Irene.
Sentada en una silla frente la mesa bebiendo una taza de chocolate caliente me empezó a dar sueño, no tenía ganas de salir a ningún lado exactamente como me ha pasado los últimos meses, me levante, baje las cortinas, apague las luces, me asome por la ventana, la calle despejada me daba algo de nostalgia. A mi celular llego un mensaje lo tome rápidamente pero no era de ella, sino de Wendy una amiga de la universidad, me decía de pasar por mi para ir a una fiesta de su prima, le puse de pretexto que estaba cansada de los exámenes y aun tenia que arreglar algunos tramites, últimamente los pretextos se me daban bastante bien para rechazar cualquier cosa que pudiera servirme de distracción.
Me senté al borde de mi cama a pensar unos cuantos minutos, luego me recosté, era una noche fría me cubrí con una sabana pero seguía teniendo frio por lo que tome una cobija mas gruesa, y finalmente me metí entre las sabanas abrazando un oso de peluche de color café claro, que tenia puesto un suéter pequeño de color rojo, uno de los muchos peluches que me ha regalado Seul.
Cerré los ojos tratando de conciliar el sueño, pero no podía, por mi mente pasaba la idea que ella se hartaría de intentarlo mientras yo no dejaba mi orgullo de lado, pero me sentí fatal de verla en la cama con alguien más, pero tampoco es que quisiera que estuviera en esa situación conmigo ¿o sí? Sacudí mi cabeza tratando de deshacerme de esa idea. No, además yo no podría gustarle, y yo bueno… nunca he tenido algo más que una amistad con alguna chica, ella solo quiere recuperar mi amistad, si eso debe ser. Pero la extraño mucho respire profundo pero no pude evitar derramar unas cuantas lagrimas, tape mi rostro con mis manos y abrace el oso. ¿Qué estoy haciendo? ¿Por qué?
Me dormí llorando justo como me pasa algunas noches cuando no dormía con sueño y me daba por pensar más de lo que debiera. Me despertó el ruido de pasos, pero no era afuera, sino dentro del depa. Alguien logro entrar, va a robarse algo, no tengo mucho, pero si me encuentra aquí podría matarme o quien sabe que cosas más, tratando de no hacer ruido me levante de la cama y salí del cuarto, me escondí tras una pila de cajas vacías, alcance a distinguir a la distancia una sombra que entro a mi habitación debía ser él ladrón. Me moví de lugar quedando tras un improvisado librero que estaba antes de llegar a la cocina.
Busque desesperadamente algo, la escoba estaba lejos, los libros que tenia no son suficientemente pesados, no me meteré a la cocina si sale me verá. Los nervios estaban matándome, tapaba mi boca para no gritar del miedo que me daba, si me escucha va a encontrarme, me quede temblando en silencio tras ese librero cuando escuche sus pasos con rumbo a la cocina, no distinguía nada excepto su silueta, se veía delgado, quizá si le pego lo suficientemente fuerte puedo derribarlo y llamar a la policía.
Por fin vi lo que esperaba, algo adecuado, un bate de beisbol de madera, lo tome con ambas manos, pero antes de salir me tropecé tirando unas cosas de cerámica mal puestas, el ruido iba a alertarlo, escuche sus pasos acercarse, estaba de espaldas a la barra de la cocina, no lo pensé dos veces, corrí rápidamente y le pegue con el bate en la cabeza lo mas fuerte que pude, lo siguiente que escuche fue el sonido de su cuerpo chocando contra el piso al caer.
-Lo logré. -deje el bate tirado y corrí a encender las luces. -¿Quién eres?- me hinque en el suelo junto al sujeto que estaba boca abajo, le baje el gorro de la chamarra, pude darme cuenta que tenia el cabello largo y lo voltee boca arriba.
Lo siguiente que vi fue algo de lo más aterrador que he visto hasta ahora, me quede sin saber que hacer.
-¿Seul?- Comencé a llorar mientras temblaba de miedo, bajo su cabeza empezaba a formarse un pequeño charco de sangre, revise con cuidado la herida, estaba sangrando, pase mi mano debajo de su cabeza, no tenia idea de cómo detener el sangrado.
ESTÁS LEYENDO
Me llamo Seul... Seulgi • Seulrene [ADAPTACIÓN]
FanfictionMi nombre es Seulgi, tengo 21 años, estudio arquitectura. Frio... carácter frio e indolente... es lo único que escucho cuando alguien quiere hacer una descripción mía. ↬ Créditos a la autora original.