Planes

613 41 3
                                    

Hey Arnold no me pertenece, la historia salió de mi imaginación. Aclaro, en mi historia Arnold y sus amigos tienen de 12 años en adelante

- afdfdsjedfewdop - diálogo

- ejrewijreojreirji – pensamientos

-¿Qué hacías con él? –soltó una voz entre las sombras

María observó a su primo emerger de la obscuridad en un acto muy melodramático desde su punto de vista, sin embargo, eso no la distrajo del tema que realmente deseaba tratar.

-Arnold.... ¿Se puede saber qué fue lo que te pasó? - no había molestia en su voz, sólo un poco de desconcierto mezclado con preocupación

-Responde a mi pregunta, María -exigió, ignorándola

-Ni siquiera me saludas... -si era sincera consigo misma, en parte trataba de quitarle hierro al asunto y a la vez evitarlo, no quería profundizar más en sus sentimientos

-Hola, ahora responde –pocas eran las veces que el tono de Arnold delataba que estaba  perdiendo la paciencia, y esa era una esas ocasiones

-Solo hablábamos -confesó a medias, más para ella que para él

-¿Enserio? –su expresión de incredulidad le hizo mucha gracia a la chica

-Sí, señor mal pensado -se burló con una ligera sonrisa traviesa

-Perdón, es que yo creí que... tú... bueno él....

-No te preocupes –le ahorró María subiendo las escaleras, conocedora del nerviosismo que mostraba su primo cuando cometía un error

-María... ¿A ti te gusta Peter? –la repentina pregunta hecha tan seriamente la detuvo en seco 

-No sé de donde sacaste eso-contestó dándole la espalda, retomando el camino a su recamara

-A mí no me engañas María, te conozco muy bien, incluso mejor que tú misma. A ti te gusta ese tipo aunque no te quieras darte cuenta -pensó en voz alta el rubio, para luego ir a su habitación y caer en brazos de Morfeo

A la mañana siguiente se encontraban todos en el colegio específicamente en la sala de música donde la profesora estaba dando un largo, larguísimo discurso del que solo les  ilustraré el final.

-Finalmente –todos se comenzaron a despertar entre sí después de largos minutos de aburrimiento- Peter y Helga se presentarán en el auditorio mañana, ese era el primer aviso, el segundo es que a petición del señor Simons o algo así, me permito recordarles que el baile por el 14 de febrero organizado por la señorita Rhonda y por la señorita Lila pasado mañana y por la notificación que se me dio será de disfraces

Después de dar por terminada la charla, los alumnos comenzaron a conversar, o más específicamente a presumir, sobre lo que usarían en el baile.

-Yo voy a ser Julieta –decía Phoebe emocionada y con un brillo peculiar en los ojos

-¿Por qué Julieta? –cuestionó María creyendo que quizás, la pelinegra estaba actualmente interesada en Shakespeare  

-Debido a que ALGUIEN no me dejó hacerlo, infundiéndome pánico escénico –la asiática fulminó a Helga con la mirada, quien rió incómoda captando la indirecta que parecía más una directa

-¿De que te vas a disfrazar tú, María? –intentó Helga para cambiar de tema

-Adivinen, tal vez acierten

-¿De bailarina hindú?

-No

-¿De duende?

-¡NO! –ese último se ganó una mirada asesina a la pareja que reía

CambiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora