El Chico De Internet

Azael

Azael, no dice nada en todo el trayecto a mi casa, de hecho nadie dice nada y eso me pone bastante nerviosa, supongo que luego tendré que hablar con Hope acerca de lo que pasó que obviamente todos presenciaron.
Doblamos la esquina y veo la fachada de mi casa, no sé que decir, solo miro mis dedos mientras los muevo.
- Bueno fue un bonito día después de todo - escucho decir a Alessandro con una pizca de sarcasmo y eso me llega a molestar, en las últimas semanas, ellos dos se volvieron muy buenos amigos, seguro está molesto conmigo por lo evidente, veo a Hope pegarle la nuca - Auch ¿Qué? - se queja frotandose la cabeza, yo bufo, llegamos a mi casa y salgo hecha una furia del auto, no tengo idea de porque estoy tan molesta. Me pongo la capucha y camino directo a mi casa, sin despedirme, veo por el rabillo del ojo que también habia llegado Dylan en su auto, sale del auto y camina en mi dirección.
- Llegaste - afirma - ¿Cómo les fue? - pregunta a todos, supongo que ellos salieron o no sé, tampoco quiero darme la vuelta - Hey - me para agarrandome el brazo - ¿Qué pasa? - pregunta confundido, yo quito mi brazo con fuerza, lo último que quiero es hablar con el.
- ¡Dejame en paz Dylan! - grito y corro a la casa.
- ¡Ali! - grita el, luego al entrar, cierro casi por completo, pero escucho a Dylan preguntar - ¿Qué ocurrió?
- Nada - responde sin ganas Azael.
- ¿Nada? - bufa Alessandro
- Callate - advierte Hope
- No, yo nunca me callo las cosas - dice molesto
- ¿Qué está ocurriendo? - pregunta Dylan
- Sabes... - parece que alguien quisiera evitar que el diga algo - ¡Hope ya dejame! - exclama
- ¡Alessandro callate! - ordena Hope.
- Tu hermanita se beso con un tipo hace rato y creo que es bastante obvio de las intenciones y sentimientos de Azael, creo que no hay mejor chico con el cual pueda estar ella y va... y va se besa enfrente de el - dice bastante molesto
- ¿Qué? - pregunta incredulo Dylan - ¿Cómo era el?
- Alto de cabello castaño - confirma y tengo bastantes ganas de ir y matarlo, cómo puede ser que haya hecho todo eso.
- Debe ser una broma - dice Dylan y presiento que ya debe estar molesto
- Por supuesto que no... - continua Alessandro
- ¡Es suficiente! - exclama Azael - Ella puede hacer lo que mejor le parezca - escucho silencio por unos segundos hasta que Faith grita
- ¡Azael! ¡No te vayas!
Voy corriendo a mi habitación cuando veo que Dylan esta por entrar.
- ¡Ali! - grita persiguiendome, cuando estoy apunto de cerrar la habitación, el pone su pie, no sé como fue tan rápido.
- Vete - advierto
- No, me vas a escuchar - amenaza abriendo la puerta, porque no tengo la suficiente fuerza para ganarle
- Dylan - me quejo
- ¿Por qué Ali?
- Eso no te importa - le digo agarrando una almohada y me siento en la cama, molesta.
- Si me importa porque él te hará daño y bueno ya veras tu - suspira decepcionado - pero ya no quiero verte sufrir
- No me hará más daño - digo mirando al suelo
- Sabes que eso es mentira - dice y tiene razón.
- Solo espero que hagas las cosas bien y no cometas los mismos errores que yo - cuando dice eso, alzo la vista, luce triste, por cuántas cosas habrá pasado el para que me diga eso...
- Lo haré lo mejor que pueda para no salir lastimada - prometo y voy a darle un abrazo y el me abraza con fuerza.
- Está bien, solo espero que elijas bien y no te arrepientas luego... Se nota que le importas a ese chico - y asiento.
- No quiero hacerle daño, pero mi corazón sigue eligiendo a Darvel - confieso.
- ¡Dylan! - grita mamá del piso de abajo
- Entiendo, solo ten cuidado - dice con una sonrisa triste y se va dejándome sola.

No sé que estoy haciendo, no sé si me arrepentiré. Solo sé que mi corazón lo eligió desde hace mucho tiempo, incluso antes que me diera cuenta.

Darvel seguía algo molesto por lo que había pasado, me llamo por WhatsApp en la noche y nos quedamos hablando toda la noche.
~ No piensas colgar ¿no? - pregunto abostezando y escucho su risa
~ Que, ¿ya te aburriste de mi? - pregunta en un tono juguetón
~ Eres tonto ¿no?
~ Pero ya me quieres colgar, si es tempra... - hace una pausa - ¡Mierda! ¡Son las cinco de la mañana! - exclama, yo también me fijo y efectivamente son las 5 de la mañana
~ Ves porque quiero colgar - digo burlandome
~ ¿Cómo es que contigo pasa el tiempo tan rápido? - susurra y no sé que responder a eso, se pasaron las horas, hablando de muchas cosas, como nos fue en el día y hablando de música, tenemos gustos bastante parecidos, o sea conocemos bastantes cantantes que no siempre ambos conocemos pero con el tipo de música es bastante similar a lo que nos gusta, también nos desagrada varías cosas. El termina colgando y yo me apresuro a taparme y querer conciliar el sueño las pocas horas que podré dormir.