BUSCÁNDOTE

CAPÍTULO 5

Al llegar con la doctora Olivia, me sentí extraño, sentí que algo malo pasaría.

-Hola Tyler, buenos días- dijo Olivia mientras limpiaba sus lágrimas

-Hola

-¿Cómo estás?

-Muy bien doctora, después de una larga semana sin ver a Bruno por fin hoy pude verlo

-¿Tu mamá no ha venido a verte verdad?

-No doctora, la última vez que la vi fue el 15 de mayo y hoy ya es 29 de mayo, es un largo tiempo ¿no lo cree?

-Bueno, yo creo que sé por qué no ha venido aún

-¿A si?

En ese momento entró Alice a mi habitación diciendo que ella podía explicar por qué mamá no me había visitado

-Mamá y papá pelearon el día que ella vino a verte, fue una pelea breve así que estuvieron bien el resto del día. Papá se quedó en casa por un tiempo y el sábado de la semana pasada tuvieron una pela muy fuerte. Papá la había golpeado muy fuerte y mamá se quedó de rodillas en el piso, papá se fue después de golpearla. Intenté ayudar a mamá pero ella sólo me dijo que ya estaba harta de ti y de mí, que se arrepentía de habernos traído al mundo, incluso dijo que preferiría estar muerta a tener que venir a verte todos los días. Se encerró en su cuarto y minutos después fui a su habitación para ver como estaba, solamente que lo que vi cambió mi vida por completo, me encontré a mamá colgada del techo, si vida, su cara estaba muy hinchada y...- Alice rompió en llanto- Tyler, mamá se suicidó, mamá ya no está aquí-

Abracé a Alice y también me puse a llorar como un bebé. Me llené de emociones, tristeza, ira, impotencia, culpa, pero más que nada estaba molesto con ese bastardo que se hacía llamar mi padre, sólo quería que él también se muriera y pagara por todo lo que nos había hecho pasar no quería verlo más.

Me despegué de Alice y le pedí que se marchara, les pedí a ambas que se marcharan de mi habitación, que quería estar solo...

-Déjenme solo

-Pero Tyler, aún no acaba tu sesión- dijo Alice

-Déjenme solo

-Tyler por favor, déjame ayudarte con esta situación- dijo Olivia

-QUE ME DEJEN SOLO, SOLO LÁRGUENSE DE MI HABITACIÓN, NO QUIERO VER A NADIE, LÁRGUENSE- les grité

Ambas salieron de mi habitación y me dejaron solo, tomé mi almohada y rompí a llorar. Sentía que de mi nariz escurría el moco, y mi respiración se empezó a hacer más rápida, mi aliento cada vez lo sentía más caliente.

Levanté mi cabeza de la almohada y vi a Bruno sentado al lado de mí, me apenó bastante el hecho de que me estuviera viendo llorar de esa forma, mi cara estaba húmeda por el llanto, mis ojos estaban rojos e hinchados, y mi nariz estaba tapada por la mucosidad. Bruno me miraba con cara de angustia, mantuve contacto visual con él por unos segundos y me preguntó:

-Tyler cariño, ¿qué pasa?

-Mamá... mamá se suicidó...-volví a llorar desesperadamente, Bruno solo me abrazó muy fuerte

-Cariño, relájate...- dijo Bruno mientras le caían unas lágrimas de sus ojos- yo te voy a apoyar, a ti y a Alice, prometo que nunca los dejaré solos, voy a procurar que nada les falte, Ty, voy a estar a tu lado.

Me despegué de él y me limpié la cara, vi fijamente a Bruno y de mi boca no pudo salir nada más que un simple "gracias".

Sinceramente no sabía qué decirle, me llené de emociones que desconocía, creo que por un momento supe y entendí como se sentía la familia del señor de la habitación 106. Sólo que me llené de impotencia, enojo, tristeza, emociones que jamás había experimentado me invadieron completamente...