El legado de los Olímpicos

Capitulo 14: Vs Typhon parte 2

Percy (POV)

Caos por todos lados. Los vientos soplando a mi alrededor con una furia que nunca creerías, los relámpagos caen en el lugar donde esta el Padre de todos los monstruos. Fuegos de diferentes colores aparecen de la nada, así como el sonido de la espada, el látigo y las lanzas que golpean la carne, seguidos por el dolor del silbido del viento. En cuanto a mí, estaba tratando de controlar esta tormenta y usarla contra Typhon, pero sin ningún resultado. El gigante y la tormenta estaban conectado y no funcionará en su contra.

Vi a Beckendorf en su carro/tanque soltando una lluvia de balas contra Typhon, seguido por una corriente de fuego griego. Travis Stoll volaba con la velocidad de un jet disparandorayos láser de su carro, seguido por Lady Hestia, que le lanzaba bolas de fuego blancas del tamaño de mini-vans. Grover y Katie estaban invocando enredaderas para encajonar las cabezas de dragón en los brazos de Typhon, así como las serpientes alrededor de su cuerpo.

Nico estaba doblando las sombras a su voluntad para atar a Typhon también, mientras que Thalia lanzó el rayo maestro con tal fuerza que el cielo con un destello brillante seguido por un rugido de trueno que habría asustado incluso a Tifón. Mientras tanto, Clarisse y Annabeth, con sus lanzas en la mano, le apuñalaban en los ojos, seguidos por Will y Zoë, que le lanzaban flechas de oro y plata a la cara.

Y en lo que a mí respecta, lanzaba descargas de energía y apuñalaba o perforaba con la espada o el tridente desatando tsunami de vez en cuando para derribar a Typhon. Pero el gigante de la tormenta no nos facilitó esto en cuanto a la velocidad que uno no imaginaría de una criatura del tal tamaño, lanzó un golpeó hacia Grover, cuando pensé que Grover iba a esquivarlo, su carro se destrozado y cayó hacia quién sabe dónde. Eso me puso muy enojado, mucho más enojado de lo que estaba ahora, este monstruo de titán mutante  acaba de golpear a mi mejor amigo como si fuera una mosca. Sentí que mis ojos ardían de mi furia al mirar a Typhon.

"¿QUIERES UN POCO DE ESTO?" Grité.

Rugió con una fuerza que atrevía a cualquiera lo suficientemente insensato como para desafiarle y yo acepté gustosamente con un rugido propio. Agarré a Riptide con más fuerza en mi mano cuando lo cambié al modo tridente. Y con la velocidad de un meteoro, ataco a Typhon listo para destrozarlo en pedazos.

Annabeth (POV)

Vi como Percy se estrelló contra Typhon causando una explosión que hizo que una bomba nuclear palideciera en comparación. Typhon grito de una manera que hizo que un escalofrío me recorriera la espina dorsal, me sorprendió de que algo tan temible y monstruoso pudiera gritar así. Intentó golpear a Percy, pero Percy era más rápido que un jet  y estaba enviando chorros de agua para cegar al monstruo de la tormenta. Los otros y yo dejamos de pelear y no podíamos creer que solo Percy estaba venciendo a Typhon. Entonces vi la razón, vi a un hombre con barba azul luchando contra Typhon con una gran espada.

Llevaba una armadura dorada hecha de coral con dibujos de mar con zafiros, llevaba un casco con forma de corona con esmeraldas y perlas que lo adornaban. Llevaba unos pantalones de un material que parecía cuero pero, al mismo tiempo no, tenía también botas de color azul oscuro y brazaletes para las piernas. Tenía un buen bronceado y sus ojos eran de un verde intenso que parecía tener un brillo en ellos y, para terminar, su aspecto era músculoso fuertemente construidos

Y su carro era increíble, estaba hecho de corales y oro tirado por hipocampos que parecían hechos de agua y estaban tirando del carro con todas sus fuerzas. Fue entonces cuando me di cuenta de que era Percy el que estaba luchando en su forma divina.

Me sorprendió, no es de extrañar que los dioses nunca revelaran esa forma a los mortales, el mismo aire brillaba alrededor de ese tipo de presencia. Vi cómo Percy se agachó y acuchilló al Tifón, mientras el monstruo intentaba hacerlo pedazos. Miré a Thalia y a los demás para ver la misma mirada de determinación en sus rostros al igual que el mio. Oí el sonido del viento corriendo y miré para ver a Grover regresar con un carro nuevo y un pequeño bulto en la cabeza. Con un gesto de asentimiento, respiré hondo y dejé que las cadenas de mi forma humana se soltaran en un abrir y cerrar de ojos.