Quedate Conmigo

Capitulo 2

Amanecí de golpe con un leve dolor en la nariz, había olvidado que Xen Jun se había quedado a dormir y también había olvidado lo molesto que era.

—Auch!!!—exclame con dolor y sobándome la nariz.

—Lilith, el niño!!!—reclamó con urgencia

—El niño? Que niño?—dije confundida.

—El niño!!— grite apenas pude saber que sucedía en mi entorno.

Bajamos rápido a la sala y podíamos ver que el niño seguía durmiendo, lo dejamos descansar y fuimos a la cocina, recordamos que había una carta con el junto a papeles médicos, Xen agarro la carta acomodada encima del buró de la cocina y empezó a leerla.

"Probablemente cuando lea esta carta yo ya no siga aquí.
Le ruego por favor que cuide lo mejor posible a Mathias, es un lindo niño muy inteligente para su edad, le impresionaría de verdad su inteligencia. Probablemente se este preguntando que sucedió conmigo (o tal vez no) le explico, tengo cáncer y no cuento con el dinero suficiente para tratarme y para cuidar a Mathias, de hecho ni siquiera tenía un techo para vivir, cada día  que pasaba me sentía mas y mas débil, a tal grado de no poder caminar más.
Mathias realmente me ayudo demasiado sin saber lo que ocurría, tuve que alejarlo cuando tenía el presentimiento de que iba a morir.
Espero que Dios me perdone y a usted le ruego que le de una buena vida, es mi salvación."

—Dios!—dije cubriéndome la boca—. Esto es horrible, no me imagino por lo que tuvieron que pasar.

Escuchamos pequeños jadeos, cuando volteamos al sillón una pequeña cabecita se asomaba intentando saber que ocurría.
No sabíamos que hacer, el niño empezó a llamar a su madre y con el corazón destrozado nos acercamos viéndonos lo mas amistosos posible.

—Hola pequeño! Como estas?—dijo Xen en un tono dulce.

—Donde esta mi mami?—dijo el niño como si estuviera a punto de llorar

—Tu mami?, Oh si! Tu mami—dijo Xen fingiendo sorpresa—. Tu mami esta bien.

—¿Tienes hambre?—dije cambiando rápidamente de tema—. Ven, vamos a desayunar.

—Bueno, creo que al parecer mi buena amiga no tiene modales así que me presento, mi nombre es Xen Yun y ella es Lilith Black—dijo Xen en un tono arrogante pasando a calmado

— Bueno, vamos a desayunar no?—dije notándome incomoda

Nos sentamos en la mesa con los platos ya servidos, Xen y yo éramos los únicos que comíamos, Mathias solamente se quedaba callado mirando a la comida y de vez en cuando buscando a alguien.

—Que sucede? No tienes hambre?—le dijo Xen

—No es eso? Estoy esperando a mi mamá, seguro le encantara comer esto!—dijo Mathias emocionado—. No puedo esperar su reacción cuando venga y lo vea.

Dimos un pequeño suspiro de pesar y lastima, ¿como le decíamos a un niño de 5 años que su madre había muerto?

—Tu mamá por el momento no se encuentra, come y luego hablamos de ello—le dije tratando de sonar amigable

—¿Como se te ocurre hablarle así a un niño Lilith?—me susurro regañándome—. No le hagas caso pequeño, no le dieron amor cuando era niña.