[04] Beat It

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Vestía una gran suéter azul, junto a unos jeans un poco ajustados, su hermano estaba probablemente dormido, o quizás estudiando, por lo que al abrir su puerta procuró hacer el mínimo ruido posible.

Giró su vista de lado a lado en el pasillo, y hasta estar seguro de que Louis no le vería, corrió sigilosamente escaleras abajo hasta tocar el pomo de la puerta principal. Tomando un gran respiro, se cubrió con un abrigo y salió de la casa, sonriendo internamente al lograr su cometido.

Caminó unas casas más lejos, asegurándose de estar lo suficientemente alejado de su hogar como para que Lou le vea. Sacó su móvil, presionando con las mejillas rojas y una sonrisa el número –que consiguió hace unos días– de Liam.

Estaba sonando, hasta que escuchó la dulce vez del castaño.

—¿Zee?—pregunta con confusión.

—Hola, Li.—sonríe, pero rápido aprieta los labios.

—¿Ocurrió algo? ¿Estás bien?—su corazón vibró de felicidad al percibir la preocupación en sus palabras.— ¿Zayn?

—¡Ah! Sí, yo... Estoy bien. Descuida. —movió sus pies con nerviosismo. Si Liam se negaba, su arduo trabajo por salir de casa y arreglarse más de lo habitual se iría a la basura. Sin duda lloraría toda la noche si Liam se negaba.— ¿Recuerdas de lo que hablamos esta mañana?

Pudo sentir a Payne sonreír.

—¡Claro! ¿Por qué?

—Bueno, estoy a unas calles de mi casa
Puedes, no sé, tal vez, ¿ve-venir?

Un silencio inundó la conversación, haciendo que Zayn pensase que estaba pareciendo un tonto nuevamente al tartamudear y morder sus labios, era obvio que Liam se negaría. No tenía tiempo, ¿por qué gastarlo en un bebé llorón como él?

—... en quince. Adiós, Zee.

La llamada se cortó y Zayn frunció el ceño, observando su móvil sin poder entender lo que acababa de escuchar. Estaba tan metido en sus pensamientos que no escucho nada de lo que Payne dijo. ¿Iría? ¿O acaso mandó a Louis para que fuese por el y llegaría en quince minutos? Sinceramente, creía más probable la segunda opción.

Se abrazó a si mismo, aún en el mismo lugar. No quería volver a casa.

Ya se estaba dando por vencido nuevamente. Recordó aquella noche de películas, donde por más de una hora Liam sujetó su mano dándole caricias. Se quedó dormido en su hombro, y después de eso ya no supo más, podía escuchar las voces de los amigos de su hermano, al igual que la risa de Payne, pero no entendía de lo que hablaban.

Seguramente se burlaban de él en secreto.

Una luz se acercó a su lugar, provocando que cubriese sus ojos. Al momento de escuchar un motor apagarse, abrió los mismos, topándose con un sonriente Liam bajando se su auto.

—Hace mucho frío. Hubieses regresado a casa, igual podía ir por ti.—confesó, quitándose su chaqueta y entregándosela al moreno. Zayn estaba rojo, y no era por el frío.— ¿Estás seguro de esto?

—Sí... Un cambio no hará daño.—susurró con un poco de inseguridad.

—¿Seguro no quieres que Lou vaya con nosotros?—rápido negó.

Sí su hermano iba, no le dejaría estar cerca de Liam, ni mucho menos adentrarse para bailar o tomar una gota de alcohol. Probablemente Liam tampoco le deje beber, pero al menos puede bailar y divertirse.

Louis siempre le protegía de todo. Y Zayn no se quejaba, pero ahora quería estar con Liam. Disfrutar de una buena fiesta sin que su hermano lo limite.

Conocía poco a Liam, pero sabía que jamás dejaría que algo malo le suceda. Estaba completamente seguro.

Así que, sin más peros, subió al auto de Liam, sonriendo al sentir la chaqueta encima de sus hombros.



☁️



Llevaban minutos, ¡minutos!, y Zayn ya se había perdido.

Liam comenzó a preocuparse, le buscaba por todos lados, ignorando a las chicas que se le insinuaban. No podía dejar a Zayn solo. Si algo le pasara, jamás se lo perdonaría.

Estaba a punto de parar todo, siendo que su amigo era el anfitrión, pero pudo ver la cabellera azabache de Zayn entre la multitud, sin embargo, este bailaba con una linda sonrisa en su rostro. Sabía que no estaba ebrio, pues en cuanto lo vió, dejo de moverse –porque sinceramente bailaba muy gracioso– sonrojándose y alejándose de todos.

Liam lo siguió, con una sonrisa, hasta estar delante de él.

—Bailas bien.—alagó, ganándose una tímida sonrisa por parte de Zayn.— ¿Por qué no vamos?

Malik negó.

—Ya estoy... Cansado. Sí, cansado.

Liam lo miró incrédulo, levantando una ceja. Sonrió, captando la atención de Zayn, elevó uno de sus brazos, extendiéndole una de sus manos, esperando que Zayn la tomase.

—Vamos... Sacudamoslo.—dijo, moviendo de forma graciosa sus caderas, haciendo reír al rubio.

Zayn, con más seguridad, tomó la mano del castaño, caminando juntos a la pista para seguir bailando.

Ahora, se sentía un poco menos tonto.













DUMB [Ziam]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora