Cuando llego al aeropuerto son las 8:15 de la mañana. Una hora no muy decente para estar despierto un sábado. Aún así la gente viene y va. Familias o mejor dicho señoras corren de un lado a otro... esto es lo que sucede al inicio de vacaciones. Todo el mundo viaja lejos de casa y a mí; me toca regresar.
¡Genial!Tomando la única maleta que traje, junto con mi bolsa de mano voy directo hacia la estación de autobuses aún me quedan dos horas de viaje para llegar a mi, muy, pero muy amado hogar.
¡Aja!
No tengo ni una pizca de felicidad por volver y ya tengo el plan perfecto para zafarme de este lío, pero conociendo a mi madre hará hasta lo imposible porque me quedé estas dos semanas, así que sólo para poder negociar con ella me quedaré una, será tiempo suficiente para que ella disfruté de su aniversario.
Tomo el primer bus, que por suerte sólo lleva unas quince personas más. Sentándome en la parte de atrás ignoró al mundo a mí alrededor. Aún puedo ver a la gente bajar de los buses arrastrando a sus hijos para llegar al aeropuerto, mientras que otras se despiden de sus familiares.Ver esto me trae recuerdos del día de mi partida. Mi madre lloraba y mi hermana Alexis no se atrevía ni a mirarme, antes de tomar el bus había jurado que al irme me odiaría. Y hasta el momento de hoy no había vuelto hablar con ella. Quizá, después de todo cumplió su palabra de odiarme y no podía culparla.
Mi decisión de irme fue tan apresurada que todavía me sorprendía poder a ver comprado el boleto para ese mismo día. Lo único que podía lamentar era el hecho que mi padre nunca quiso decirme quien me había salvado esa noche. Un gracias no sería suficiente pero era lo mejor que tenía...
**
Todo se había puesto borroso y confuso. La frente me palpita y el dolor había desaparecido. Esto no pintaba bien.
Luchaba contra la fuerte necesidad de sucumbir al sueño, si lo hacia sería como marcar mi final. Aún quería luchar y llegar a casa. Disculparme con mi madre por desobedecer, y si todo salía bien, matar con mis propias manos a Joselyn. Aunque ella no tenía la culpa de lo estúpida que fui al entrar al bosque.
《Por favor, por favor... sólo una oportunidad más. 》
Intentó mover mis piernas. Nada. Intentó con los brazos. Nada.
Mi cuerpo no responde, y me alteró al oír los pasos del lobo. Porqué debe ser él, estoy en charola de oro lista para ser su aperitivo y sé que va a doler...
– ¡Maldición! – una cálida mano me toma del brazo girando mi cuerpo. – Vas a estar bien, todo va estar bien... ¡Oh Joder! No sabes cuanto lo siento. – Me aprieta contra su pecho. – Lo siento tanto... no volverá a pasar. Voy a cuidar de ti. – Rompe lo que queda de mi blusa y coloca su mano en mis costillas. Poco a poco siento el calor indurarme. Despega su mano y la lleva a mi frente. Las pulsadas desaparecen, y lentamente puedo abrir los ojos.
Enfocándolo.
Acaricia mis mejillas y besa mi nariz. – Vas estar bien. Tienes una costilla rota y te has torcido el tobillo, no los puedo reparar debo dejarte, pero volveré por ti. – besa la comisuras de mis labios. – Eso lo juró...
**
Despierto sobresaltada por el chófer. El cual se disculpa y me anuncia que hemos llegado a la estación.
Agradeciéndole tomo mis cosas del maletero y me dispongo a tomar un taxi. Sin embargo lo que sigue no me lo esperaba.Uno de los oficiales que trabaja para mi padre me recibe. Hoy mi padre será ascendido a jefe de policía por lo cual explica al matón que ha enviado a recogerme. Que genial.
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【☾ℒas fases de la luna☽】
FantasySi crees que los cuentos de terror sólo son fantasía. Tal vez deberías leer mi historia. Al igual que tu no creía en los mounstros; en esos seres de la noche que te persiguen incluso en sueños. No, no creía hasta que me encontré con uno. Sus ojos m...