Capítulo 2

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El Fantasma Del Presente

Seguía sin poder dormir, prendió la pantalla de su celular para saber la hora, faltaba poco para la media noche. Miro de nuevo la ventana, la luna llena todavía no se iba.

Los recuerdos que le había mostrado el fantasma del pasado le habían hecho daño, le hicieron pensar en el error que había cometido al alejarse de ellos. De seguro están resentidos, están tristes o tal vez...

- Molestos - dijo en susurro.

- ¿Molestos?

Un relámpago azul cegó a la mujer que estaba en la cama apareciendo frente a esta. Cuando Webby sintió que había disminuido la intensidad de la luz, abrió los ojos lentamente, haciendo que se acostumbran a la luz y pudiera ver quien era el siguiente fantasma.

- ¿Quién estaría molestó contigo? - dijo el adulto que ahora estaba sentado sobre las sábanas de Webby.

Le intento mirar de pies a cabeza, era Dewey, el que se suponía que debía de estar al otro lado del mundo, empacando sus cosas.

- ¿Dewey? ¿Qué haces aquí? Llegaron antes ¿Vienen los otros dos contigo? - le pregunto algo nerviosa al ver como fruncía su ceño y cruzaba los brazos.

- ¿No acabas de ver el espectáculo de luces en tu habitación?

Webby, nerviosa comenzó a mover las manos de forma torpe. Su mirada se desvió a sus sábanas y después a su mejor amigo. Inhaló y exhaló para tranquilizarse, bajo las manos a sus lados y decidió levantarse de la cama.

- Entonces quiero pensar que eres el segundo fantasma - le sonrió algo tranquila.

- Exacto, soy el fantasma del presente y la misión que yo tengo, es la de enseñarte lo que está pasando ahora - dijo mientras iba hacia la puerta del cuarto

Webby se le acercó y al estar juntos miraron la puerta, al estar de espaldas se podía ver que el chico era más grande que ella en tamaño.

Dewey toco el picaporte de la puerta y la giró algo brusco. En un parpadeo estaban volando por todo Patolandia. (Aclaración: Son humanos, pero no sé me ocurrió otro nombre)

- ¿A dónde iremos? - preguntó Webby.

- Con tu buen amigo jefe - rió con demasiado sarcasmo.

- ¿Qué tienen en contra de él? - dijo con gracia.

- Te quito el mejor empleo del mundo mundial.

- ¿Cuál es ese?

- Trabajar con nosotros.

Los ojos de ella rodaron hacia arriba. Pero, era lindo que se preocupara por algo tonto.

- Como digas.

El edificio en el que ella trabajaba estaba apagado, excepto la parte inferior.

- Parece que la fiesta es abajo - hablo Dewey impulsándose más.

- ¿Y si no quiero ir ahí? - preguntó ella, frenando su impulso.

- Debes de ir, es tu obligación - la volteo a ver tranquilo.

Ella alzó una ceja confundida.

- Solo vamos - sonrió volviendo a su camino.

Las personas que se encontraban ahí eran en realidad pocas, pero estaba bien, no era una fiesta agitada. La música ayudaba mucho con el ambiente, parecía que esa fiesta era realmente un fracaso. La mirada de Webby estaba en busca de su jefe, cuando lo vio estaba en un rincón conversando con un grupo de hombres.

≈Los Tres Fantasmas De Webby≈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora