Pague el café y salí de la cafetería mirando la hora en mi reloj de muñeca. Tenía tiempo de sobra para llegar a mi reunión con Gregory. Antes pararía a sentarme en una plaza y tomar mi café tranquila. Por muy idiota que sonara no podía tomarlo mientras caminaba.
Llegue a la plaza y me senté a beberlo. Lo necesitaba. Anoche no había dormido nada por pensar en mi situación con Ethan. Odiaba pelear con mi hermano. Él era mi todo. Mi único todo desde que mamá y papá nos dejaron; y la familia vive lejos.
Siempre tratábamos de tener una muy buena relación porque somos las únicas personas a las que podemos recurrir siempre, y lo lográbamos.
No discutimos mucho y si lo hacemos siempre es por la misma razón.
Es demasiado protector y siempre me cuida de todos los peligros. Así nunca aprendería a equivocarme.
Esperaba que en algún momento alguno se tragara el orgullo y decidiera arreglar las cosas. Hay posibilidades de que suceda. Apenas paso un día de la discusión.
Deseaba que quien se tragara el orgullo fuera el, y que volviera a pedirme perdón y apoyarme un vez en algo.
Podía tener el apoyo de miles de persona pero solo necesitaba el de él.
Necesitaba saber que él estaba conmigo.
Lo extrañaba. Era como mi mejor amigo, pasábamos mucho tiempo juntos.
Una ráfaga de viento molesto mis pensamientos volando mi cabello a mi cara. Hoy lo tenía suelto con algunas ondas que las trenzas habían dejado.
Termine mi café y tire el vaso en un cesto junto a la banca donde me encontraba sentada.
Termine con esa acción y cuando quise seguir con mis pensamientos fui distraída por otra cosa.
Un auto negro que se acercaba lento llamo mi atención. La ventanilla que estaba de mi lado fue bajándose poco a poco hasta casi llegar a la mitad.
Cuando llego junto a mí no pude evitar mirar por el pequeño espacio. Solo se veían unos ojos que parecían ser marrones. No podía saberlo con claridad porque la iluminación no era muy buena.
El dueño de los ojos guiño uno de ellos y luego arranco el auto para marcharse con la velocidad normal.
No pude despegar mi vista hasta que desapareció de mi alcance.
Si tuviera un auto ahora mismo estaría siguiendo al que acaba de tener al lado.
Era muy curiosa y la curiosidad siempre ganaba apoderándose de mí.
En este caso no podía hacer más que quedarme con la intriga de saber quién es el dueño de esos ojos.
Seguramente un chistoso que quería molestar. Nadie importante.
Suspire y me levante acomodando mi bolso para volver a caminar.
Por un momento olvide que debía irme.
En todo el camino pensar en aquellos ojos me ayudo para distraerme y no pensar en mi hermano hasta llegar al departamento de policías. Lo primero que hice cuando llegue fue preguntarle al primer conocido que cruce si lo había visto y su respuesta fue negativa.
Seguí por mi camino hacia la oficina de Gregory encontrándome con conocidos y esquivando a detenidos recientes, como lo hacía cotidianamente.
No volví a preguntar por mi hermano a nadie hasta que me cruce con el último conocido antes de entrar en la oficina de Gregory.
- Erica.- salude a la compañera de mi hermano con un beso en la mejilla.
- ¿Cómo estas linda? – ella me devolvió el beso.
- Bien. ¿Viste a mi hermano? – fui rápida.
- El salió hace unas horas con Jared. Hoy les toca trabajar afuera.- sonrió amable.
- Ah. Gracias.- sonreí igual y me despedí.
Golpee mi puño contra la puerta de la oficina y esta vez tuve una respuesta rápida.
- Pasa.
Obedecí y pase encontrándome con Gregory sentado en su escritorio revisando lo que parecían ser expedientes.
- Hola.
- ____- levanto la vista hacia mí- siéntate.
Otra vez obedecí y tome haciendo frente a él. Espere unos minutos a que terminara de ojear los papeles y me hablara.
- Y ¿Cómo estás? – dejo los expedientes a un lado.
- Bien.- me limite a contestar suspirando.
Típico decir “bien” cuando la realidad es un “mal”.
- ¿Aun no arreglaron las cosas con tu hermano, no?
- No. El no cambiara de opinión.
- ¿Y tú?
- Tampoco. Quiero hacerlo.- respondí segura de mi decisión.
- Perfecto.- sonrió y giro en su silla giratoria como un niño.- porque yo también quiero que lo hagas.
- Perfecto.- sonreí igual.- ¿Qué debo hacer?
