El sábado

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En el colegio.

Juleka estaba sentada en una esquina oscura, mirando a todos con seriedad.

Rose había faltado ya que tenía dolor de oído pero éso no era lo que la tenía molesta.

Su hermano, Luka, quería ganar el corazón de Marinette desde que la conoció y ella recién ayer lo supo y sólo por que le hizo un interrogatorio con su madre.

¿Tanto se había alejado de su hermano que no se había dado cuenta de que le gustaba Marinette?

Un suspiro se oyó a su lado y vio como Adrien se recostaba en la pared y cerraba sus ojos, al parecer no dándose cuenta de que ella estaba a lado.

-No está bien, Marinette tiene derecho a ser felíz, no tengo que ponerme celoso y debo seguir el consejo de Nino de apoyarla en sus decisiones como buen... amigo.

La gótica abrió sus ojos con sorpresa al oír éso.

¿Adrien Agreste en verdad estaba celoso?

Luka le dijo algo de éso pero no le creyó.

El chico, abrió levemente sus ojos mientras se apretaba el pecho.

-Aún a costa de mi propia felicidad, aún sí no vuelvo a sonreír, aún sí es lejos de mí, quiero que Marinette sea felíz... pero me estoy volviendo un egoísta cuando se trata de ella.

Susurró mientras Juleka retrocedía, cubriendo su boca para no gritar y llamando la atención del chico que se puso pálido al verla.

Ahora sí se daba cuenta de que estaba presente.

-Ju-Juleka... ¿c-cuánto tiempo llevas aquí?- preguntó Adrien, aterrado.

La gótica, bajo sus manos y miró a los lados, nerviosa antes de ver al chico que tenía delante de ella.

-Yo... llevo aquí más tiempo que... tú.

Explicó con nervios mientras veía como Adrien sudaba de tantos nervios mientras se recostaba levemente contra la pared.

De acuerdo, éso era algo gracioso de ver.

La chica, miró en dirección de donde todos los demás.

-Em... el sábado Luka saldrá con Marinette... sí en verdad ella te interesa, no la dejes ir y lucha por ella de manera limpia.

Habló mientras su voz se iba perdiendo de a poco.

No podía creer que ella esté diciendo ése tipo de cosas.

Adrien, se paró firmemente y llevó una mano a su nuca.

Realmente, no sabía muy bien que hacer.

Sí él fuese Ladybug, ¿qué es lo que haría?

El chico, pensó en un plan y miró a su compañera de clases.

-Tengo una idea, pero necesito tu ayuda.
¿Qué dices?- preguntó mientras la gótica parpadeaba con sorpresa.

¿Qué habrá planeado?

-Em...

Balbuceo y el ojiverde sonrió alegré.

-Gracias Juleka, sabía que podía contrar contigo.
El sábado iré a buscarte a tu casa.

...

....

.....

¿Qué cosa dijo?

Fue una broma, ¿verdad?

Continuará...
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¡Hola!

Y así, oficialmente, Juleka va a tener una especie de cita con Adrien...

Quiero ver al mundo arder.

Por cierto, ¿cómo es el dolor de oído, dolor de muela o quedar ronco?
Son cosas que nunca tuve.

Espero que les haya gustado el capítulo.

Gracias por su tiempo.

Volveré...

¿Me declaras la guerra?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora