años se volvieron en su contra, ya no tiene la misma fuerza de antes, luchó mucho y nos sacó adelante. Admiro su gran fortaleza.

Una sola fuerza, no es suficiente. Tenemos que ser todos o no avanzamos.
Las veces que tenemos la oportunidad  la volvemos a perder.
¡No puede ser que eso pase!
Yo quiero decirles que no se desesperen que hay mejores cosas allá al frente y si nos rendimos ahora no veremos lo bueno y hermoso que Dios tiene preparado para nosotros. Espiritualmente aquí en la tierra como allá en el cielo.

Que nuestro enfoque no sea solo material; pues bien dice la Biblia que allá en el cielo habrá mejor vida.
Doy gracias a Dios por haberme permitido nacer en una familia cristiana, por eso quiero decirles:
Busquemos  de Dios siempre, miro a mis hermanos estar en los trabajos de la iglesia, hacen bien. Y el bien es para cada uno según sea la intención que tenemos.
No lo hagan para tener fama, háganlo para ganar su Alma y poner y dejar el corazón en las manos de Dios. Que nunca pierdan la humildad se los pido.

Mamá no llores ya vivió tanto tiempo en tristezas y llantos, este es tu tiempo  de sonreír y reír, hoy solo observa ya no te preocupes mucho, pues los años solo quisieron enfermarte pero ya se han marchado, ahora solo sonríe, mira al cielo y agradece a Dios por todo lo bueno que has podido ver y vivir. Tus hijos están bien, ya crecieron; ya no son niños. Pero el amor que tienes hacia nosotros te hace vernos pequeños como siempre.

Papá, he visto lo fuerte que eres, al contrario de mamá es que jamás te vi llorar, y ahora yo soy el que lloro, porque no puedo ser fuerte  como tu, quizás no es la fuerza es el sentimiento.
Te admiro papa, te quiero tanto como para querer verte siempre y que nunca envejezcas. No quiero, por favor no.
Eres de admirar, nos guiastes en los caminos de Dios, desde pequeños lo recuerdo perfectamente. Te lo agradezco tanto  mi papá hermoso.

Mis hermanos, todos somos niños ignorantes  de tantas  cosas, pero como por ahí dicen que el dinero no  compra la sabiduría, tenemos opciones  y oportunidades de encontrarlo, seamos sabios al tomar decisiones. No nos olvidemos, vamos creciendo y oremos por un buen futuro, no se rindan en el camino, siempre con una mentalidad positiva, no dejemos que las personas nos limiten.
Yo voy a pedir tanto a  Dios que el nos tenga en sus manos de amor y protección cada día.
Los quiero mucho, no se olviden de mí en sus oraciones.
                                                    By Alex SP

*El Baúl Del Recuerdo*(Editando...)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora