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○9

Al llegar a la habitación todo se veía  en total orden, la única luz del lugar era un lampara y había una cálida fragancia en el ambiente. Había una pequeña sala la cual era iluminada por la luz de la luna que entraba por las ventanas y daba directo a un enorme sofá color negro que se veía demasiado cómodo. Lo que más llamó mi atención fue la cama, las sabanas eran blancas y sobre ella habían pétalos de girasol, algo que no había visto antes.

Todo era perfecto para una noche de recién casados y eso me hacía sentir como un maldito mentiroso que era en lo que me había convertido realmente.

Kiara tomó mi mano y entró primero a la habitación, yo solo  lo seguía como si fuera un perrito asustado y ciertamente lo estaba. Era la noche de bodas, sabía lo que ocurría después o bueno, lo que debería de ocurrir.

Me sentía como un adolescente en su primera vez, en mi mente trataba de armar un  plan para evitar tener algún contacto físico con ella que terminara con mi cordura.

Kiara es una mujer hermosa pero a pesar  de estar casada conmigo, su corazón no me pertenece y el saber que estoy haciendo algo que no debería ya me tiene muy mal. 

- tranquilo cariño - escuché la voz de kiara quien me miraba con una sonrisa - parecer nervioso

- No...no lo estoy - afirmé torpemente

- Dejaste la puerta abierta - murmuro aguantando soltar una carcajada mientras apuntaba a la puerta  que estaba abierta de par en par.

Maldije en voz baja y fue a cerrar la puerta con cuidado.

- dicen que este champagne es muy bueno - mencionó mientras tomaba la botella de champagne que estaba sobre un cubo con hielo.

- Sería bueno comprobarlo ¿ no crees ? - pregunte acercándome a ella para tomar las dos copas que había frente a ella

- Me parece buena idea

- Dámela para abrirla - pedí extendiendo mi mano para tomarla pero kiara la alejo y me miró con una sonrisa traviesa.

Quito el corcho de una manera rápida y efectiva, me había cerrado la boca.

- Fácil - alardeó sirviendo un poco de aquel líquido burbujeante color amarillo en ambas copas

- Bueno, señorita " soy una experta abriendo botellas " es hora de brindar - sugerí dándole una de las copas cuando dejo de nuevo la botella en su lugar

- Yo brindo porque finalmente me casé con el hombre que amo, soy completamente feliz ahora

Asentí fingiendo una sonrisa.

" lamento esto kiara "  dije mentalmente tragándome la culpa.

Bebí el contenido de mi copa rápidamente, tenía una sensación en mi estómago de querer estar en esta habitación con ella pero al mismo tiempo no. Después de la primera copa siguieron un par más hasta que me decidí.

Me comencé a pone más nervioso cuando la mire a los ojos. Abrí mis labios con la intención de contarle toda la verdad para lograr deshacerme de este peso, para lograr estar cómodo conmigo mismo y no hacer la situación pero finalmente pasó lo que tanto tenía, kiara me beso y todo mi lado racional se fue a la mierda cómo creía que sucedería cuándo sentí su cálida mano acariciar mi cabello.

Me fue imposible no seguirle el beso, sus labios tenían un sabor adictivo que me hacía querer aún más de ella. La quería solo para mi, quería que me besara sabiendo que soy Yoongi, el chico que ha estado queriéndola en silencio mientras él idiota de Yoonsuk podía tenerla plenamente.

El beso comenzó a ser más agresivo cuando aquellos pensamientos inundaron mi cabeza sin detenerse. La tome de la cintura pegándola más a mi devorando su boca y reclamándola cómo mía. Las delicadas manos de kiara viajaron hasta mi sacó bajándolo lentamente por mis hombros soltando un suspiro que se perdió en mi boca.

Kiara comenzó a caminar sin dejar de besarme, yo sólo retrocedía sin despegarme ni un poco de ella hasta que sentí que mis pies chocaron con la cama. Un empujón por parte esa mujer fue suficiente para que terminara sentado en la cama teniéndola frente a mi con los labios rojos e hinchados, sus ojos brillaban con la expectación de lo que vendría después.

La miraba cómo si fuera un idiota observando cada movimiento que hacía, llevó sus manos a su espalda y jaló uno de los lazos que sostenían mayormente su vestido. Bajó las mangas por sus delicados brazos asiendo aún más fácil que el vestido saliera, cuando finalmente calló al piso, quedó ante la preciosa piel bronceada  de Kiara que era cubierta con una lencería que me hizo tragar saliva, se veía hermosa. Dió unos pasos hacia delante saliendo por completo del vestido. Se acercó lo suficiente para quedar entre mis piernas, me tentó ante el deseo de tocarla y coloqué mis manos en su cintura deleitándome con la calidez de su piel.

- ere hermosa - dije levantando la mirada para verla a los ojos

- Bueno, tuve que bajar un poco de peso para entrar en ese vestido y quería verme bien para ti, sobre todo para esta noche

Fruncí el ceño al saber aquello, ciertamente Kiara no era una mujer totalmente delgada,tenía mas de lo que se consideraría " adecuado " en la cultura coreana pero eso nunca me importó en lo más mínimo, para mi ella era hermosa de una manera increíble y única.

- Es increíble pero no lo vuelvas a hacer, no hagas eso si no es porque tú así lo quieres  tú ya eres perfecta Kiara

Sin esperar más juntó nuestros labios nuevamente dejándome totalmente deleitado. Me fue recostando en la cama sin soltarla haciendo que su rubio cuerpo quedara sobre el mío. La acaricie por todo el cuerpo sin alguna restricción.

Por una vez en mi vida sería egoísta y haría lo que tanto había querido hacer con la mujer que fue la novia de mi hermano.

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Maaaaaaaaa el capítulo fue más largo de lo que esperaba...

Gracias por leer my friends, espero que les haya gustado