Embarazada de un Hombre lobo #1

Capítulo 3

Pov's Charlesse

Al entrar en la clase, mis manos han empezado a sudar de una manera inhumana, mientras el director me presenta en la clase yo me fijo en como mis futuros compañeros me inspeccionan cada parte de mi... Por eso no me gustan estos tipos de presentaciones, cuando el director acaba de presentarme yo tomo la iniciativa y me pongo delante de él

-Un placer- digo sonriendo

Me acerco a la mesa de la profesora ya que tenemos que hablar sobre el temario que se han dado estos meses que yo no he estado, me da unos apuntes para que pueda repasar y me señala con la mano un sitio vacío que hay al fondo de la clase

-Puedes sentarte al lado de Lupo- me dice la profesora

Me acerco a la mesa y el chico aparta unas cosas que había en la mesa para que yo me pueda acomodar, dejo mis cosas y me siento.

-Muchas gracias- le digo mirándolo a sus ojos

-De nada, me llamo Lupo- me dice tendiéndome la mano

-Encantada Lupo, yo soy Charlesse tal y como ha dicho el director, pero me puedes llamar Charli- le digo aceptando el saludo

Empiezo a hacer apuntes sin parar, aunque noto la mirada del chico a mi lado, ¿tendré algo en el pelo o en la cara?

-Una pregunta ¿Tu vives en la calle Sant Juliano? - me dice de repente

-Si... ¿Por qué? - Le digo alzando la ceja

¿Por qué me pregunta esto? ¿Quiero decir, como sabe dónde vivo?

-Creo que somos vecinos, yo vivo en el número 35- me dice – No quiero parecer acosador, pero es que creo haberte visto esta mañana – añade nervioso

Me sale una risa entre nerviosa y tímida, aunque no quiera parecer un acosador o algo similar, la verdad que da un poco de mal rollo... Lo miro fijamente, no parece ser mala persona

-Yo vivo en el 34, vaya casualidad ¿no? – le digo

-Si bueno, ya que hay esta casualidad- me dice llamando mi atención- Podría enseñarte Roma – añade alzando una ceja

Me lo quedo mirando incrédulamente, no me puedo creer que este chico que hace un momento me parecía buena persona, sea un narcisista integral, luego me dicen que exagero cuando digo que todos los hombres son iguales, o son todos iguales o yo tengo un imán para atraer a los gilipollas.

-Me lo parece a mí, o ¿me estas pidiendo una cita? – le digo seria

- Bueno, si tú quieres considerarlo una cita... Aunque es normal, soy el chico más guapo de todo este curso- me dice con un tono de voz ligón, el muy imbécil.

-Mira, Lupo ¿no? – le digo mirándolo fijamente a los ojos- Yo he venido aquí a estudiar, no a perder el tiempo con chicos narcisistas que se creen que solo por ser atractivos todas las chicas van a caer a sus pies ¿Entendido? – añado enfadada

-E-entendido- me dice apartando la mirada

Nos pasamos lo que queda de clase sin hablar, creo que he dejado claro mi posición en todo esto, yo no quiero tener una relación con nadie ahora mismo y menos con otra persona así de narcisista... Cuando suena el timbre me voy rápida de esta clase, no me quiero cruzar con este otra vez en todo lo que queda de día y si puede ser en todo lo que queda de carrera.

Me acerco a la cafetería, me cojo el desayuno y me siento en una mesa vacía, pasan unos minutos y el lugar se empieza a llenar de gente que se sienta en grupitos para desayunar mientras hablan con sus compañeros. De golpe y sin previo aviso un chico y una chica se sientan a mi lado

-Hola me llamo Giulia Rossi- me dice la chica con una sonrisa

- Y yo Michelangelo Gregio - me dice el chico sentado a su lado

Me los quedo mirando nerviosa, y por sus caras deduzco que quieren una respuesta por mi parte

-Perdonad, pero... ¿Vais a mi clase? – pregunto

-Si y nos sentamos delante de ti y de Lupo- me dice Giulia

Ahora que me doy cuenta, si son ellos, ella tiene el pelo largo y rubio, y el chico tiene el pelo corto y moreno, al no verles la cara bien no los he sabido reconocer, pero por el pelo si que soy capaz de reconocerlos.

-Te quería pedir disculpas por lo que te ha propuesto mi amigo Lupo, a veces, que son muchas... Es un completo imbécil- me dice el chico comiéndose su manzana

-Gracias a dios, alguien que me entiende- le digo riendo

-Aunque también te tengo que decir que es muy buena persona, te lo puedo asegurar- me dice el chico

Yo le dedico una mirada de asombro a lo que él se ríe

-Soy su mejor amigo- me confiesa riéndose

Yo me pongo roja como un tomate y las dos personas que están enfrente mío se ríen a carcajadas, yo me uno a ellos hasta que veo que se acerca Lupo

-Oye Charli... ¿Podemos hablar fuera? – me dice el chico pelinegro

Me lo quedo mirando un momento, y suspiro

-Vale, pero solo un momento- le digo levantándome de la silla

Salimos fuera al patio y me doy cuenta de que hace un frio que pela y no me he sacado la chaqueta, perfecto...

-Lo siento si te he podido incomodar antes, normalmente el truquillo de la frase y la ceja me funciona con las chicas tan atractivas como tu – me dice decepcionado – Ya que siempre consigo tener una cita con ellas...- añade decepcionado

De golpe me viene una brisita de aire frio y me pongo a temblar, veo como la mirada de Lupo cambia, y en su mirada hay como indecisión sobre quererme decirme algo o no.

- ¿Sabes qué pasa? Me he encontrado con tantos chicos como tú, que ya me canso, no os aguanto de verdad- digo frotándome los brazos para entrar en calor

-¿Tienes frío?- Me dice con un cierto tono de preocupación

- No... Estoy bien gracias – le digo con una sonrisa

El se quita la chaqueta y me la pone por encima de los hombros yo me la voy a quitar, pero me coge suavemente de la mano

-Insisto, ya me la devolverás más tarde- me dice quitando su mano de la mía

Yo me sonrojo por este acto tan ¿adorable?

-Bueno... vale- le digo mirando a otro lado – Gracias, me voy, que me están esperando dentro- añado mirándolo a los ojos

Entro en la cafetería y me paso lo que queda de descanso conociendo al dúo que se me ha acercado, son muy divertidos incluso diría que se atraen entre ellos. Cuando suena el timbre nos dirigimos los tres a clase, he decidido darle una oportunidad a Lupo para ser amigos, pero me doy cuenta de que en las ultimas clases no ha venido.

Al acabar las clases me despido de mis nuevos amigos, cojo la moto y me dirijo hacia mi casa, cuando llego a casa me doy cuenta de que sigo teniendo la chaqueta de Lupo, mañana se la devolveré.

Me voy a mi habitación para cambiarme de ropa y al quitarme la chaqueta se cae un papelito del bolsillo, dudo de si leer su contenido ya que podría ser algo privado, pero me doy cuenta de que en ese papelito pone mi nombre, la sorpresa que me llevo al abrirlo.

"Llámame 687954798 un bacio Lupo"

Todo el numerito de la chaqueta era para endiñarme su maldito número de teléfono... Me tiro a la cama y me tapo la cara con la almohada

-¡TODOS SON IGUALES! – grito en la almohada

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Buenos días, tardes o noches. Tal y como puse en el aviso voy a empezar a editar esta novela, este es el tercero capítulo ya reescrito, espero que os guste <3

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