Angel de la muerte. Richar o Salazar

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Llegamos cerca de la Dra. mientras yo frenaba a Richar, ya que aunque no notase sus emociones, sus facciones se pusieron tensas y sus puños cerrados claramente delataban sus intenciones. Angel, por su parte cruzo los brazos y se le pusieron sus ojos vidriosos como los de alguien que intenta reprimir esa lagrimita, girando la cara para no continuar viendo la causa. Mientras nos acercábamos a ella, al parar cerca de ella, Angel recuperó la mirada sobre ella (y la compostura), y Richar me puso la mano en el pecho y me hizo un gesto como que ya controlaba el y no su rabia.
- En que puedo ayudarles ca.....- dijo antes de quedarse mirando fijamente a Angel. Lo que seguidamente fijo su mirada en el rostro de Richar.
Se notaba que ya sumaba 1+1.
La doctora pasó de tener los brazos entrelazados de autoridad, a estirarlos hacía la cara de Richar entre temblores de emoción.
Cuando sus dedos tocaron las mejillas de Richar, este abofeteó esas manos, apartandolas, en señal de ni en broma me toques.
- Te has echo tan mayor......- dijo la doctora con una voz que delataba su preocupación por un ser querido.
- Patricia, veo que sigues casada con la ciencia. Y que tienes suficiente financiación para no preocuparte por nada más.- le dijo seriamente Ángel a la mujer que no le había prestado casi atención, dando a entender que la conocía pero no lo suficiente, además de su indiferencia.
- Seguidme, no DEBEMOS quedarnos a la vista de las cámaras más tiempo -dijo Patricia cogiendome de la mano a mi y a Richar mientras nos explicaba:
- Me alegra mucho veros a todos, incluyendo a Lucía, o al sujeto número 1, la persona que la habite, en otras palabras......
- Doctora, quiero que me explique QUE SOY exactamente -dije sin acabarla de decir su frase, porque ella era la clave de este cuerpo del que aún no sabía el porqué haría alguien a una niña tan exageradamente fuerte.
Dichas estás palabras llegamos a lo que parecía su oficina personal, mientras esperaba a que pasásemos todos para cerrar la puerta y, acercándose a su escritorio busco bajo de el algún mecanismo. Lo que giro una estantería de libros dejando paso a una estancia oculta.
- Pasad, no tengo mucho tiempo para explicarlo todo. Así que mientras bajamos por el ascensor de servicio os pongo un poco al día.
Término la frase mientras nos hacía señas de que nos diéramos prisa. Pasamos a lo que parecía un montacargas. Algo un poco improvisado pero estable, no parecía echo con la misma financiación que el resto de lo que habíamos visto hasta ahora. Tan simplón que solo tenía 2 botones. Uno hacia arriba y otro hacia abajo, el cual fue el que presionó la Doctora Patricia.
Una vez dentro continuó con la explicación:
- Veo que Ángel sigue siendo adicto a la adrenalina, y que mi hijo sigue estando en peligro. No pasa ni un solo día que no piense en tí, hijo mío -dijo Patricia, no se si me ignoraba o si quería excusarse con su re-encontrada familia.
Me miró y continuó:
- Al final Salazar ha podido salvar a Lucía. Por fin nuestros sueños se hacen realidad....
- Creo que te confundes, mamá. Ni piensas en mí ni está de aquí es Lucía. - replicó Richar después de alterarse por llamarme Lucía.
- Lo que Salazar haya echo con el cuerpo de la sujeto número 1 lo desconozco, ya que Originalmente era un cuerpo de reemplazo para el de su hija, pero con cualidades mejoradas para evitar tanto envejecer como para enseñar a nuestros acreedores del ejército el progreso del experimento "Armagedòn". Era consciente de que la salud de Lucía estaba en grave peligro y no se si se llegó a enviar a tiempo antes de su fallecimiento, pero teníamos que preparar el sujeto número 1 con la mayor presteza posible, para yo poder preparar tu "regalo". Pero lo que SI tengo claro era que yo mis intereses los priorizaba sobre los de Salazar. Por eso...- y antes de finalizar la frase se abrió el montacargas dando luz a una habitación con un ordenador conectado a una incubadora donde dentro de ella se encontraba un niño, uno que cuanto más me acercaba más se me asemejaba a Richar, pero más joven, como de la edad del cuerpo de Lucía, o misma edad que el mío ahora mismo. Tenía el mismo pelo blanco que tenía yo antes de tintármelo. La complexion del joven Richar era como más fibrado.
- ....Aquí esperaba tu regreso, para poderte dar lo que realmente quiere una madre para su hijo. -dijo Patricia, después de que la pausa dramática de la apertura del elevador le permitiera proseguir con la explicación.
- Que coj*#€s me estás diciendo? Esperas que me crea que, después de todo lo que experimentaste con nuestro hijo, fuiste capaz de crear un clon suyo para hacerle............. Un hermano? -solto Ángel con horror después de encontrar semejante panorama. Un panorama que obviamente no pintaba nada bien.
- No es ningún clon. Son sujetos mejorados genéticamente, cada uno recibe una base. En el caso de número 1 los genes de Lucía. En el caso de número 2 los genes de Richar.
El sujeto número 3 está destinado para uso militar. Así que número 3 es secreto, porque Salazar no quería que conociéramos más de 2 sujetos mejorados, por si no funcionase bien la transferencia de cuerpos. Obviamente no le hice caso. Me unì a el por qué compartíamos un sueño. El de ver a nuestros hijos sanos de nuevo. Como era una inversión muy costosa, captamos la inversión del ejército, que nos brindaba lo que necesitábamos.
Richar se acercó a su madre y le dijo:
- Esperas que, tras tantos años sin querer hacer de madre, acepté a este "ser" como hermano? -dijo Richar a su madre, golpeando su pecho expresando furia.
- Hermano? Cariño, es "Un recipiente" sano para que tengas una vida sin ningún tipo de peligro. Un cuerpo del que no me tenga que preocupar de lo que te llegue a pasar, ya que es prácticamente lo más cercano que hay a la perfección. Es mi "regalo" para tí.
Patricia nos dejó caer la bomba para proseguir:
- Hijo mio, mi prioridad siempre has sido tú, incluso después de que te dejara en manos de tu padre, ya que siempre te he visto tan débil e indefenso. Así que de la única manera que podía solucionarlo era con lo que mejor se me da, la ciencia.

Me convertí en LoliDonde viven las historias. Descúbrelo ahora