I. La balanza se inclina

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Sentada en el capó del Jeep de Stiles, observo la redonda e inmensa luna llena que hace acto de presencia en el firmamento oscuro, haciendo que las estrellas centelleantes luzcan opacas

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Sentada en el capó del Jeep de Stiles, observo la redonda e inmensa luna llena que hace acto de presencia en el firmamento oscuro, haciendo que las estrellas centelleantes luzcan opacas. El satélite tiene toda la atención, haciendo que se me dificulte apartar la vista de ella que me llena de una fuerza que va en aumento. A pesar de que ya me he acostumbrado al poder que ejerce sobre los licántropos, sigo sintiendo su magnetismo que busca sacar mi loba interior a la superficie.

Sé que no va a suceder, pero se siente como si todavía pudiera llegar a descontrolarme si simplemente me dejo ir, si permito que su resplandor invada mi sistema, tomando posesión de mi cuerpo.

—De acuerdo, he encontrado unas dos habitaciones en el distrito de Mission, pero son costosas y un par en Haight y Ashbury. También costosas. —La voz de Stiles suena distante, incluso cuando está solo a un metro de distancia, de pie a un lado del Jeep con los codos apoyados en el capó.

Scott se encuentra a mi lado, también abstraído en la luna llena, aunque le está haciendo más caso a Stiles de lo que yo hago. Están charlando sobre lugares para mudarse juntos cuando vayamos a la universidad. Los dejo tener la conversación tranquilos porque tuve la mía con Lydia hace unas semanas y quedamos en que podemos hospedarnos juntas.

—¿Qué hay sobre Berkeley? —pregunta Scott—. ¿Acaso hay muchos estudiantes viviendo ahí?

Stiles asiente.

—Sí, sí, podríamos tratar con Nob Hill, pero el Jeep se quemaría por los embragues.

Scott y yo lo miramos, confundidos porque no teníamos conocimiento previo de que Stiles estuviera incluyendo el cacharro que nos ha acompañado en muchas aventuras, pero que ya ha pasado suficiente. Desde el viaje a México a principios de año no ha sido el mismo.

—¿Vas a llevar el Jeep? —cuestiona Scott.

—Sabes el plan. Nadie se queda atrás. Ese es el plan. —Stiles suena un poco agresivo e insistente, pero lo dejamos pasar porque es su visión de vida. Creo que todos estamos ajustándonos al hecho de que Scarlett se haya ido de Beacon Hills—. Lydia y Payton no van a tener problemas en entrar a Stanford. Kira está pensando en ir a la USF. Malia, uh, va a planificar algo. El plan es perfecto.

Chasqueo la lengua, ladeando la cabeza.

—Suena un poco controlador. ¿Qué tal si queremos salir de California? —pregunto, arqueando una ceja.

Stiles hace una mueca inconforme porque lo he molestado con esto todo el verano. Se cabrea y su rostro se torna rojizo, pero es porque no quiere perdernos. En el fondo también lo entiendo. Conozco lo que es perder a las personas que quieres. Solo no quiere que el plan se arruine y nos quedemos separados por siempre.

—O podemos esperar a entrar a la universidad y después encontrar dónde vivir —sugiere Scott sonriendo.

—Tengo una visión, amigo. ¿De acuerdo? Es una visión hermosa. No arruines la visión. —Sonrío y Stile suspira ruidosamente—. De acuerdo, podemos verificar la Bahía Este. No he buscado en Oakland.

FIREPROOF ▲ TEEN WOLF   ➅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora