La otra cara de la moneda

Capítulo VIII

Una semana después aún en su cabeza rondaba una y otra vez esa palabra "muy pronto". Qué significaba?, es lo que le quitaba el sueño así que con más dudas y decisión que antes llamó otro número en su celular..

- hola? - la voz insegura del otro lado contestó al tercer tono -

- soy Dean, me recuerdas - una sonrisa malvada se formó en su rostro -

- señor, qué se le ofrece, en qué le puedo servir? - el temblor de la voz no le paso desapercibido al rubio -

- necesito que investigues algo, un grupo llamado Dark Angels -

- muy bien señor investigaré lo más rápido que pueda -

- sí, sí, sólo haz tu trabajo - colgó la llamada dejándose caer en la cama - qué maldito aburrimiento! - se paro frustrado y se dirigió a la habitación del moreno - ya se te pasó lo raro? - pregunto sin demasiados ánimos -

- qué quieres? -

- sólo venía a buscar diversión - sonrió ladinamente -

- cuenta algo de tu vida - soltó de improviso haciendo que el rubio arqueara las cejas con confusión -

- estás loco?, entiende bien esto, Castiel, tu sólo eres Mi perra y como tal debes portarte -

- como tú digas - su tono neutral, sus ojos sin expresión y su rostro mostrando un sentimiento que el rubio conocía -

- cuantos años tienes? - realmente nunca le intereso saber ese dato de las personas, pero como siempre el moreno le daba intriga y quería saber más de él -

- 20 años - susurro con un nudo en la boca del estómago - tú? -

- 25 - fue su corta respuesta - trabajabas en algo? - el menor ladeo la cabeza y entrecerró los ojos -

- no -

- bien - dio la media vuelta y salió de ahí -
Si quieres comer, ven - grito a unos pasos de distancia de la habitación -

El menor salió 5 minutos después con la cabeza gacha..

- quieres hamburguesas? - al menor le brillaron por un momento los ojos y asintió - bien iré por ellas - se acercó le acaricio la mejilla y se fue...

El menor se limito a volver a su habitación, se encerró y camino hacia la cama - muy bien - se sentó al borde, paso bruscamente su mano de donde lo había tocado el rubio y después sonrió - un año y un mes - cerro los ojos sumergiéndose en su mente con una sonrisa nostálgica - un mes - una lagrima rodó por su mejilla y abrió los ojos mostrando una infinita tristeza en ellos aunque también un cierto brillo - solo un mes - se repitió secando un par de lágrimas más -

Escucho la puerta abrirse y seco sus lágrimas para volver a cerrar los ojos..

- Castiel, ven aquí - no quería moverse, no tenía ánimos - ¡Castiel! - que poca paciencia, pensó aún sin moverse de su lugar -¡¿CASTIEL?! - la puerta del cuarto se abrió bruscamente y lo tomaron del cuello - ¡hazme caso cuando te hablo! - se topo con una mirada enojada por parte del rubio la cual sin duda le haría temblar a muchos, pero el menor sólo sonrió -

- vamos a comer - el rubio respiro profundamente y lo dejó para después salir de ahí -

Empezaron a comer en un total silencio que fue cortado por el mayor..

- no te da miedo? - el menor alzo la mirada para verlo a los ojos -

- por qué? - siguió comiendo bajo la atenta mirada del rubio -

- tienes razón, ángel - el menor levanto la mirada llena de confusión - eres como uno, no muestras muchos sentimientos pero cuando lo haces siempre te rodea esa aura extraña, sumado a tus raras acciones, no pareces tener mucho miedo a algunas cosas pero con otras puedes ser demasiado... Adorable? - una sonrisa que parecía demasiado cálida para incluso provenir de él, apareció en sus labios - es... Bueno - diría otra palabra pero nunca ha sido de ese tipo de personas... Qué le está pasando con el menor? -

- gracias - murmuró con una tímida sonrisa -

- tan diferente a mi - la sonrisa tímida se borro dando paso a una sonrisa ladina y un brillo en esos bellos ojos zafiros -

- apuesto a que no siempre lo fuiste - volvió a su expresión neutral en su rostro - apuesto a que una vez fuiste bueno, una familia?, amigos?, no lo sé, pero lo tuviste y fuiste feliz - aseguró como si lo conociera - y ahora.. Simplemente no ves eso -

- las cosas no son así ángel, eres joven -

- igual tú -

- pero te falta conocer, algo de lo que sin duda yo sé más que tú así que no actúes al inteligente conmigo -

- un poco tarde - termino de comer se paro y se fue -

- de nuevo al misterio - negó entrecerrando los ojos - tengo que saber más de ti, Castiel -

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Tres días después recibió una llamada de teléfono al cual contestó un poco extrañado..

- hola -

- Dean, tengo algo que decirte -

- bien, habla de una vez -

- encontramos un cuerpo -

- y eso debería importarme? -

- se supondría que sí - el rubio bufo - es Harry, lo encontraron esta mañana en el borde de un río, su cuerpo estaba lleno de cortes y no tenía los ojos - el rubio entrecerró los ojos intrigado - tenía una nota pegada en su boca -

- qué dice la nota? -

- "una virtud que tú no tienes y que yo la he practicado mucho" -

- eso es todo? -

- así es, Dean, no había nada más -

- alguna pista de quién fue? -

- realmente no, todos los cortes tanto en el cuerpo como en los ojos fueron hechos por un profesional -

- muy bien, gracias por la información -

- de nada, Dean, cuídate - escuchaba el tono preocupado de una de las pocas personas que lo conoce y lo quiere como es -

- tú igual - colgó la llamada con una mueca de sonrisa -

- estás bien? - se extraño por la repentina pregunta del menor -

- sí y no es de tu incumbencia -

- sólo quería saber - se encogió de hombros, dio la media vuelta y camino por donde vino -

- qué tanto haces encerrado en esa habitación? -

- sólo pensar, no hay más que hacer -

- tienes razón es aburrido aquí - suspiro frustrado - vamos al lago? - el menor volteo con una sonrisa y asintió -

Contemplaron el lago sentándose en el borde, ambos se sumergieron en un agradable silencio sólo mirando la interminable agua cristalina..

- la gente sabe de este lago? -

- no, me asegure de que nadie lo conociera -

- es bonito, me gusta - esbozo una sonrisa - buen trabajo -

- vaya, no sabía que tenías buen gusto y buena percepción - su tono arrogante hizo negar despacio al menor -

- sé reconocer bien -

- no lo creo - el menor lo miro con un extraño brillo en sus ojos - si lo hicieras me obedecerías -

- tampoco es como que deba hacerlo toda la vida, deberías aprender a aceptar las cosas -

- lo hago - el menor volvió a negar con seriedad en su rostro - pero contigo es diferente -

- eso es algo bueno? - el rubio se encogió de hombros, le dio una ladina sonrisa y lo beso con pasión, obviamente buscando algo más -

- sabes, realmente me gusta el sexo cerca del lago - lo acostó con poca delicadeza, se subió encima de él y volvió atacar sus labios como todas las veces pero la diferencia de esta es que el moreno no se resistió aunque tampoco le correspondió, pero era un avance -

Tuvieron sexo y Dean puede decir que realmente ha sido diferente, Cas ya no forcejeo tanto con él, no lo consintió del todo pero como había dicho, era un avance, pero por qué se preocupaba por eso?, realmente no le interesa si Castiel se resiste o no, lo único que Dean quiere es divertirse un rato mientras no está torturando a alguien, no le importa si hay avances entre ellos, no es relevante...
El rubio se convenció de ello una y otra vez porque no iba a aceptar que a una muy pequeña parte de él en realidad sí le importaba..

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Continuará..

Hola amig@s perdón por tardar tanto en escribir en serio no tengo perdón, pero bueno hoy subiré otro capitulo a departe de este para recompensar la tardanza.. 

Gracias por leer, espero les haya gustado el capitulo...

Besos y abrazos ❤️😗