11 de mayo de 1992
—¿Sabes, Patrick? Si fuera gay, querría salir contigo.
—Cómo no.
Han pasado semanas desde la pelea, aunque se hayan sentido como meses. La soledad tiende a transformar nuestra percepción del tiempo de esa manera. Tuve mucho rato para pensar durante aquellos días.
Lo arruiné todo por completo, les causé problemas a todos y lastimé a más de una persona que no lo merecía; pero finalmente, me gané el perdón de Sam, de Patrick, de Mary Elizabeth, y del resto de la gente.
De no ser por haber intervenido en aquella pelea en la que casi muelen a Patrick a golpes, la verdad es que no sé si me hubieran perdonado alguna vez. Probablemente hubiera tomado mucho más tiempo, pero creo que tarde que temprano lo hubieran hecho.
En cualquier caso, después de haberme ganado una semana entera de detención, Sam me perdonó por haberla besado en aquella fiesta.
Todo volvía a la normalidad, todo excepto Patrick.
Aquella noche, justo después de que prácticamente me echaran de aquella fiesta y de que Patrick se ofreciera a llevarme en su auto de regreso, yo había dicho algunas cosas. Cosas que hasta ahora realmente no me había detenido a pensar.
¿Sabes, Patrick? Si fuera gay, querría salir contigo.
¿Qué tanto de aquellas palabras era cierto?
Por mucho tiempo, creí haber estado enamorado de Sam. Era difícil no estarlo, con aquella dulce manera suya de ser y la forma en que trataba a las demás personas aunque apenas las conociera. Sam había sido la primera persona con quien había formado amistad en la escuela, y aquello era algo que incluso con el paso de los años me sería difícil de olvidar. Pero ¿Amor? Definitivamente aquella era una palabra demasiado fuerte para describirlo. Ahora puedo saber con certeza que lo que sentía por ella era un mero simplemente un fuerte afecto.
Por otro lado, llevaba un rato cuestionandome mis sentimientos por Patrick. Suelen decir que los niños y los borrachos siempre dicen la verdad. Y puede ser que alguna parte de mi inconsciente hubiese descubierto esa verdad mucho antes que yo mismo.
Hace ya algún tiempo que Patrick terminó con su novio. Yo no me enteré de ello hasta hace algunos días. Pero a juzgar por lo que ví aquel día en que lo tuve que rescatar de esa pelea contra Brad y sus amigos, fue una ruptura bastante fuerte.
Desde entonces Patrick ha tratado de fingir que le importa una mierda, y que todo está perfectamente bien. Pero no lo está, y de eso todos podemos darnos cuenta.
Este sábado llamó en la madrugada pidiéndome que me vistiera, y avisándome que pasaría por mí en quince minutos. No me dio tiempo para hacer preguntas, así que sólo le hice caso y me vestí, aún sin saber qué era lo que quería.
Al verlo pude comprobar que su estado era peor de lo que imaginaba, pero por alguna razón no me sorprendió. No se había cambiado de ropa, no parecía que hubiera dormido en lo absoluto, y según me contó estaba despierto gracias a un montón de café, cigarros y unas pastillas especiales que al parecer venden en las gasolineras.
Apenas subí a su auto pude reconocer la canción que sonaba en su casetera. Blackbird, de los Beatles, seguida de Landslide de Fleetwood Mac. Enseguida supe que era el mixtape titulado "Un invierno" que le había grabado en navidad. No pude evitar sonreír, al recibir tan evidente confirmación de que realmente le había gustado.
Cuando se lo comenté dijo:
—He estado escuchándola toda la noche.
Patrick bromeaba y sonreía, y trataba de comportarse como si se estuviera divirtiendo y en realidad no le pasara nada. Hablaba de ser libre, cuando en realidad, yo sabía lo mucho que extrañaba a Brad. Hablaba acerca de la universidad y acerca de cómo todo mejoraría cuando finalmente se largara de este agujero y pudiera conocer gente nueva, chicos nuevos. Dentro de un mes, ni siquiera recordaría su nombre.
Yo sólo traté de darle la razón en todo ¿De qué me servía expresar mis preocupaciones en voz alta?
En aquel momento, lo Patrick necesitaba era compañía y alguien que lo escuchara, no que alguien le diera consejos.
Conducimos por un buen rato sin un rumbo fijo. Patrick estaba como en su mundo y probablemente ya llevaba algo de droga en su sistema, tenía los ojos vidriosos y no paraba de reírse de todo.
¿Qué tan mal se sentiría realmente?
Yo nunca había experimentado una ruptura tan desastrosa (Mary Elizabeth no contaba) pero de sólo verlo, se podía saber que estaba destrozado.
Y lo que más me dolía era estar a su lado mientras él se dañaba a sí mismo sin poder hacer nada para ayudarlo.
Finalmente, al ver que todos los lugares a los que podríamos haber ido se encontraban cerrados por la hora, nos paramos a un costado de la carretera casi al borde de la ciudad, y salimos para recostarnos sobre el cofre del auto, mirando hacía el horizonte mientras el cielo comenzaba a iluminarse y estaba por amanecer.
Patrick se recargó en mi hombro mientras me hablaba sobre música, acerca de una canción llamada Something In The Way de una banda de la que yo no conocía más que unas cuantas canciones, pero a él sí que parecía gustarle.
—El vocalista es algo raro, pero el grunge es lo mejor que han inventado en la última década —decía Patrick—. A veces pienso que si tu escribieras canciones tal vez fueran tan extrañas y rebuscadas como las suyas...
Juro que trataba con todas mis fuerzas ponerle atención a lo que decía Patrick, pero de un rato para acá yo tan sólo podía concentrarme en el cosquilleo que me provocaba su cabello en el cuello y la extraña sensación de calidez al sentir el calor de su cuerpo a través de la ropa por la posición en la que estábamos. Era jodidamente consciente de cada una de sus respiraciones y de cada centímetro de mi cuerpo que estaba en contacto con el suya.
"Si fuera gay, querría salir contigo."
¿Qué diablos me estaba pasando?
Me recordaba cuando me había comenzado a gustar Sam y trataba de no pensar en ella de esa manera.
Ahora me pasaba con Patrick y no estaba seguro de que fuera algo bueno o algo malo. Pero por un lado, era bueno porque ya no pensaba en Sam en absoluto.
Pero por otro lado era terriblemente malo, porque mientras que Patrick estaba pasando por un mal momento, yo en lo único que podía pensar era lo confundido que me sentía respecto a mis propios sentimientos hacia él.
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Asleep [Charlie x Patrick] EN EDICIÓN
Hayran Kurgu-¿Sabes, Patrick? Si fuera gay, querría salir contigo. Patrick se limitó a sonreír haciéndose el guapo y dijo: -Cómo no. .... Personajes de Stephen Chbosky, Las ventajas de ser invisible.