Kacchan, el típico Badboy de la escuela tiene muchas pretendientes pero que el ni las llega a voltear a ver. Solo tiene ojos para una persona que posiblemente ya tiene dueño.
Sus amigos al verlo solo y triste, lo registran a una página de internet d...
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ADVERTENCIA NUEVAMENTE PUESTA EN 2023 <3 ____________________________________
Eran aproximadamente las 11:30 de la noche. La cara de la chica era iluminada por los postes que estaban al rededor de la calle. Tenía un chaleco de manga larga color café, unos lentes negros al igual que su pantalón y zapatos. Nadie podía reconocerla, y más si se iba a ver con cierta persona. Si alguien los llegase a descubrir todo se iría al caño. Debían ser lo más discretos posibles.
Aún que el chico no lo fuera para nada.
El estaba recargado en la pared que estaba atrás de ella.
Con una peluca "muy poca llamativa",un sombrero color rojo, un bigote que desde lejos podías notar que era falso,unos lentes sin mica, un suéter,pantalón y zapatos con algo de tacón color azules. Era lo mas despampanante de esa calle.
Se acercó sigilosamente a Uraraka, y "sigilosamente" me refiero a que se acercó y se calló por culpa de sus zapatos que le robó de su mamá.
Ochako se golpeó la cara de una palmada ya que no sabría que la idiotez del chico podría ser tan alta.
Denki rápidamente se paro y se acercó a la dama otra vez con un moretón en la cara por culpa de su poca experiencia de los calzados altos. Al estar cerca a ella le susurró que caminaran a cierto café que está abierto las 24 hrs.
La fémina rodó los ojos al 2 acto tonto que hizo el varón.
¿Tan difícil era decirle en que lugar se iban a ver por mensaje y evitaran tanto drama?
[...]
No podía creer que tuvo que recurrir a esta persona, no tenía opción, no conocía a otra persona que tuviera la misma pasión sobre el amor.
Y más cuando se trataba de una pareja gay.
- Entonces, ¿Para qué querías verme? .- tomó un trago de su café y miraba con atención a su posible cómplice.
- Oh, pues, es difícil de decirlo...- La chica se rascó la mejilla avergonzada.
- Oh vamos, tranquila, cuentas conmigo .- sonrió.
- Pues necesito ayuda de...- lo dijo en voz baja dándole a entender al otro que tendría que acercarse hacia a ella para que pudiese a completar el llamado de auxilio.
Y así lo hizo, se acercó y la joven le susurró algo en su oído que hizo que su sexto sentido apareciera.
"Necesito la ayuda de cupido"
El chico sonrió como el gato de Alicia en el país de maravillas. Pasó su mano en su cabello falso haciéndolo que se aplastara a la mitad. Realmente se veía ridículo.
