Último suspiro

capítulo 1

Un par de piernas enredadas entre mis piernas y un brazo rodeando mi cintura, no me explico porque estoy en ropa interior y lo peor aún es que no sé quién es la persona que está a mi lado, pero por su piel suave, su manera de dormir y ese olor tan familiar, luego imagine quien era (Fernanda mi prima)

Escuche como cerraron la puerta, de un portazo,me levante como resorte, tirando las sabanas que nos cubrían.

Me puse pijama lo más rápido que pude para ir a ver quién era, pero no lx alcance, ya se había marchado.

Regresé a mi habitación, abrí la puerta con cuidado para no despertar a Fer, pero ella tampoco estaba, volví a la cama, me puse los audífonos y puse mi canción favorita a todo volumen.

Justo cuando empezaba a quedarme dormida sentí como si una ballena callera sobre mí, pero no, tan solo era Fer sobre mí.

-Me aplastas- le dije

-Fer: ¡feliz cumpleaños, idiota!- dijo aun arriba de mí.

- yo: ¡Gracias!

-Fer: te amo, chiquita

-¡Gracias!- dije seguido una sonrisa sin enseñar los dientes.

-Fer: deja de decir gracias y dime !te amo!

- lo diré cuando bajes- sin decirle dos veces se bajó.

-Fer: listo, ahora dime.

-yo: no jaja

Salí corriendo hacia el jardín, ella me seguía como loca, me detuve porque estaba acorralada entre una loca despiadada apunto de asesinarme y un lagarto.

-Fer: no tienes a donde ir- dijo con una risa macabrona y cada vez más cerca.

- chicas, vengan a desayunar- grito mamá desde la cocina

-Fer: salvada por la campana

-Yo: suertuda es mi segundo nombre 

-fer: no te vas a escapar tan pronto.-Nos dirigimos a la cocina casi tomadas de la mano, a pesar de que hace un momento casi me agarraba de las greñas

-Mamá: Michelle, alguien te dejo un regalo sobre la mesa

-Yo: ¿¡alguien!?

-Mamá: sí, deberías abrirlo.

Fui a buscarlo, Fer fue tras de mí , tal vez es una sorpresa de mamá por eso tanto misterio, pensé

Era bastante grande, lo cual estaba muy emocionada pues nunca había recibido un regalo tan grande

-Fer: ¿¡no lo piensas abrir!?

-Yo: estoy esperando a que te vayas- me atasco un chingazo en el bíceps sin pensarlo e inmediatamente se fue- aush- exprese

*un par de horas más tarde*

Fui a buscar a Fer. No me gusta estar peleada con ella o no sé si estamos peleadas, pero no me gusta sentirme así.

-Yo: oye, ya, tan solo fue una broma- dije dirigiéndome a Fer

-Fer: si claro - dijo en tono irónico- siempre que hago una me dices que odias las bromas

-Yo: ¿me perdonas? 

-Fer: sabíaque no podías vivir sin mí- me tomo de la mano y me llevo directo a mi habitación.

-Yo: pufs

-Fer: mejor no digas nada que todavía sigo enojada contigo y vas arruinar la sorpresa. - cerró la puerta con seguro después de entrar a la habitación